Hoy os traígo una reciente incorporación
a mi colección. Si la última ( y primera) vez que me pasé por aquí fue para
hablaros de un disco extremo como pocos esta vez os traigo el último trabajo de
una de las bandas más míticas que existen dentro del heavy metal, los
británicos Iron Maiden.
Cada vez que la banda saca un trabajo tenemos “polémica” entre los que critican sus nuevas creaciones porque añoran el sonido de los discos más clásicos y los que defienden las composiciones actuales. Yo soy de los que piensas que las bandas evolucionan y que esos temas o discos más clásicos quizás lo son porque, aparte de que son grandes temas, cuando los escuchamos por primera vez éramos gente joven donde la variedad y el acceso a la música ni mucho menos era como hoy en día, provocando ello que se mantuviesen guardados en nuestra memoria con un cariño especial. Hoy en día todo es más volátil y es más complicado que grandes temas perduren o les podamos coger aunque sea un mínimo aprecio.
Personalmente el último trabajo de los británicos me parece un discazo, de lo mejor que han lanzado últimamente. Sin perder su esencia han conseguido seguir sonando a Maiden pero no siendo repetitivos y como siempre teniendo un toque especial. Predominan los temas largos, las intros acústicas, y el buen hacer en cada uno de los temas. Estos tipos saben lo que quieren hacer y lo saben plasmar muy bien.
El disco lo componen 10 temas para una
duración total de 81 minutos, ahí es nada. Aunque el conjunto ralla a un altísimo
nivel destacaría por encima del resto 3 temas. “Stratego”, un tema muy de la
conocida vieja escuela con unos estribillos y una melodía que escuchar en directo
debe ser una maravilla. El siguiente tema es el que me ha conseguido fascinar
también, no se si por ser el primer single que lanzaron o por esa esencia western
que contiene es “The Writing on the Wall”. El último corte que me ha
maravillado es “Hell On Earth”, el que es para mí la mejor pieza del disco.
Para un servidor quizás estamos ante uno de los mejores temas de los últimos 30
años de la banda. Una de de esas canciones que va creciendo lentamente y que
logra introducirte hasta el fondo en la melodía. Brutal.
En cuanto a la edición en vinilo espectacular
y cuidada como viene siendo habitual en la banda. Se nota que sienten aprecio
por el formato físico. Triple disco de vinilo que en cuanto a forma y
distribución es idéntico a la edición que adquirí en su momento de su anterior
disco “The Bokk of Souls”. El único pero sería su precio, 47´99 €, para mí caro.
Es bonito, sí, pero no para ese precio.
¡Up the Irons!
¿Se repiten?, sí. ¿Harris se hace cansino con algunos sonidos autoplagiados?, sí. ¿Alargan demasiado lgunos temas?, también. Pero ¿estamos ante uno de sus mejores álbumes de este siglo?, por supuesto... muchísimo mejor que el Book of souls, sin ir más lejos. No obstante, como dices, el precio es carísimo. Otro estupendo aporte metalero para el blog. Saludos.
ResponderEliminarMucho mejor que el Book of Souls. Lejos de sus clásicos pero lo mejor que han sacado últimamente.
ResponderEliminarSiempre me pregunto qué pensará un chaval o chavala joven cuando se enfrenta a un disco de estos, de banda veterana con larga y fructífera carrera. ¿Preferirán este disco a sus clásicos por eso de la edad? La suya, claro. A mí me encanta que las viejas glorias saquen material nuevo. De vez en cuando te llevas una sorpresa. A mí este disco me gusta. No lo voy a escuchar demasiadas veces, porque se me hace largo, pero sí he seleccionado las canciones "más mejores" para las playlist. Y las tres que nombras son, quizá, las mejores. Estupendo (y caro) aporte al blog. Un saludazo.
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