Ir al contenido principal

Night Ranger – Midnight madness (1983)


Amigos, ya os lo dije cuando yo mismo publiqué hace casi dos años –cómo pasa el tiempo, joder- una entrada dedicada a estos norteamericanos y su Seven wishes, Night Ranger no son precisamente el grupo más conocido del mundo, al menos no por estos lares. La prueba es –por ejemplo- que nadie me comentó entonces. Sin embargo, me empeño en reivindicarlos. Así que hoy os traigo su segunda obra, el fabuloso Midnight madness, álbum que se convirtió en el más vendido del grupo, afianzó a la banda en el panorama hardrockero y les permitió girar por los Estados Unidos como cabezas de cartel, sobre todo gracias a la balada Sister christian. Editado en el otoño de 1983 por MCA Records, es otra de esas copias norteamericanas –la europea tuvo un prensaje diferente con el orden de las canciones alterado- que conseguí en la mítica Discos Balada de la calle Pelayo de Barcelona.  


Midnigt madness fue grabado en los Image recording studios, producido por Pat Glasser –que ya había producido su debut Down patrol y repetiría con el mencionado Seven wishes- y contó con la formación clásica de Jack Blades a las voces y bajo, Kelly Keagy a las voces y batería, Alan Fitzgerald a los teclados, Brad Gillis a las guitarras y Jeff Watson a cargo de guitarras y teclados. Aunque no apareció en los créditos por los consabidos problemas contractuales, parece del todo probado que Glenn Hugues grabó algunos coros. Más difícil de contrastar resulta el rumor de que Gene Simmons y Paul Stanley también dejaron sus voces en algún tema. No he podido encontrar documentación que lo avale. Sin embargo, como anécdota, os pediré que os fijéis en la contraportada –un diseño de Jeff Lancaster con fantásticas fotos de Tom Gibson- y me digáis si os recuerda a alguien el mago que saca un conejo de la chistera. En fin, uno más de los secretos del mundo de la música. 

El track list fue: 

A 
(You can still) Rock in America 
Rumours in the air 
Why does love have to change 
Sister christian 

B 
Touch of madness 
Passion play 
When you close your eyes 
Chippin’ away 
Let him run 


(You can still) Rock in America es rock festivo, con coros y teclados que no le restan energía ni esa ambientación que te obliga a brincar disfrutando de la música. Más teclados y la batería de Keagy dan inicio a Rumors in the air, uno de mis favoritos del álbum con esa mezcla de fuerza rockera, coros y melodía facilona que caracterizó a la formación. Con Why does love have to change encontramos más hard rock cañero, con bonitas voces y los habituales teclados. Es otra de mis preferidas. Entonces llega Sister christian, LA BALADA, el tema cantado por Kelly Keagy por el cual Night Ranger son más conocidos. La composición –dedicada a su hermana pequeña tras reencontrarse con ella después de un tiempo separados y ver lo que había crecido- es más que buena, el trabajo de guitarras, teclados y batería no tiene fallos y las voces dan emoción a un tema que no es más que una advertencia a esas adolescentes que están a punto de descubrir el sexo. Es otro de esos ejemplos de falta de visión musical, ya que se editó en 1984 como tercer single del álbum sin que nadie imaginase en lo que se iba a convertir. 


La segunda cara comienza con Touch of madness, uno de los mejores del disco, hard rock del bueno con ese toque AOR. Estupenda melodía, ejecución sin mácula y coros marca de la casa que sirven de preámbulo a Passion play, el que para mi gusto es el mejor tema de todo el álbum, muy por encima del pelotazo que supuso la hermanita cristiana de las narices. When you close your eyes es puro hard rock melódico, un estupendo tema con grandes voces, fantasticos coros y la estupenda guitarra de Gillis, a quien no me cansaré nunca de reivindicar. Chippin’ away es de los menos conocidos del álbum aunque tan recomendable como el resto, donde encontramos predominancia de teclados, las voces dobladas de siempre y un correcto solo doble a cargo de Gillis/Watson. Por último, tenemos Let him run, una sencillita pero efectiva balada tipicamente Blades style en la que solo advertimos el protagonismo de voces y teclados y supone un estupendo final para este fantástico Midnight madness. Dad una oportunidad a esta banda, amigos vinileros, hacedme caso. 

A modo de botón de muestra, os acompaño Rumors in the air, Why does love have to change, Touch of madness, Passion play y –cómo no- la exitosa Sister christian

¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla 






Por cierto, el próximo viernes habrá entrada especial de despedida antes del paréntesis vacacional. Estad atentos.

Comentarios

  1. No soy muy fan de Night Ranger, más por desconocimiento, pero este lo tengo (en cedé) y me gusta mucho (aunque a Sister christian le tengo un poco de ojeriza, no sé por qué). De vez en cuando hay que traer disquitos como este.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. A mi me encanta casi todo lo de su primera época. Soy un fan de Gillis. Y me pasa lo mismo con Sister Christian, te entiendo perfectamente.

