Ir al contenido principal

Nirvana - Nevermind (Geffen Records 1991)



En el año de las Olimpiadas de Barcelona y la Expo de Sevilla un amigo abrió un pub en el barrio donde vivíamos. El garito estaba orientado a la música pop y a las niñas pijas y muy de tarde en tarde sonaba algún tema más ruidoso. 

La suerte quiso que los jueves fueran declarados día del rock duro (total, allí los jueves no iba nadie) y nos cediera el control de la mesa a los amiguetes. Muy contentos llevábamos nuestros vinilos al local, pinchábamos canción tras canción, hora tras hora, copa tras copa y solíamos salir cuando barrían las calles haciendo más eses que una serpiente ciega. Al final, entre unas cosas y otras, raro era el día que no acabábamos intercambiando discos. 

El fin de semana, un erial de pop descafeinado, música electrónica y poco más. Harto de escuchar las quejas de los parroquianos más duros, nos pinchaba insistentemente el Smell like teen spirit de Nirvana, muy de moda entonces, hasta que le cogimos verdadero asco a esa entradilla guitarrera tan famosa. Con estas, un jueves, al meter mis vinilos en la caja correspondiente, vi el de Nirvana, este que enseño hoy, y lo cacé sin pensármelo dos veces. Robé el vinilo, vaya. No tenía intención de quedármelo, tan solo de hacerlo desaparecer un tiempo para dejar de escuchar aquella canción todos los fines de semana, tanta tirria le tenía. 

Muy ufano, el finde siguiente fui para el bar (a ver qué me pones ahora, majete) y a las tantas, cuando le pedimos un poco de marcha buena... ¡vuelve a pinchar la misma canción! Yo no me lo podía creer. El tipo se había comprado el cedé... porque no encontraba el vinilo y como aquella canción nos gustaba tanto...

Estuve mucho tiempo sin pinchar el vinilo en casa. Cuando Nirvana editó In Utero me decidí a hacerlo. Tal vez esta historia justifica esa animadversión hacia las canciones de Nevermind. En el fondo, creo que es un
disco sobre-valorado, sobre-expuesto, sobre-dimensionado. ¿Me gusta? Hay canciones buenas, muy buenas, como Lithium, Something in the way, On a plain o Come as you are (Sí, el mega single es una canción buena también). De verdad que prefiero In Utero. Y, desde luego, otras bandas salidas de Seattle tienen mejores trabajos: Alice in Chains, Pearl Jam o Soundgarden, por ejemplo.

El vinilo, que es al final lo importante de esta historia, aunque algo machacado por fuera (vida de bar) y con alguna marca en el plástico, merece la pena tenerlo en la colección. Esta es la edición nacional y además de la funda con las fotos y los créditos trae una separata con las letras. Bien acabado, sin lujos, y con su correspondiente pegatina de "Nº 1 en USA". La foto de la famosísima portada la realizó Kirk Weddle.

Pasad buen fin de semana y aprovechad para recordar el año de la explosión del grunge.

Nirvana - Smell like teen spirit


Nirvana - Come as you are


Nirvana - Something in the way







Comentarios

  1. Todos sabemos que el riff de Come as you are está copiado del de Eighties de Killing Joke. Lo siento, pero no puedo con ellos. Para mi, no solo el disco, sino la banda entera estaba sobrevalorada. Lo mejor de todo... la pegatina, cutre como ella sola. Saludos, amigo :D

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Je, je, bueno, a mí toda la movida que metieron bajo el paraguas del grunge me gustó, unas cosas más que otras, desde luego. Las pegatinas no tienen precio. Igual vale más con pegata que sin ella. Un saludo.

