Hablar de Benediction es descubir una pieza fundamental dentro del engranaje que mueve y agita los cimientos del death metal europeo desde sus inicios. El peso de la historia descansa sobre esta seminal banda británica original de Birmingham, paisanos de Black Sabbath y Judas Priest entre otros y por cuyas filas han desfilado músicos de Napalm Death, Sacrilege, Cerebral Fix, Extreme Noise Terror, Memoriam y un largo etc. a lo largo de las últimas décadas.
Subconscious Terror es un álbum debut que realmente muestra la fuerza e intensidad del death metal primigenio de los años noventa. Lanzado en 1990, este disco de Benediction se ha convertido en un clásico dentro del género, y no es para menos. No es su mejor trabajo, pero es todo un clásico, repito.
Uno de los aspectos más destacados de Subconscious Terror es la producción. Aunque en su momento puede sonar un poco cruda (detalle que abandonarán en lanzamientos posteriores), esto le da un carácter auténtico y agresivo que encaja perfectamente con la energía de la época. La voz del archiconocido Mark ‘Barney’ Greenway (Extreme Noise Terror, Napalm Death), gutural y desgarradora, transmite una sensación de desesperación y furia que encaja perfectamente con el resto de la banda británica. Es genial. La combinación crea una experiencia auditiva que te sumerge en un mundo de caos y oscuridad. Prometido.
Canciones como la homónima Subconscious Terror y The Grotesque son un ejemplo de la brutalidad y la complejidad que Benediction logra plasmar a lo largo del disco. Lo mejor es que también hay momentos donde la banda se toma un respiro para crear atmósferas más pesadas y ominosas, marca de la casa, lo que enriquece la experiencia auditiva.
Para los no familiarizados con el género comentaros que la profundidad y oscuridad del combo británico invitan a la reflexión de manera visceral. Es un álbum que gana con cada escucha, consolidándose como una pieza fundamental en la historia del death metal.
En resumen, Subconscious Terror es un álbum imprescindible si te gusta el estilo y estás empezando a zambullirte entre sus negras y revueltas aguas, y si eres seguidor de Napalm Death con más razón para que no falte en tu colección. Una obra que ha resistido el paso del tiempo muy dignamente y que sigue siendo muy relevante para quienes disfrutan de la música extrema, peinen canas o no.
Dale una oportunidad, grrrrrooooooooooooooooaaaaaaaarrrrrrrrrrrrrggghhhhhhhhhhhh!
Actualmente soy más de Black que de Death, obviando al dios Schuldiner, pero este disco me ha gustado mucho. De hecho, si no fuese por esas voces guturales, ese sonido grueso que destila la producción tiene mucho de Thrash old style con pinceladas de Doom. Gran descubrimiento por mi parte... gracias a ti, por supuesto. Buscaré más cosas de ellos. Saludos. KING
ResponderEliminar¡Cómo te gusta la mierda gutural noventera! Trae más de estos. A mí no me van, lo reconozco, pero, como dice el King, ese poso thrashero queda muy bien. En el fondo, estaban creando un estilo nuevo a partir de lo que había antes. Como siempre. Muy chula la portada, rollo película de terror Carpenter. Un abrazo.
ResponderEliminarLo siento pero el guturalismo no va conmigo. Sin embargo, hay mucha otra gente que sí y que disfrutarán con este disco y otros parecidos más de las dos canciones que me permiten mis oídos escuchar de seguidas. Lo intento pero no estoy cultivado para ello. Un saludo
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