- No es por quitarle mérito al puenting o al rafting, pero deporte de riesgo era ser adolescente en la era pre-internet y gastar tu exigua paga semanal en un disco basándote sólo en su portada. - Ok, boomer- te oigo decir, y tienes razón, pero supongo que si quisieras una descripción fría y objetiva de un vinilo no estarías leyendo este blog, así que déjame seguir, por favor Esto viene a cuento porque el otro día, en un mercadillo, recuperé el placer de comprar un vinilo únicamente por su carátula, sin tener ni idea de qué grupo era ni googlear sobre él; afortunadamente no tuve que gastarme mi paga (aún exigua, pero ya no semanal) y esta es la ilustración por la que desembolsé 5 euros y que al llegar a casa y pinchar el disco vi que habían sido muy bien invertidos Es un disco de importación, como reza la pegatina de Discos La Cara B (no tengo ni idea de dónde podría ser esta tienda, así que si a alguien le suena el logo, me haría ilusión descubrir su procedencia) Podríamos catalogar