      Eliminar
  2. Pues que queréis que os diga, a mi me gusta. El disco entero está lleno de buenos temas. Yo escuche Smell like teen spirit por la radio y no tardé ni un segundo en ir pillarme la cinta a una tiendecita de discos que había en la calle Illescas en Aluche. Lo de la cinta es que por aquel entonces vivía en Madrid y no tenía el tocadiscos. Días más tarde también pillé el disco. Por aquel entonces también andaba un poco harto de tanto metal, hard, heavy y de tooooo jaja.
    Pues claro que están sobrevalorados pero por la muerte de Kurt y porque estaba todo el puto día sonando en radios y en la MTV. Que copia tal o cual riff, el mundo está lleno de copias ..... También prefiero a Pearl Jam pero no renuncio a Nirvana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si el disco está bastante bien. Pero de los cuatro grandes de Seattle son los que menos me gustan. Incluso In Utero tenía mejores temas. Simplemente, un álbum bueno con algunos temas muy logrados y mucha exposición en los medios. Justo es reconocer los méritos de Cobain, desde luego.

      Eliminar
  3. Muy buena entrada. Yo también le cogí tirria a un disco en concreto que pinchaban sin cesar en pub al que íbamos mucho y como el que comentas no era rockero. El disco en custión era Histeria de Leppard. Pero el fulano no se conformaba con poner un par de temas, lo ponía entero una y otra vez,sin parar. Acabé odiándolo,aparte de que prefiero Pyromania.
    Sobre Nevermind, a mi me gusta y coincido con Paco que está sobrevalorado por la muerte de Kurt. Yo también andaba esos días hastiado de tanto metal. Pero es que el heavy de esos años había bajado mucho en calidad.
    Me quedo mucho más tranquilo sabiendo que no soy el único que robaba discos en mis años mozos jajajaja.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Este será el único que confesaré haber robado... ;))

      Eliminar
  4. Esta claro que , te gusten o no, forman parte indeleble de los 90s y de un movimiento, el Grunge, que aunque algo impostado, también tubo sus buenas cosillas. Una entrada que hacia falta en el blog.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Al final van a aparecer por aquí todos toditos, jeje. Saludos.

      Eliminar
  5. Te dire que no tengo este disco en ningún formato...coño, si no tengo ningun disco de Nirvana, eso si El vedder me encanta.
    Divertida entrada.
    Salud.

    ResponderEliminar
  6. Ciertamente, era muy buen disco; pero perjudicó mucho a la escena. De repente, bandas que ni tenían nada que ver con Nirvana, eran metidos en el mismo saco; y aquéllos que llevaban más tiempo que ellos, eran acólitos de Nirvana para la prensa. ¿Buen disco? Sí. ¿Irregular? Mucho; Cobain demostraría en el Unplugged y en In Utero que era mejor. Y sí, Pearl Jam es algo irrepetible.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cada vez me caes mejor, fíjate, jeje. Has hecho una buena lectura de lo que pasó, al menos, en España. Cobain seguro que tenía cosas que demostrar, como en los que mencionas, pero nunca lo sabremos.

      Eliminar
  7. Yo también le cogí manía y se lo vendí a un compañero de instituto en COU. Pero este año me lo he vuelto a comprar...cosas que pasan. :@

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se cierra el círculo o algo así. Es de los que hay que tener. Al fin y al cabo, es un histórico del rock.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Power Trip - Nightmare Logic (2017)

  El disco de esta semana es uno de mis favoritos de los últimos años. No es un género que actualmente escuche demasiado pero sí que me gusta reescuchar los mejores trabajos que se han sacado en el mismo. Es por ello por lo que desde hace tiempo estaba pendiente de incorporar a mi colección. Power Trip no se anda con rodeos. Nightmare Logic es una descarga de thrash moderno con actitud hardcore, que toma las raíces del género y las machaca con rabia y contundencia. Ocho temas, poco más de media hora, y ni un momento de tregua.                                                   La fórmula es simple, pero funciona como un mazo: riffs afilados, ritmos implacables y una producción que potencia el golpe sin necesidad de embellecerlo. "Executioner's Tax (Swing of the Axe)" se ha convertido en un himno por méritos propios: groove pegajoso, mensaje directo y una ej...

