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Black ‘n Blue – Black ‘n Blue (Geffen – 1984)


Bueno, pues ya estoy aquí otra vez –espero que hayáis tenido unas vacaciones tranquilas y provechosas– y regreso con una de mis últimas adquisiciones, un álbum que hacía años que quería y del que por fin os puedo hablar en este espacio. Como podéis ver me refiero al debut de Black ‘n Blue, un álbum de título homónimo que editaron a mediados de los 80 los miembros de una banda de Portland que puede considerarse de la órbita KISS, no sólo porque Simmons los produjo años más tarde sino porque su guitarrista cofundador no es otro que Tommy Thayer, kissmaníaco y actual encarnación de Space Ace en la banda de Stanley & Co. Formados inicialmente en 1981, gracias a Brian Slagel y su seminal Metal Massacre, consiguen ser conocidos propiciando su traslado a Los Angeles, en donde se unen al circuito de clubs en el que ya estaban otras bandas como Ratt. Total, que no tardaron en ser fichados por Geffen, que les envió a Alemania para que Dieter Dierks les produjese en sus estudios de Stommeln, no muy lejos de Colonia. 

La banda estaba integrada por Jaime St. James a las voces, Tommy Thayer a la guitarra y coros, Jeff Warner a la guitarra rítmica y coros, Patrick Young al bajo y coros y Pete Holmes a la batería. Y para que todo el mundo les conociese, aparecieron con sus pintas rockeras en una portada de Stan Watts –el de la sabbathiana Live Evil, entre otras– diseñada por Richard Seireeni y Jay Vigon


El track list del elepé era: 

A 
The strong will rock 
School of hard knocks 
Autoblast 
Hold on 18 
Wicked bitch 

B 
Action 
Show me the night 
One for the money 
I’m the king 
Chains around heaven 

Lo primero que escuchamos es The strong will rock, un hard rock de alto nivel, con estribillo pegadizo, una buena base ritmica –geniales en todo el disco Young y Holmes– y un estupendo trabajo de guitarras. Vamos, una presentación estupenda para lo que es el primer tema de un disco de debut. Con School of hard knocks siguen la misma tónica, en un estilo muy ochentero –los que vivisteis la época sabréis qué quiero decir–, alegre y desenfadado. Mucho más cañera es Autoblast, que precede al pelotazo Hold on 18, el single que catapultó el álbum a las pantallas de la todopoderosa MTV y donde destacan St. James y Thayer. Algo parecida a la anterior en su estructura aunque más heavy es la también estupenda Wicked bitch, donde vuelve a brillar Thayer y que pone fin a la cara A. 


La segunda cara comienza con una de esas canciones a las que a todo el mundo le da por versionar, el Action de The Sweet. La verdad es que es un tema agradecido que a poca ilusión que le pongas queda bien y que les quedó resultón y bien ejecutado. Le sigue Show me the night, otro hard rock con energía, guitarrazos y coros muy recomendable. Mucho más ochentera es la estupenda One for the money, con la que es imposible no menear la cabeza. Menos glamourosa y más cruda –hasta que se oye a St. James uno podría esperar que cantase Biff Byford– es I’m the king, otro de los temazos del disco. Sin perder un ápice de energía y fuerza, Chains around heaven pone fin con un estilo a lo Accept a este muy decente y recomendable álbum de debut de los Black ‘n Blue

Como ya os he dicho al principio, un par de años después la banda se ganó la atención de Gene Simmons, quien les produjo dos álbumes y acabó trabajando con Thayer en temas para Hot in the shade. Y hablando del guitarrista al que tantos años he denostado hasta que Paul Stanley me ha abierto los ojos, en los años 90 le dieron un empleo en KISS como asistente para todo y responsable de recopilación de material para el megalibro Kisstory. De ahí pasó a organizar las KISS Convention y a trabajar con unos oxidados Frehley y Criss de cara a que recordasen sus partes para la gira de reunión, entre otros temas administrativos y de management
Y con la llegada del nuevo siglo, este fan de la banda recibiría el mejor regalo que la vida le podía dar, un puesto en el escenario junto a sus héroes y con el maquillaje de su idolatrado Ace Frehley. Pero esa es ya otra historia. 

Total, que estamos ante un estupendo debut y una joyita que los amantes del hard rock ochentero no os podéis perder. 

¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Ya tu sabeh que el hard rock no es mi estilo, pero estoy aprendiendo muchísimo sobre este estilo musical gracias a entradas como esta tuya. No conocía ni la banda ni su historia, claro, y me encanta abrir las orejas a cosas que muchas veces sorprenden. ¡Buen fin de semana!

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    1. Te entiendo. Por aquí aparecen a veces cosas que no son mi estilo y aunque lo intento, no me entran. No obstante, en ocasiones descubro discos interesantes o que -pese a no convertirme en fan- me hacen pasar un rato agradable. Espero que de tanto en tanto descubras entre mis hardrockadas algo que te impresione. Saludos!

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  2. Este lo tengo en mi lista de compras futuras. Un buen disco "de época", como apuntas. Coincido contigo en el papel de Thayer en Kiss. Había demostrado sus dotes como guitarrista (tampoco es un imprescindible) y se ganó su oportunidad en la banda. Las malas lenguas dicen que ya tocó el las guitarras en el "Psyco circus". A saber. Un abrazo.

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    1. Haces bien en tenerlo en la lista. Todos los de la banda son bastante reivindicables, aunque este primero es el que tiene más frescura. En cuanto a lo que comentas sobre Thayer, el propio Paul Stanley dice en su autobiografía que a la hora de grabar el disco "Ace y Peter ni se presentaron". Así que ata cabos. De hecho, en todos los discos de KISS tocan numerosos músicos, la mayoría de veces sin acreditar. Abrazo de vuelta.

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  3. Me suena un huevo. Fijate que creo que mi hermano tenía este disco. Y eso que no le molaban los Kiss.

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