Ir al contenido principal

King Sapo - Niño Gurú (2019, Rosevil Producciones)

 

 



La reunión había resultado más corta e insatisfactoria de lo habitual. Así que decidí dar un pequeño rodeo perdiendo mis pasos por alguna calle perpendicular a San Bernardo en vez de tomar la Gran Vía para llegar al templo de Debod, donde había dejado el coche. Terminé cogiendo la calle Noviciado que siempre me ha parecido coqueta. Tampoco iba muy atento, pero, de repente, me paré en un escaparate que anunciaba un comercio muy peculiar: una pastelería perruna. Sí, pastelitos, tartas y galletitas para nuestros amigos peludos de cuatro patas. Esas cosas que sólo puedes ver en las grandes ciudades, ya sabéis. Y fue entonces, curioseando esas delicias para gourmets caninos, cuando mis ojos cayeron sobre el escaparate de la tienda de al lado, que había pasado de largo momentos antes. Allí estaba el disco el vinilo que hoy os traigo, con un precio redondo de 20 euros. Pensé que el destino tiene formas curiosas de hacerte llegar a término de un viaje y no dudé en entrar en Marilians Records y llevarme a casa el primer trabajo de King Sapo y que pasara a ser el vinilo en el que más dinero he gastado. Resulta que había conocido la música del grupo germen de King Sapo, Eldorado porque una de sus canciones fue la elegida como cabecera de un programa de TV por web, sobre motos, que me descubrí hace unos años: ROCK & BIKERS, de Experienty TV. A eso programa también llegué de refilón, pues el que conocí a través de los perfiles en redes sociales de Carlos Escobedo, de Sôber, era el programa ROCK PALACE de la misma plataforma que, curiosamente, tiene su estudio en el pueblo donde vivo. En fin, tirando del hilo terminé escuchando toda la discografía bilingüe español/inglés de Eldorado. Muy disfrutona, la verdad. Creo que fue el grupo español que más escuché por aquellos años, 2016 para concretar más. Pero aquel grupo se acabó, finito. Vaya suerte la mía, descubrirles para verlos morir (mira, también me pasó lo mismo por aquella época con un grupo mostoleño llamado Melibea: resulta que tenía relación con su guitarrista/productor y cuando caí en ello, ya fue en sus estertores finales). Unos cuantos integrantes de Eldorado decidieron seguir su camino juntos, fundando estos King Sapo. Me enteré de esto otra vez de casualidad cuando tuve la suerte de poder cubrir el Mulafest/Garage Sound 2019 para la revista super7moto.com: el segundo día eran uno de los primeros grupos que actuaban. Como no los conocía, investigué antes de ir a verlos y fue cuando me enteré de dónde salían y qué tipo de música hacían. Por azares azarosos de la vida, ese segundo día no pude ir al inicio de los conciertos y llegué justo cuando ellos terminaban su mini bolo: los vi en su último tema, en el que sonaban como una apisonadora, y me di cuenta de que me había perdido algo muy bueno y tuve que conformarme con esa aplicación de música online que todos conocemos para, de vez en cuando, disfrutar de su único disco. Y así hasta el momento que os he intentado contar más arriba en el que el destino se aseguró de que ahora ya los pueda pinchar en mi tocata. El vinilo es de un precioso color rojo, al parecer edición limitada según pone en su web. Allí lo venden firmado por la banda. El mío no lo está a pesar de que el dueño de Marilians me comentó que los Sapo eran amigos suyos e, incluso, habían presentado en acústico este trabajo en la tienda. Porque amigos, Marilians, que empezó como magazine musical, resulta que es una de esas tiendas en las que quedarte a vivir, aunque quizás demasiado indie por ponerle un pero.

 

King Sapo son Jesús Trujillo, a la voz y guitarras, Andrés Duende, guitarras y coros, Javier Planelles, batería y percusiones y José Alberto Solís, al bajo. Los tres primeros fueron integrantes de Eldorado. Solís viene Wyoming y los insolventes).  Apoyados al hamond y a los teclados por Juan de Dios Martín, que se encarga de mezclar y producir el álbum. La grabación se hizo en los Estudio Uno Madrid y fue editado por Rosevil Productions. Los nueve temas del disco están compuestos como una sola persona por los King Sapo.

La música de King Sapo es muy parecida a la que hacia Eldorado, como es lógico suponer. Han dejado atrás uno de los signos de identidad de aquel proyecto: sacar los discos en español y en inglés. Ahora parece que se han decantado por el idioma de Rosendo, lo que resulta curioso porque si fuesen un grupo inglés/americano, con lo de moda que está el rock de los 70 en el que se inspiran, y cantando en el idioma del rock, lo estarían petando a lo grande.


 

El primer corte nos deja claro el camino que vamos a transitar en los próximo 40 minutos: riffs poderosos, afiladas guitarras y una base rítmica arrolladora proporcionada por Solís y Planelles. “Niño Gurú” comienza con riff de guitarra y percusiones que podían recordar a los Stones Roses. Pero ahí se acaba el parecido, pues estamos ante un gran tema de rock donde nos ofrece la salvación a traves del mismo rock.



