Parece mentira amigos, pero ya han pasado diez años desde este álbum de The Donnas y quince desde el lanzamiento del que me las dio a conocer, aquel fantástico Spend the night del que os hablé aquí. La verdad es que, después de comprarme también el cedé de Gold medal y bajarme la versión en mp3 del Bitchin’ –que llevaba en el coche y escuchaba continuamente– no tenía intención de comprarme más álbumes de estas chicas de Palo Alto y me disponía a esperar su ahora poco probable siguiente lanzamiento para bajármelo por la patilla. Sin embargo, la noticia de la enfermedad de Torry Castellano que desgraciadamente iba a provocar su salida del grupo y la edición en bonito doble vinilo púrpura veteado de la que todo parecía indicar que iba a ser su última obra me hizo decidir por hacerme con la copia de la que hoy os hablo.
Grabado en los Clear lake audio studios de Hollywood por un Jay Ruston a los controles, aunque atento a las indicaciones de las chicas, contó con el line up habitual –hasta entonces– de Brett Anderson a las inconfundibles voces, Allison Robertson a la caña guitarrera y coros, Maya Ford al bajo y coros y la pequeña Torry Castellano a la percusión atómica y coros. Como os he dicho, no mucho después de su lanzamiento, Torry fue diagnosticada de una dolencia en un hombro que provocó su ausencia en algunos conciertos de presentación del Bitchin’ en los que fue reemplazada por Amy Cesari. Sin embargo, el problema fue a más y un par de años después Torry anunció que debía dejar la banda definitivamente. Desde entonces, The Donnas han sacado un recopilatorio de caras B y temas sacados de las sesiones de grabación de diversos álbumes de su discografía pero ningún material nuevo, por lo que el futuro de la banda es más que dudoso. De hecho, Torry y Brett entraron en la universidad para estudiar ciencias políticas y psicología respectivamente mientras que a Allison la hemos visto tocando por ahí de tanto en tanto, con su grupo Chelsea girls o en eventos diversos.
Con una bonita portada de Janée Meadows y aportación fotográfica del mítico Neil Zlozower, el track list del disco fue:
A
Bitchin’
Don’t wait for me
Wasted
What do I have to do
B
Save me
Like an animal
Here for the party
Better off dancing
C
Love you till it hurts
Smoke you out
Girl talk
Give me what I want
D
Randi
Safety dance
Tonight’s alright
When the show is over
En mi opinión, este Bitchin’ es un retorno a los orígenes después de esa cierta rebaja de fuerza que sufrieron en Gold medal, dieciséis temas cargados de fuerza que nos remiten a los años setenta. Sólo hay que ver el inicio del disco, con ese tema de título homónimo con claro homenaje a KISS –una banda a la que adoran estas chicas– a modo de introducción. Y a partir de ahí, el resto del álbum no se aparta ni un ápice de la senda marcada, un aroma setentero a punk hard rock con coros matadores, melodías pegadizas, sonido garajero, la carismática voz entre descarada e inocente de Brett, la caña de Allison y la aplastante base rítmica de Maya y la pobre Torry. Esta edición vinílica incluye los temas Randi y Safety dance –sorprendente y resultona versión punk garajera del tema del grupo de synthpop Men without hats– que no aparecen en el lanzamiento en cedé y un código que en su día servía para descargarse la edición digital del álbum con un bonus titulado New kid in school que aparecía en el videojuego Rock Band 2.
Si tengo que hacer una selección, destacaría Wasted, What do I have to do, Here for the party, Better off dancing, Love you till it hurts, Smoke you out, Girl talk, Tonight’s Alright y esa última, melancólica y premonitoria When the show is over, con líneas como I've got the feeling in my blood and in my bones, They've got each other tonight, But I'm still all alone when the show is over, When the show is over. ¿Sabían Torry y las chicas a esas alturas ya que posiblemente estaban ante el último lanzamiento de estudio de su carrera? Lo ignoro, pero –dejando de lado el mencionado disco de rarezas que dos años después editaron– no deja de ser un perfecto colofón para su carrera.
¡Feliz viernes!
@KingPiltrafilla
La vin como están.. jajajajaja
ResponderEliminarEstán de puta madre ¿no?
EliminarLas bandas "de chicas" tienen un rollo especial, quizá por esa predominancia macho He-Man del rock en general y el metal en particular. No seguí mucho a estas señoras pero desde luego hicieron un par de buenos álbumes. Ojalá se reencuentren con su Karma y nos regalen otro más, que hay mucho machote por este blog, je, je. Un abrazo.
ResponderEliminarCreo que este es el fin de su carrera como The Donnas.
ResponderEliminarOjo, también he hablado en este espacio de Doro, las Show-ya o Pat Benatar, por ejemplo. ¡Viva las señoras del rock!
Un abrazo.
¡Qué discazo y qué bien sonaban y suenan estas chicas!Guapísimo el vinilo en purple!!!
ResponderEliminarSí, ya tenía el disco en mp3 pero cuando vi que estaba en color en vinilo me lancé a por él. Sonaban de puta madre. Ahora ya no creo que saquen nada más. Quién sabe.
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