Ir al contenido principal

HSAS – Through the fire (1984)


Hoy os presento un álbum que estuve años sin conseguir y del que al final adquirí una copia de la edición norteamericana –como podéis advertir por la muesca en la funda– en perfectas condiciones gracias a nuestro viejo conocido, el dealer vinílico @ViniloRockodium. Me refiero, como habéis visto, al único disco de los HSAS, o lo que es lo mismo, Hagar Schon Aaronson Shrieve. Y es que a principios de 1983, después de sacar el Frontiers a las tiendas, Neal Schon contactó con Sammy Hagar y le propuso participar en un proyecto que quería editar al margen de Journey. El vocalista aceptó y, juntos, se pusieron a buscar músicos para la banda. Al final, después de varios contactos con colegas de la talla de Denny Carmassi, acabaron involucrando a Kenny Aaronson –un bajista que había estado tocando con Rick Derringer y que acabaría colaborando con infinidad de bandas como músico de sesión de lujo– y a Michael Shrieve de la banda de Carlos Santana, donde el batería había coincidido con Schon años atrás. 

Así, a finales del mismo año, la banda ofrece varios conciertos en el Warfield Theater de San Francisco y –con producción de Hagar y SchonDon Smith graba con el Westwood Mobile studio las bases de lo que será Through the fire, el primer y único álbum de HSAS para Geffen records, a las que posteriormente se añadirian algunos overdubs de guitarra grabados en los Fantasy studios de Berkeley. Hay que decir que el ruido ambiente se limpió en la mayoría de los temas, aunque podéis oír al público por ejemplo en My home town dando la impresión de que es un tema en directo, cuando en realidad todos lo son. 


Con portada de Jim Welch y Simon Zadovsky, el track list del disco fue: 

A 
Top of the rock 
Missing you 
Animation 
Valley of the kings 
Giza 

B 
Whiter shade of pale 
Hot and dirty 
He will understand 
My home town 


En cuanto a mi análisis de los temas, ya os digo desde ahora que admito que pueda estar equivocado... pero me llevo la impresión de que Hagar y Schon se repartieron la mitad del álbum cada uno a la hora de aplicar su estilo propio en las canciones que les tocaron. Así, Top of the rock es puro Hagar sin discusión y Missing you suena mucho más Schon. Animation es otro trallazo guitarrero, menos obvio que el primero pero que en mi opinión vuelve a mostrarnos el sello del pelirrojo californiano. En Valley of the kings –de mis preferidas– encontramos una guitarra elegante, una voz impresionante y un bajo fantástico, vamos, como en general el disco entero, aunque aquí parece advertirse de nuevo una mayor infuencia de Schon. Giza no aporta demasiado y es el final, una simple coda de la anterior. Whiter shade of pale es la versión del grupo de la híperconocida canción de Procol Harum que los británicos editaron casualmente en 1967, ese glorioso año, ya sabéis. 


Sin embargo, aunque su interpretación a todos los niveles es fantástica, os diré que –por una parte- es de aquellos temas que uno ya está hasta los cojones de haber escuchado toda la vida hasta en anuncios publicitarios y –por otro lado- no me gustan nada las versiones de hits para convertirlas en single de lanzamientos de terceros. Me parece que HSAS compusieron un album lo suficiente válido y de calidad como para dejar la labor de promoción a una canción que no era de ellos. Pero eso son cosas mías. Total, que os la podéis saltar sin problema y entrar directamente en la hagariana Hot and dirty –si amiguitos, como os he dicho al principio, parece que Neal y Sammy se pusieran de acuerdo en colocar “una tú, una yo, una tú...” a la hora de repartir los temas en las dos caras del vinilo. He will understand es otro temazo a lo Journey y mi segundo preferido del disco. Y, por último, My home town cierra el álbum con un trallazo con el sello –lo habéis adivinado- de Hagar

En fin, que para que disfrutéis del disco aquellos que aún no lo conozcáis y constatéis si vuestras impresiones coinciden en algo con las mías, nada mejor que escuchar la grabación completa que os acompaño. De nada. 


¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Nuevo hallazgo King. Desconocido para mi esta aventura de Hagar. Tras una primera escucha me parece un trabajo divertido en general, aunque me quedo también con las de Sammy. Por cierto ese "Top of the rock" me suena a, por lo menos, cinco temas de otras tantas bandas. Saludos

    ResponderEliminar
  2. Hoy he querido subir ESTE vinilo que, por supuesto, no sabía que ya habías subido. Me encanta este disco, no solo por que me parece bien compuesto y ejecutado, si no por ese rollo de "aquí y ahora" que se respira en muchos momentos del disco. Aunque grabado en directo, creo que, además de las guitarras, el rubio metió algunas voces nuevas. En fin, que me gusta mucho este disco y me ha costado conseguirlo en vinilo. ¡No miré si ya estaba subido! De todos modos, me encanta tenerlo en mi colección. Un abrazo.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Extremoduro - Yo, minoría absoluta (DRO, 2002/2014)

  Cuando una banda de rock alcanza el éxito tiende a repetir la fórmula o a dejarse domar por los sonidos que le imponga la discográfica. En el caso de Roberto Iniesta, el Robe, alma, cerebro, venas y corazón de Extremoduro, el éxito le pilló preparado. "La masa es imbécil. Si sales en la tele puedes hacer un libro, un disco o lo que se te ponga en la punta del nabo. A mí eso no me interesa ni vender más discos ni que me conozca más gente. Como estoy ahora estoy bien, pudiendo organizar una gira y no tener que decir «no puedo dejar de tocar en noviembre porque no tengo un puto gil», así me vale". Y continuó haciendo lo que le dio la gana después del éxito de Agila (1996): editaron el directo Iros todos a tomar por culo (1998) y el controvertido Canciones prohibidas (1999), donde daban rienda suelta a su creatividad, con éxito y críticas reguleras.  Y se tomaron un descanso. "Creo que cuando siguen haciendo cosas buenas y nuevas los grupos funcionan, aunque estén dos o...

Ramoncín - Al límite vivo y salvaje (1990, BMG)

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que este sábado tengo una Cita con mi chica para irnos de concierto a ver y escuchar al señor José Ramón Márquez , os traigo uno de los directos más importantes del rock español. Muchos denostan y menosprecian la figura e impronta de Ramoncín en nuestro rock patrio por su época de adalid de los derechos de autor a la cabeza de la infame SGAE, por su etapa de tertuliano y protagonista del papel cuché e, incluso, por su largo periplo como presentador de un concurso de televisión (mis amigas se pegaban por ir de público para verlo, todo hay que decirlo). Bien, pues no saben separar el polvo de la paja. Yo paso de todo aquello, y me quedo con la música que es lo que todos aquí amamos. Me voy a quitar desde el principio la parte técnica e histórica. Grabado en el 90 durante unos recitales en los que no presentaba ningún disco nuevo lo que le quitaba un poco de presión. Luego nos enteramos de que eran una despedida: en aquel m...

Medina Azahara - En directo (Avispa, 1990)

  Ya lo he escrito en este blog: a veces no escucho música, escucho recuerdos. Las canciones se pegan a los momentos en los que vivimos y al volver a ellas es inevitable revisar las imágenes y las emociones que las acompañaron. En otras ocasiones, uno se siente hasta protagonista, como si el músico las hubiera compuesto para nosotros, pensando en "eso" que nos sucede. Y en otras, literalmente, sin tocar ningún instrumento, somos esa canción. Esto último sucede con este Medina Azahara en directo : yo estuve en ese concierto, por lo que, de algún modo, cuando escucho el disco, ahí al fondo, está mi voz. Fan de "los Medina" ni fui ni me considero, pero un concierto de ruido al lado de casa había que disfrutarlo. El álbum se grabó un 30 de junio de 1990 en el anfiteatro Egáleo de Leganés, Madrid, escenario al aire libre mítico aquellos años; allí vi también a Panzer, Burning, Sangre Azul y alguno más. Por cierto, a la banda la presentó aquella noche José Carlos Molina (...

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero ...

Los Relámpagos – Nit de llampecs (Novola-1965)

Y tras el hiato estival y la visita de Hetfield & co . de hace quince días, hoy toca reseña de la serie “ Los singles de mami ” en la que, como ya sabéis los habituales, aúno mi amor a la música en formato vinílico con el recuerdo a mi madre –fallecida hace poco más de un año– y a su gusto por la música pop de su juventud. Los protagonistas de hoy son Los Relámpagos , un grupo de rock instrumental que –como muchas bandas e intérpretes en aquella época– surgieron a raíz de un concurso musical en el que coincidieron José Luis Armenteros (guitarra), Pablo Herrero (órgano), Ricardo López Fuster (batería) y los hermanos Ignacio y Juan José Sánchez-Campins (guitarra y bajo, respectivamente). Los cinco darían forma a Dick y los relámpagos , que no tardaron en perder de su nombre a Dick , fuese quien fuese el tipo.    En 1962 comienzan a tocar en un club a cambio de vales de consumición y propinas y dedican los domin...