Hombre humo” se acelera aún más, pero sabe intercalar una parte más melódica que rompe el tema en dos de forma muy acertada


 

Ya estamos en el tercer tema, “Alguien como tú” que podría ser perfectamente el single que rompiese en las radios, si aún existiesen radios como las de antes, claro. El tema más macarra en el que te lanzan a la cara que eres lo peor.


 

La vena americana se les marca en el cuello y en “Libre”, una balada melancólica. Por cierto, el trabajo vocal de Trujillo es espléndido en todo el disco. Siempre me pareció muy curioso su acento. Imagino que su ascendencia canaria mezclada con ese inglés con el que tan bien se desenvuelve y con el picante de vivir en El Ferrol, hace que salga algo así de especial. 



 

Volvemos a derroteros hard rock setentero tamizado por los 80 y 90, con “Lume” con ritmos tribales incluidos que cierra la cara A en unos vertiginosos tres minutos. Os pongo dos versiones del tema.

 


Nos levantamos del asiento y damos la vuelta al plástico para poder escuchar “Insomnios” con tintes psicodélicos y reminiscencias a los Doors, con el hamond de Juan de Dios.


 

Afrodita blues” que también comienza con un ritmo tribal, en consonancia con el tema sexual que nos relata. A mi me recuerda a Black Sabbath, pero tened en cuenta que de música viejuna no estoy tan puesto como otros compañeros viejunos del blog.


 

Enfilamos la recta final del disco con la más psicodélica del disco, como bien dice su título: “Super Psycho”. Con el falsete de Trujillo y la maraña sonora que tejen para crear una orgía sónica de más de seis minutos no sé qué haces que no la escuchas ya.


 

Y, ahora sí, cruzamos la meta con “Hablando con árboles”, otra gozosa balada, tempo en el que siempre se han movido muy bien, tanto en su época de Eldorado como ahora. El solo de Andrés y Trujillo aullando a la luna, te ponen los pelos como escarpias, la verdad.

Por cierto, si os habéis dado cuenta, los Sapo se han currado videos para todos los cortes. Otra cosa más que me recuerda a los Melibea, mencionados por ahí arriba, que hicieron los propio con su último trabajo, el EP Reloaded.

De este rey no quiero ser republicano.

 

 

 

Comentarios

  1. Otra de esas interesantes entradas con vivencias personales, además de la inevitable lista de datos. Siempre aportan color al vinilo protagonista. En cuanto a la obra en si, pues ya los he escuchado. Un abrazo Dani y feliz fin de semana.

    ResponderEliminar
  2. Ya, ya sé que te aburro... Brecha generacional...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajajaja... brecha generacional dice, ¡serás cabronazo!

      Eliminar
    2. No te ofendas, es normal. Me pasó lo mismo en la reunión, sindical a más señas, que tuve ese día jaja

      Eliminar
  3. ¡Qué alegría! Un lujo de vinilo. Aquí tienes a un fan de Eldorado, del que ya traje un vinilo al blog (https://ffvinilo.blogspot.com/search/label/Eldorado). Les vi en directo varias veces y por ahí me queda otro disquito que igual me animo a traer otro día. No es extraño que se escindieran estos tres músicos juntos; el bajista y jefe de Eldorado debía de ser buena pieza. Como dices, siguen con el sonido y el rollo anterior, lo que está muy bien. Una edición bonita y cuidada; quizá me anime yo también a comprarla. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Está chulo el vinilo rojo, la verdad. Mira si en la tienda que no compré yo tienen más copias porque creo que es el mejor precio. Luego, en la web de los King lo tienen firmado pero sale más caro. ¿Pillaste la super oferta del último de los Gritando? Creo que sigue disponible...

      Eliminar
    2. El último de "los Gritando" sigue por aquí en cedé nada más. Ya caerá.

      Eliminar
    3. Pues está agotado en corte inglés, Fnac, Amazon... Creo que sólo sigue la oferta en la casa del disco...

      Eliminar
  4. La edición es una maravilla, es preciosa. Al grupo, ni idea, no los he escuchado, pero lo haré, una vez más,, cuando acabe con los UFO, jajaja.
    Y por cierto, que ese paseo desde el Templo de Debod hasta llegar a San Bernardo es uno de mis favoritos 😉 Hace bien poquito que lo hice, por cierto. Buena entrada y precioso vinilo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Espero que te guste. Al menos, no te va a disgustar. Pásate por la tienda, que merece la pena.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Power Trip - Nightmare Logic (2017)

  El disco de esta semana es uno de mis favoritos de los últimos años. No es un género que actualmente escuche demasiado pero sí que me gusta reescuchar los mejores trabajos que se han sacado en el mismo. Es por ello por lo que desde hace tiempo estaba pendiente de incorporar a mi colección. Power Trip no se anda con rodeos. Nightmare Logic es una descarga de thrash moderno con actitud hardcore, que toma las raíces del género y las machaca con rabia y contundencia. Ocho temas, poco más de media hora, y ni un momento de tregua.                                                   La fórmula es simple, pero funciona como un mazo: riffs afilados, ritmos implacables y una producción que potencia el golpe sin necesidad de embellecerlo. "Executioner's Tax (Swing of the Axe)" se ha convertido en un himno por méritos propios: groove pegajoso, mensaje directo y una ej...