      Eliminar
  2. Pes no los conozco, por estos lares como dices no son de lo mas conocido, hjechare un vistazo, pues parece que puede estar bien el material.
    Buen fin de semana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sus cuatro primeros álbumes son para atesorar. Escucha Don't tell me you love me, el primer tema de su primer álbum, y ya verás. Hard rock y melodías.
      Muy en la onda de lo que Blades hizo luego en Damn Yankees.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Joe Satriani - Flying in a Blue Dream (1989)

Joe Satriani - Big Bad Moon - Live Expo 92 (Sevilla) ¿ Vaya presentación la del Tio Joe eh?, mira que plantarse en Sevilla, en medio de la Expo92 y vomitar el Big Bad Moon acompañado del gran Brian May, no había visto nada igual hasta la fecha y creo que a día de hoy, tampoco.  ¿Quién se esperaba ese Slide con la propia armonica? Bueno, que me dejo llevar por la emoción, Joe Satriani forma parte de la banda sonora de mi infancia.  Sin ningún tipo de duda, soy quien soy, musicalmente hablando, por mi primo, el cual me encamino hacia que escuchar y que instrumento tocar, a través de cintas como esta descubrí al profesor y a muchos mas.  En esta cinta destacan Joe Satriani, un tal Jason Becker, Steve Vai o el mismísimo Paul Gilbert con Racer-X, anda que no le di vueltas a esa cinta, aun la conservo.  Una cosa que llama mucho la atención de esta clase de músicos, es que las canciones, la gran mayoría de veces carecen de letras y eso no suele gustarle a todo el mundo. Hablar de un disco de

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero

Surgin' – When midnight comes (Music For Nations, 1985)

  Hoy traigo el único álbum (oficial) de la efímera banda neoyorquina Surgin , una joya escondida en el resto de saldo que fue el rock melódico de los ochenta, con un protagonista especial: Jack Ponti. Igual no tienes ni idea de quién es este personaje. Fíjate en la foto de abajo, es el de la izquierda, tocando con su colega de instituto John Bongiovi en un concierto del grupo que montaron juntos, Rest. Su poco éxito en aquellos primeros ochenta disolvió la historia, pero no así la amistad que ambos se profesaron. Aunque habría que revisar esas “amistades” de Mr. Bongiovi: para el puesto de guitarrista de su banda eligió a un desconocido Richie Sambora antes que a sus colegas Ponti o Snake Sabo. Por algo sería, claro. Jack formó su propia banda, que acabó llamándose Surgin, y consiguió editar este disco que hoy comparto por aquí, When midnight comes , en 1985. Compuso, produjo y tocó en él con la esperanza de alcanzar el estrellato roquero, objetivo que, obviamente, no logró. ¿Por

KISS-ASYLUM (1985-Mercury)

  A mediados de los 80, seguramente que de KISS lo único que quedaba era el nombre. Ace Frehley y Peter Criss no estaban físicamente y Gene Simmons aunque seguía figurando casi que tampoco, vivía más interesado en una carrera cinematográfica que no despegaba o produciendo a bandas del nuevo Glam Metal USA como Keel o Black N Blue.  Si me apuras, The Paul Stanley Band no hubiese sido un mal nombre, ya que el antaño "Chico de las Estrellas" era el único que realmente tiraba del carro en aquellos años. Gracias a él y a Vinnie Vincent disfrutamos de los primeros Kiss "desmaquillados" merced al aplastante por momentos "Lick It Up". Cuando Cusano fue expulsado por sus excentricidades la banda grabó el irregular "Animalize", que bueno, tampoco estaba tan mal y hasta nos brindó con un VHS de la época bastante subido de tono.  Y luego llegó "Asylum" con un nuevo guitarrista llamado Bruce Kulick y otra oportunidad para seguir en la reciente rueda

Cream - Wheels of Fire (Polygram Records, 1968)

Me he llevado una pequeña sorpresa al bucear en el blog buscando este disco, por aquello de no repetir entrada, y comprobar que aun nadie ha reseñado el tercer largo de los ingleses. Imagino que mi predilección por Clapton hace que la mayoría de los clásicos del guitarrista se me antojen imprescindibles, de ahí la sorpresa. Pero bueno, aprovecho yo para dejar aquí mis impresiones sobre este Wheels of fire , además de unas fotos de la edición en vinilo, que me parece espectacular.  Antes de entrar en materia, me gustaría aclarar algo: pese a que conocí a Cream por Clapton, la realidad es que los dos gallos del gallinero eran sin duda Jack Bruce (bajo y voz) y Ginger Baker (batería), hasta el punto que en este disco el guitarrista no aparece acreditado como compositor. Sin duda su mano y su característica voz fueron imprescindibles para el sonido de la banda, pero las fuertes personalidades de los dos personajes mantenían el equilibrio y hacían que Clapton, que podría estar soleando dura