Descubrí a Manassas de forma casual. Mientras rebuscaba en una de las tiendas de vinilos a la que acudo (acudía, pues cerró hace años), me llamó la atención la música que estaba sonando. ¿Quiénes son?, le pregunté al propietario, Manassas, me respondió obviamente, ¿Y esos quienes son?, me atreví, Pues un grupo que formó Stephen Stills, ¿sabes quién es?, y, claro, a mí me sonaba el nombre pero no estaba seguro, así que le respondí, ¿ese que canta con Neil Young?, y la cara del tipo fue un poema, rictus de dolor infinito y un sí, ese, que aún hoy le debe doler mi ignorancia (eso que se cura con los años, buena compañía y mucha música).
El caso es que por esa casualidad me llevé el cedé (el suyo, no le quedaba otro) del primer álbum de Manassas. Una edición un poco cutre en lo externo pero que suena de muerte (remaster de primera).
La propia creación del grupo Manassas fue algo casual. Cuenta Stephen Stills que, frustrado por la relación con Crosby, Stills, Nash y Young, tras una gira exitosa en solitario, decidió formar un grupo con Chris Hillman (cantante y guitarrista) y Al Perkins (pedal steel guitar). Se unieron músicos que ya habían tocado en las giras en solitario de Stills y otros amigos, juntando a: Calvin Samuel al bajo, Paul Harris a los teclados, Dallas Taylor a la batería y Joe Lala a la percusión.
Esta pandilla permaneció junta durante dieciocho meses entre 1972 y 1973. Editaron dos álbumes (Manassas en 1972 y Down the road en 1973) y dejaron decenas de canciones y ensayos grabados en estudios de Estados Unidos y el Reino Unido.
Parte de estos restos que no fueron publicados conforman este doble vinilo: Pieces.
Remasterizado y editado digitalmente por los propios productores de los temas (Howard y Ron Albert) junto con el ingeniero Israel Nijera, Pieces conforma una suerte de recopilatorio de diferentes momentos de esos prolíficos dieciocho meses, con temas completos, versiones iniciales de otros que posteriormente formarían parte de los álbumes de Stephen Stills o Hillman (caso de Witching hour, Sugar babe o Word game) y algunas sesiones impresionantes.
Las quince canciones se mueven en los mismos derroteros que las ya publicadas con anterioridad, es decir, una mezcla de folk americano, rock, percusiones latinas (Tan sola y triste) y un toque de blues, conformando un doble álbum sin desperdicio.
La edición de Rhino es impresionante. Doble carpeta (gatefold sleeve), con una foto de la banda ensayando en la portada y otra de los miembros en la contra. En el interior, información detallada de cada tema (una breve historia de cada uno), una nota del propio Stills explicando el tiempo de creación en la banda y una breve historia de Manassas por Bill DeYoung. Los vinilos (de 180 gramos) suenan de muerte, poderosos, llenos de matices.
Por destacar algunas canciones, Lies (con Joe Walsh como invitado), Like a fox, Witching hour, High and dry o Fit to be tied (con un wah-wah tremendo).
¡¡Buen fin de semana!!
Pese a no ser estilo de mi devoción, lo que acabo de escuchar rezuma calidad y elegancia.
ResponderEliminarSaludos!
Pues échele una escucha al primer álbum de Manassas, le convencerá.
EliminarStephen Stills!!...Manuel un 10..tu sí que sabes colega!!..con mi banda haciamos un cover de "Song of Love"..jejejeje..Saludos Master!!
ResponderEliminarMe alegro haber acertado, Manassas me tiene flipado y Stills hizo buenos álbumes en aquella época. Luego...
EliminarPerfectos desconocidos para mi, imperdonable, pero uno no da a basto con todo lo que hay que escuchar, y estos no son de la semana pasada, precisamente.
ResponderEliminarEscuchándolos ahora mismo, suena muy americano pero muy bien.
Respuesta tardía, pero más vale tarde que nunca. Espero que en estos años te hayas puesto al día.
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