Magnum - The eleventh hour (Jet Records, 1983)

Todas las bandas alcanzan en algún momento un “punto final”: si sobreviven a esa crisis el futuro del grupo está asegurado; de lo contrario, ¡adiós, amigos! En el caso de Magnum , este es el álbum que cambió la historia de la banda, el que pudo haber sido el final y se convirtió en la puerta al futuro.   Porque, cuando los muchachos estuvieron listos para grabar el que sería su cuarto disco de estudio, se encontraron con un “pequeño” contratiempo: la compañía (Jet Records) se negó a poner dinero para un productor o un estudio decente. Y, eso, teniendo en cuenta que su anterior Chase the dragon había alcanzado un decente puesto 17 en las listas de ventas británicas. Tony Clarkin se vio en la obligación de encargarse de la parte técnica por primera vez (en el futuro lo haría numerosas veces) y en unos estudios que, según sus palabras, “tenían un nivel tecnológico de 1930”. Bob Catley hizo de ayudante de producción y Dave Garland de ingeniero. "¡Vamos a hacer una tortilla de pat...

Georgia Satellites - Georgia Satellites (Elektra, 1986)

  Este podría ser uno de los mejores discos debut de los ochenta si fuera de verdad un disco primerizo. Según como se mire, porque la historia que llevó al parto de esta joya que hoy nos ocupa tiene mucha miga. Remontémonos al inicio de 1983 cuando unos muchachos de Georgia consiguen grabar una maqueta de seis canciones en unos pequeños estudios de Atlanta con Jeff Glixman a los mandos. ¿Y por qué un productor tan afamado se fijó en estos desconocidos? Jeff era un tipo de Atlanta que gustaba de tomar cervezas en los garitos de la zona, allá donde hubiera actuaciones, y coincidió varias veces con “The Satellites” (que así se llamaban por entonces). Congeniaron y les hizo de celestina para aquella primera maqueta. Cuando las fechas para grabar un disco “de verdad” estaban a punto de llegar el verano siguiente, los muchachos partieron peras: adiós banda, adiós oportunidad.  Ya sabemos en este blog que la suerte aparece en el camino de muchos de nuestros músicos favoritos. Y en es...

Rick Springfield - Living in Oz (1983, RCA)

    Pues voy a ser sacando mis mierdas ochenteras, tras los Mr. Mister y Bruce Hornsby . Como ya esperáis de mí, todo en una balanza que se decanta más por el pop que por el rock, pero con algún guitarreo majo que al final podría hacernos inventar un género hard pop o similar. Y esta vez el protagonista es el cantante y actor australiano, aunque su carrera se desarrolló principalmente en USA, Rick Springfield . El bueno de Rick comenzó a tocar en grupos en su Australia natal, también una época en Inglaterra cuando su padre fue destinado allí. Todo esto en los 60/70, debutando en solitario en 1972 con Begginings . Tras editar este disco, se mudó a USA donde tuvo un éxito moderado con el single “ Speak to the sky ” que hizo que su disco se metiera en el top 40 de los más vendidos. Hasta el inicio de la siguiente década, sacó más discos y empezó su carrera actoral pero su imagen se quedó en la del adolescente/joven. Sin embargo, todo esto cambió en el 81. Una doble explosió...

The Killer Barbies - Dressed to Kiss (Subterfuge, 1995)

Hace pocos días me llegó la noticia de la publicación del nuevo single de Killer Barbies. Excusa perfecta (aunque no hacía falta ninguna), para recuperar su primer disco. Uno de esos discos que en lo personal marcaron una época. Como se suele decir, lo que hoy traigo aquí no es un simple trozo de plástico, aquí hay vivencias y recuerdos de una época determinada de mi vida. Un disco que tenia en mi lista para FFVinilo desde hace tiempo, y que ha llegado el momento de compartir con todos vosotros. Lo cierto es que hace muchos a ños que no lo escuchaba completo. Lo hago ahora para escribir este texto, y, a pesar del paso del tiempo, no ha cambiado nada mi admiración hacia este trabajo. Me sigue pareciendo una absoluta genialidad. Es verdad que, en este caso, me resulta imposible separar el aspecto estrictamente musical con los recuerdos que acompañan a esta música. Pero eso no tiene nada de malo. Para mi es uno de los discos más importantes de la década de los 90. Durante ese peri...