Las canciones de El último de la fila, son cartas que me dicen cosas bonitas, cosas como que a veces nunca tuve nada dichas con suavidad icomprensibles de antiguos aromas flotando en el aire que son como metralla a la carne como la sangre al alcohol mientras me acuerdo de ti l Desde que se separaron, borraron el árbol que hacía sombra en tu puerta y ahora estás en pie en tu gabia de vértigo y tu silueta que tizna las nubes la veo desaparecer Dejándote como barca en la mar que ha roto el timón y al pairo va Sin ninguna duda, como dice el poeta, han sido los que con su brisa, mejor han conducido el humo azul del cigarrillo... sin romperlo. angel