En esta vuelta a sonidos añejos que tan de moda parece estar poniéndose con bandas como Graveyard, Three Seasons o Rival Sons, entre otros, tengo que destacar este brutal Earth blues de Spiritual Beggars. En cada corte se aparece un fantasma musical: Iommi se pasea en la inicial Wise as a serpent, el mismo Schenker podría firmar Hello Sorrow, Paul Rodgers estaría orgulloso de una balada como Dreamer o quién si no Zakk Wylde y Jon Lord cuajarían una estupenda actuación en Legends Collapse. Y por todos lados, un poco de Hammond. Y mucha mala leche roquera.
Sin embargo, más allá de las comparaciones o las referencias, Spriritual Beggars han juntado doce temas compactos, bien arreglados y con una ejecución sobresaliente.
La banda la forman Michael Amott (Arch Enemy, Carcass) guitarra, Per Wiberg (Opeth) teclado, Ludwig Witt (Grand Magus, Firebird) batería, , Sharlee D’Angelo (Arch Enemy, Witchery) bajista y Apollo Papathanasio (Firewind) cantante.
De esta mezcla no es extraño escuchar cortes crudos como One man's curt o Kingmaker, pero sorprende un tema como Too old to die young, de ritmo bailón y arreglos distintos al resto del álbum. Quizá Ead end town pudiera ser un gran single con esa intro a voz y guitarra y un estribillo sencillo pero eficaz. El comienzo con Wise as a serpent y Turn the tide rompiendo cuellos ya te pone a tope. Entonces aparece Sweet magic pain: a mitad de tema el piano corta el tremendo ritmo y la canción crece y crece hasta su tremendo final.
La edición en doble vinilo, una pasada: el primer vinilo dedicado al propio Earth blues y el segundo al directo Return to live que contiene su actuación en el Loud Park japonés del año 2010. La portada está inspirada en un viejo poster que Amott tenía en su casa donde una pareja contemplaba un amanecer; le han añadido para "actualizarlo a la realidad social" una pequeña explosión nuclear. El resultado es ciertamente impactante.
La carpeta doble incluye un poster y una fotografía del grupo en el interior. Cada vinilo viene en un encarte con fotografías y, en el caso de Earth blues, con las letras del álbum.
En definitiva, un muy buen trabajo de hard rock lleno de influencias donde los cinco músicos dan buena cuenta de su talento compositivo e interpretativo. Sin duda, una joya.
Y como animan Spiritual Beggars: this record was made to play loud!
Buen fin de semana.
Como te he comentado en twiter es uno de los discos que tengo por aquí pendiente. Sólo escuché el adelanto y la cosa promete. Me faltaba el empujón que me acabas de dar con tu post. Saludos.
ResponderEliminarGran disco, si señor. Les perdí la pista tras el Ad Astra del año 2000 y los he vuelto a recuperar con este último disco (yo me lo he comprado en CD...mal!!). Realmente suena muy, muy bien...han dejado un poco atrás el rollo stoner (que tampoco estaba nada mal) y se han decantado, cada vez más, por un hard rock setentero con muchos dejes de las grandes bandas de los 70s. Creo que este disco es lo más parecido a lo que podrian haber hecho hoy en dia unos Deep Purple etapa Coverdale/Hughes.
ResponderEliminarMuy buen apunte. Una pata en el Mark III y otra en Lights out. El resto repartido por lo mejorcito del hard rock.
EliminarVaya, no suenan mal estos tipos, el primer tema me ha recordado un poco a Lenny Kravitz, y el vídeo parece grabado en una habitación de hotelucho.
ResponderEliminarEl sonido me gusta, como se ha comentado, muy setentero, que ya sabéis que es un sonido que particularmente me gusta.
Es un placer encontrar grupos así.