—¡No me gusta! ¡No me gusta como suena, joder! Aburre a las ovejas... —se desespera Mark, mientras repite una y otra vez los acordes.
—Te empeñas en tocarla con la National, pero ya te dije el otro día que la toques con la strato roja. Quedaría mucho mejor, ¿por qué no pruebas? —sugiere David, mientras la coge y se la da a su hermano.
Mark coge la guitarra y la acaricia. La había comprado hacía poco y era un sueño hecho realidad. Como la de Hank Marvin, igualita. Como la que le pidió a su padre y no pudo comprarle, por ser demasiado cara. Pasa los dedos por las cuerdas, sin la púa, y empieza a tocar los acordes de la canción de nuevo. Y funciona, como si fuera magia, las notas cobran vida. David le mira y sonríe.
—¿Ves? Si es que me tienes que hacer más caso… Ahora suena mucho mejor.
***
La “niña de los singles” vuelve. Y hoy con un 2x1, ni más ni menos, con dos versiones del mismo single, una holandesa y la otra española. Ya he contado más de una vez por aquí que soy muy tiquismiquis con las ediciones discográficas, y me gusta comprar las correspondientes al país de donde es originario el grupo o el artista en cuestión. En este caso no lo hice, porque no me gustaba la portada de la edición británica, así que compré la holandesa, la de la strat roja, y estaba tan contenta con ella, pero uno de esos días que andaba curioseando por una tienda de discos, me encontré con la edición española, a un precio irrisorio y en muy buen estado, y siguiendo un impulso, decidí llevármela a casa. ¿Por qué? Pues no lo sé. Supongo que por todo lo que me gusta esta canción, y porque la portada es diferente… Yo que sé. Tontunas de coleccionista, aunque soy una coleccionista peculiar que sigo mis propios criterios, no de las que lo compran todo de los artistas que les gustan (ya estaría arruinada solo con Depeche Mode, malditos sean xD)
Vinilos
La cuestión es que tengo estas dos ediciones del mismo single, el “Sultans of Swing” de los Dire Straits, el primer sencillo de su primer disco, llamado como ellos. La edición holandesa es la blanca y roja, como la famosa Stratocaster del 61 de Mark, la que usó en la grabación de este álbum, y la edición española es blanca y negra. Ambas están editadas por Vertigo.
Dire Straits
Los hermanos Mark (guitarra solista y voz) y David Knopfler (guitarra rítmica), nacidos en Glasgow (Escocia) pero criados en Newcastle tras mudarse la familia allí y sus amigos John Illsley (bajo) y Pick Withers (batería) de Leicester, formaron Dire Straits en Londres en 1977. El músico más veterano era Withers, que tenía más de diez años de experiencia tocando la batería en distintas bandas y como músico de sesión. En el momento en que se formó el grupo, Mark trabajaba como profesor en la escuela de arte, Illsley estudiaba en Goldsmiths 'College y David era trabajador social. Tras muchas vicisitudes y rechazos, en 1978 pudieron grabar su primer disco, llamado como el grupo, Dire Straits, donde está incluido este primer single, que se convirtió en un éxito y en una de sus canciones más conocidas.
De izquierda a derecha: John Illsley, David Knopfler, Pick Withers y Mark Knopfler
Sultans of Swing
La compuso Mark Knopffler con una National Steel (esa preciosa guitarra de cuerpo metálico) pero no le encontraba sentido. La encontraba aburrida y sin vida… hasta que pudo comprarse su famosa strat “fiesta-red” de 1961. “Cobró vida tan pronto como la toqué en esa Stratocaster del 61 ... los nuevos cambios de acordes se presentaron y encajaron en su lugar”. En aquel momento no sabía que haría historia y que su manera de tocar la guitarra sería única. Cualquier acorde, por sencillo que sea, en sus dedos suena distinto y especial, en parte por no usar púa.
La letra se inspiró en la actuación de una banda de jazz que tocaba en la esquina de un pub casi vacío en Deptford, al sur de Londres. Al final de su actuación, el cantante principal anunciaba su nombre, los “Sultanes del Swing” y Knopfler encontró gracioso el contraste entre la apariencia del grupo, desaliñada y algo cutre, su entorno y su nombre, tan grandilocuente.
And a crowd of young boys, they're fooling around in the corner
Drunk and dressed in their best brown baggies and their platform soles
They don't give a damn about any trumpet playing band
It ain't what they call rock and roll
And the Sultans
Yeah, the 'Sultans' played Creole. Creole, baby
Una panda de chavales hace el tonto en la esquina
Borrachos y vestidos con sus mejores pantalones anchos de color marrón y sus suelas de plataforma.