Georgia Satellites - Georgia Satellites (Elektra, 1986)

  Este podría ser uno de los mejores discos debut de los ochenta si fuera de verdad un disco primerizo. Según como se mire, porque la historia que llevó al parto de esta joya que hoy nos ocupa tiene mucha miga. Remontémonos al inicio de 1983 cuando unos muchachos de Georgia consiguen grabar una maqueta de seis canciones en unos pequeños estudios de Atlanta con Jeff Glixman a los mandos. ¿Y por qué un productor tan afamado se fijó en estos desconocidos? Jeff era un tipo de Atlanta que gustaba de tomar cervezas en los garitos de la zona, allá donde hubiera actuaciones, y coincidió varias veces con “The Satellites” (que así se llamaban por entonces). Congeniaron y les hizo de celestina para aquella primera maqueta. Cuando las fechas para grabar un disco “de verdad” estaban a punto de llegar el verano siguiente, los muchachos partieron peras: adiós banda, adiós oportunidad.  Ya sabemos en este blog que la suerte aparece en el camino de muchos de nuestros músicos favoritos. Y en es...

Magnum - The eleventh hour (Jet Records, 1983)

Todas las bandas alcanzan en algún momento un “punto final”: si sobreviven a esa crisis el futuro del grupo está asegurado; de lo contrario, ¡adiós, amigos! En el caso de Magnum , este es el álbum que cambió la historia de la banda, el que pudo haber sido el final y se convirtió en la puerta al futuro.   Porque, cuando los muchachos estuvieron listos para grabar el que sería su cuarto disco de estudio, se encontraron con un “pequeño” contratiempo: la compañía (Jet Records) se negó a poner dinero para un productor o un estudio decente. Y, eso, teniendo en cuenta que su anterior Chase the dragon había alcanzado un decente puesto 17 en las listas de ventas británicas. Tony Clarkin se vio en la obligación de encargarse de la parte técnica por primera vez (en el futuro lo haría numerosas veces) y en unos estudios que, según sus palabras, “tenían un nivel tecnológico de 1930”. Bob Catley hizo de ayudante de producción y Dave Garland de ingeniero. "¡Vamos a hacer una tortilla de pat...

Ozzy Osbourne - Blizzard of Ozz (Jet records, 1980)

Hoy traigo al blog uno de los discos más importantes de la historia del hard’n’heavy de todos los tiempos, el inicio de la carrera en solitario de un mito, el gran John Michael Osbourne , conocido mundialmente como Ozzy . Y aunque las circunstancias que rodearon al artista en ese momento vital son harto conocidas y se puede encontrar por la red información en abundancia, (creo que) no está de más que haga un pequeño resumen muy condensado en esta entrada.    Estamos en 1970, Black Sabbath han editado su primer disco y el infame manager Don Arden se ofrece para llevar la carrera del grupo. Ozzy Osbourne , el cantante de la banda, tiene 22 años y en las oficinas de Arden conoce a la hija de este, Sharon , de 18. Ellos aún no lo saben pero en unos años la joven se convertirá en una figura imprescindible para el alocado vocalista.    El tiempo pasa y los Sabbath con...

Grand Prix - Samurai (Chrysalis, 1983)

Si quieres cardarte las melenas, ajustarte los pantalones y trasladarte a un garito británico de principios de los ochenta, súbete a este Samurai, no solo por las canciones con un toque de pomposo AOR con guitarras heavies, también por la producción y la mezcla: esas baterías, esos coros, esos tecladitos. Y ten en cuenta que la masterización reciente (la que escuchas en redes y plataformas), ha limpiado un poco el efecto final. Love it or leave it, no hay otra. Y aquí, lo amamos. En Grand Prix se reunieron talentosos músicos jóvenes. En su primera versión, allá por 1980, contaban con Bernie Shaw a las voces, Michael O’Donoghue a las guitarras, Ralph Hood al bajo, Andy Beirne a las baterías y Phil Lanzon a los teclados. Todos se encargaban de cantar y hacer coros. Tras la edición de su primer largo, llamado como la propia banda, Shaw dejó el grupo y fue sustituido por Robin McAuley, quien grabaría los dos siguientes: There for none to lose (82) y este que hoy os traigo. La banda se sepa...