Ir al contenido principal

AZUL Y NEGRO - DIGITAL ( 1983 )











Una de mis debilidades, como he comentado en otras ocasiones son los sintetizadores y la música electrónica. Muchas de las canciones que me eligieron, porque primero la música le elige a uno y después uno se la compra, son de este grupo pionero del tecno-pop español.

Muchos músicos del sonido electrónico se las ven y las desean para sacar una melodía pegadiza, con los dedos de una mano. Siendo la base principal de todo el tema. Pues para mi, estos señores de la música electrónica eran precisamente hábiles para mantener la sensación de placer al escuchar una melodía, más tiempo de lo normal en una buena canción. Temas como Isadora, No tengo tiempo y Me estoy volviendo loco, están en el subconsciente colectivo de todos nosotros.

De pequeñico, les perdí la pista cuando volvieron a salir en televisión en el gran programa de música que era Tocata, presentado por Ana Arce y Jose Antonio Abellán, con dos temas que fueron, Koto y Vuelva usted mañana, no defraudando en absoluto al público ya que fueron dos canciones melodiosamente positivas, como de costumbre en este grupo. 

Con la cantidad de sonidos sintéticos que ya han estado de moda, reconozco que es difícil encontrar nuevas melodías que no suenen a repetición. La síntesis es una locura. Sin embargo y  sin duda Carlos García-Vaso y Joaquín Montoya, son unos alquimistas del sonido muy resabiados y saben transmitir perfectamente emociones a través de sus notas.

Una muestra es el último trabajo de Carlos , que se ha hecho con el barco de Azul y Negro, en el que destacan las guitarras eléctricas, que personalmente pienso que se echan de menos en un sinfín de melodías, así como un acertadísimo bajo sintético , siguiendo la línea del placer melodioso del que hablaba antes.






Un saludo a todos
¡qué disfrutéis!

Ángel stoodupmelodica



Comentarios

  1. Aunque no era mi rollo, tela lo que habré escuchado a los AyN!! fiestas, discotecas, Vuelta Ciclista a España... Los buenos sintetizadores también se oían en este país en los 80. Si todos hubieran arrimado el hombro, la música de hoy sería distinta al bodrio que tenemos

    ResponderEliminar
  2. Mestoyvolviendoloco, mestoyvolviendoloco, mestoyvolviendoloco, pocoapoco pocoapoco... definitivamente no eran mi grupo de cabecera, pero también forman parte de la banda sonora de mi vida, sin duda.

    ResponderEliminar
  3. Y quién no tiene a estos tipos en el fondo de su cabeza. Si sonaron en todos lados. No voy a recuperar este disco ahora pero si suenan en algún garito una noche de estas... ¡a lo mejor son los ochenta!
    Es estupendo ver caras nuevas por el blog... aunque no sean jeabis, jeje

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Joe Satriani - Flying in a Blue Dream (1989)

Joe Satriani - Big Bad Moon - Live Expo 92 (Sevilla) ¿ Vaya presentación la del Tio Joe eh?, mira que plantarse en Sevilla, en medio de la Expo92 y vomitar el Big Bad Moon acompañado del gran Brian May, no había visto nada igual hasta la fecha y creo que a día de hoy, tampoco.  ¿Quién se esperaba ese Slide con la propia armonica? Bueno, que me dejo llevar por la emoción, Joe Satriani forma parte de la banda sonora de mi infancia.  Sin ningún tipo de duda, soy quien soy, musicalmente hablando, por mi primo, el cual me encamino hacia que escuchar y que instrumento tocar, a través de cintas como esta descubrí al profesor y a muchos mas.  En esta cinta destacan Joe Satriani, un tal Jason Becker, Steve Vai o el mismísimo Paul Gilbert con Racer-X, anda que no le di vueltas a esa cinta, aun la conservo.  Una cosa que llama mucho la atención de esta clase de músicos, es que las canciones, la gran mayoría de veces carecen de letras y eso no suele gustarle a todo el mundo. Hablar de un disco de

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero

Surgin' – When midnight comes (Music For Nations, 1985)

  Hoy traigo el único álbum (oficial) de la efímera banda neoyorquina Surgin , una joya escondida en el resto de saldo que fue el rock melódico de los ochenta, con un protagonista especial: Jack Ponti. Igual no tienes ni idea de quién es este personaje. Fíjate en la foto de abajo, es el de la izquierda, tocando con su colega de instituto John Bongiovi en un concierto del grupo que montaron juntos, Rest. Su poco éxito en aquellos primeros ochenta disolvió la historia, pero no así la amistad que ambos se profesaron. Aunque habría que revisar esas “amistades” de Mr. Bongiovi: para el puesto de guitarrista de su banda eligió a un desconocido Richie Sambora antes que a sus colegas Ponti o Snake Sabo. Por algo sería, claro. Jack formó su propia banda, que acabó llamándose Surgin, y consiguió editar este disco que hoy comparto por aquí, When midnight comes , en 1985. Compuso, produjo y tocó en él con la esperanza de alcanzar el estrellato roquero, objetivo que, obviamente, no logró. ¿Por

KISS-ASYLUM (1985-Mercury)

  A mediados de los 80, seguramente que de KISS lo único que quedaba era el nombre. Ace Frehley y Peter Criss no estaban físicamente y Gene Simmons aunque seguía figurando casi que tampoco, vivía más interesado en una carrera cinematográfica que no despegaba o produciendo a bandas del nuevo Glam Metal USA como Keel o Black N Blue.  Si me apuras, The Paul Stanley Band no hubiese sido un mal nombre, ya que el antaño "Chico de las Estrellas" era el único que realmente tiraba del carro en aquellos años. Gracias a él y a Vinnie Vincent disfrutamos de los primeros Kiss "desmaquillados" merced al aplastante por momentos "Lick It Up". Cuando Cusano fue expulsado por sus excentricidades la banda grabó el irregular "Animalize", que bueno, tampoco estaba tan mal y hasta nos brindó con un VHS de la época bastante subido de tono.  Y luego llegó "Asylum" con un nuevo guitarrista llamado Bruce Kulick y otra oportunidad para seguir en la reciente rueda

Cream - Wheels of Fire (Polygram Records, 1968)

Me he llevado una pequeña sorpresa al bucear en el blog buscando este disco, por aquello de no repetir entrada, y comprobar que aun nadie ha reseñado el tercer largo de los ingleses. Imagino que mi predilección por Clapton hace que la mayoría de los clásicos del guitarrista se me antojen imprescindibles, de ahí la sorpresa. Pero bueno, aprovecho yo para dejar aquí mis impresiones sobre este Wheels of fire , además de unas fotos de la edición en vinilo, que me parece espectacular.  Antes de entrar en materia, me gustaría aclarar algo: pese a que conocí a Cream por Clapton, la realidad es que los dos gallos del gallinero eran sin duda Jack Bruce (bajo y voz) y Ginger Baker (batería), hasta el punto que en este disco el guitarrista no aparece acreditado como compositor. Sin duda su mano y su característica voz fueron imprescindibles para el sonido de la banda, pero las fuertes personalidades de los dos personajes mantenían el equilibrio y hacían que Clapton, que podría estar soleando dura