Les importa un bledo esa banda que toca la trompeta
No es lo que ellos llaman rock and roll
Y los “Sultanes”
Y los “Sultanes” tocaron Creole [“King Creole”, canción de Elvis Presley]
El cantante de folk y artista de Columbia Bill Wilson afirmó haber coescrito la canción, y aunque no obtuvo reconocimiento como compositor en el lanzamiento, afirmó haber recibido una compensación monetaria por su contribución. Algo es algo…
Seis años después de su lanzamiento, esta canción alcanzaría la gloria al tocarse en directo en el Hammersmith Odeon de Londres e inmortalizarse en el Alchemy, ese disco irrepetible y enorme. Con una coda final de casi once minutos (a partir del 6:57) es absolutamente gloriosa y siempre la escucho hasta el final, da igual lo que esté haciendo. No hay nada más importante que escuchar ese punteo, hasta que Withers no le da el golpe final de batería, me lo sé nota a nota y puedo “cantarlo” sin equivocarme en ninguna. Oro puro.
El buen rollo que desprendían en el escenario compensa esa cinta y esas muñequeras de tenista que lucia Mark, completamente innecesarias.
Os dejo disfrutándola, que bien lo merece. Tanto en su versión “LP” como en la del directo, es una maravilla. Y cosas así nos hacen falta en este momento tan triste y con tanta incertidumbre de nuestra vida. Mientras podemos volver a sentir la música en medio de una multitud, abrazados y cantando hasta quedarnos afónicos, nos tendremos que conformar con recordar estos grandes momentos, pero volverán, y nosotros estaremos allí para vivirlos.
Buen fin de semana a todos, cuidadito con los patinazos los que aún tengáis nieve, y precaución con el maldito bicho.
Maravilloso. Me ha encantado.
ResponderEliminarMngtn.
¿A que tú también te sabes de memoria el punteo final? ;) ¡Muchas gracias!
EliminarEstupenda entrada, canción icónica y dos bonitos singuels. Feliz finde.
ResponderEliminarMe gusta más el de la strato roja, por el color, que es mi favorito, supongo, pero son chulos los dos. ¡Me alegra que te gustara la entrada!
EliminarMuy chulos los singles, niña de los ídem. A mí no me van mucho, pero entiendo porqué no pudiste evitar adquirir esa segunda copia. La canción es un mito del rock, para qué te voy a engañar, y también adoro esa versión de Alchemy. ¿Qué hubiera sido de Dire Straits sin ese riff? Quién sabe. Un abrazo.
ResponderEliminarMás bien qué hubiera sido de nosotros sin esta canción, ¡imprescindible! Cosas de la coleccionista peculiar que soy, que compro un poco lo que me apetece cuando me apetece. Otro abrazo de vuelta.
EliminarFFsingles !!
ResponderEliminarY a mucha honra... ¡Ya era hora de traer unos cuantos 45 rpm por aquí! 😁
EliminarSeguramente sea mi solo favorito, la versión del Alchemy me vuela la cabeza a niveles estratosféricos. Una maravilla, imposible no volverse loco con esa coda final en el directo.
ResponderEliminarNo tenía ni idea del origen de la canción, de cómo se inspiró ni nada, mil gracias por compartirlo. Ojalá se pueda volver pronto a esos conciertos que tanto echamos de menos. Abrazo!!
Ay, Alberto, las ganas de volver a sentir la música en directo es tanta... Me alegra que hayas descubierto la historia de la canción leyendo la entrada, es curiosa, menudos pájaros debían ser esos “sultanes” del swing y qué fauna debían reunir en los locales del sur de Londres. ¡Un abrazo!
EliminarTodos hemos hecho un "air guitar" con el solo de esta canción, preferiblemente en la versión del Alchemy. Curioso el cambio de color en las diferentes ediciones.
ResponderEliminarSí, yo también lo he hecho, lo confieso. Y no una, sino muchas 🤣🤣🤣
EliminarBuenas noches! He llegado hasta esta página buscando una curiosidad sobre este single. Hoy mismo me he hecho con una copia de la edición española y mi sorpresa ha sido mayúscula cuando lo he pinchado y resulta ser una versión distinta a la que aparece en el LP, ni la versión musical ni la mezcla. La del single suena como una maqueta de garaje, alguien puede ampliar información de este hecho? Muchas gracias!
ResponderEliminarBuena tardes José M. Efectivamente, tienes razón, y no había caído en ello. He escuchado la versión holandesa (la roja) y la española, (la de la strato negra). Como bien dices, la versión española suena más a maqueta, a menos elaborada, pero en cualquier caso, distinta de la del álbum del 78 y de la del single holandés. Especialmente al principio y al final de la canción. Es un misterio. Podemos ponerlo en Discogs, a ver si alguien sabe algo, en algunas ediciones hay "debates" para solucionar estos misterios musicales. En cualquier caso, bienvenido a esta nuestra jungla vinilera, y gracias por plantear este enigma, pues no me gustan nada a mí estas cosas… xD
EliminarGracias por tu respuesta. Si descubres algo, por favor, comparte por aquí, me estaré pendiente. Te comento, tengo también un CD que compré allá por 1992 que se llama "Early Demos", al principio pensaba que la versión del single sería sacada de ahí pero tampoco, con lo cual tengo tres versiones distintas del Sultans of swing.
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