¿Puede un álbum imprescindible pasar desapercibido, caer en el olvido de cualquier lista "best of" de su género, perderse en las estanterías cogiendo polvo? Sucede muchas veces y todos tenemos vinilos que adoramos, que defendemos a muerte, que consideramos necesarios en su estilo, pero que el mundanal mundo ignora. Y eso me sucede con Metal Church y su Blessing in disguise . Un disco (casi) perfecto de principio a fin, un álbum que combina como pocos el heavy metal y el thrash de los ochenta. La banda había sido formada por el guitarrista Kurdt Vanderhoof en 1980; Metal Church era el apodo de su apartamento en San Francisco. No fue hasta 1984 cuando editaron su debut con Elektra Records y dos años después un fantástico The Dark . Con la atención del género y cierto éxito underground, Vanderhoof decide dejar su propia banda al mismo tiempo que el cantante David Wayne abandona la formación. Vanderhoof mantiene la colaboración con sus excolegas, compone la mayoría de los corte