Ir al contenido principal

Eric Clapton - Old sock (Bushbranch Records/Polydor - 2013)


Según la sacrosanta wikipedia, este es el álbum número 21 de Eric Clapton, dato que tampoco importa mucho, y que grabó y publicó en el año 2013, ya cumplidos los 68 tacos. Como me gusta reconocer el talento ajeno y además soy un vago redomado, os voy a copiar el comentario que en su momento hizo Paulamule en su blog. Aquí el enlace, por cierto.


Hola, soy Eric Clapton y hago lo que quiero, cuando quiero y como quiero. Tumbado en una hamaca y tomándome un mojito, se me ha ocurrido que podría sacar un disco de versiones y de paso, meter un par de temas propios para darle algo novedoso al álbum. De paso, ya que estoy aquí, en este lugar tan paradisíaco, me saco una foto con el móvil y la pongo de portada. Alguna fecha por ahí para presentar el disco y tener algo de liquidez, que siempre viene bien, y a otra cosa mariposa. A los 70 me retiro y el que pueda que lo mejore.


Este párrafo bien podría ser el resumen de este veraniego y agradable "Old Sock". Doce temas: diez versiones y dos propias. Ilustres invitados: Paul McCartney, Steve Winwood, J.J. Cale, Taj Majal...

Ya habíamos tenido ocasión de escuchar su primer tema propio como adelanto el buenísimo "Gotta Get Over", dejándonos muy buenas sensaciones y transcurridas unas semanas podemos decir que el gancho funcionó. Se trata de un disco que no va a sorprender a nadie a estas alturas, sin embargo es un trabajo ameno, que se deja escuchar y que te pone de buen humor con gana de que llegue ya el buen tiempo y deje de llover incesantemente. Seguramente, parte de la culpa la tendrán esas tres o cuatro canciones reggae, que en absoluto son mis preferidas, pero que introducidas convenientemente no llegan a molestar demasiado, aun sin gustarme. Estas son: "Further On Down The Road", "Till Your Well Runs Dry", "You One And Only Men" de Otis Redding y el estribillo del otro tema propio "Every Little Thing". Es decir, tres y media de 12, casi la cuarta parte. Sin embargo, también te puedes encontrar joyas como la ya citada "Gotta Get Over", la delicada "The Folks Who Live On The Hill", la deliciosa "All Of Me" con Sir Paul McCartney, la siempre generosa "Still Got The Blues" acompañado de Steve Winwood o la sensual "Our Love Is Here To Stay". Sin olvidarnos, claro está, del country, en ese par de canciones como son "Born To Lose" y "Goodnight Irene".





Yo debo añadir un par de cosas. El disco se deja escuchar, desde luego, tanto por la labro de Clapton como por la colección de músicos que le acompañan, no solo los invitados, que aportan lo suyo, si no por los que metió en el estudio, que para algo tiene pasta. Como anécdota, fue la última grabación de J.J.Calé antes de su muerte. Por cierto, Clapton no compone ninguna canción, lo hacen sus amiguetes de grabación: Doyle Bramhall II, Justin Stanley y Simon Climie (también encargado de las mezclas). La masterización la hizo Bob Ludwin (¿alguien sabe cuántos años tiene este señor?). El título significa literalmente "calcetines viejos" y se le ocurrió, cómo  no, al propio Clapton en referencia a la sensación de tocar canciones que le sentaban a su estilo y gusto como unos "calcetines viejos". Ahí lo dejo.

El vinilo, muy bien prensado y con excelente sonido, es doble (tres canciones por cara) y con carpeta gatefold. Las fotografías y la idea del diseño son del propio Eric. La foto de la portada es un autorretrato que se hizo en sus vacaciones en Bahamas y la contraportada en su casa en Nosédónde. 

Reflexión: ¿no os da pereza, en la era hiperdigital en que vivimos, dar la vuelta al vinilo cada tres canciones, o sea, cada diez-quince minutos?

Clásico, incombustible, genial, a veces demasiado predecible, pero uno de los últimos grandes guitarristas vivos. Una pena que no quiera componer más por sí mismo, pues se le da muy bien. Os dejo aquí el enlace a la entrada que le dediqué en mi blog por si os interesa.

Buen fin de semana, gentuza.













Comentarios

  1. Gentuza nos llamas... será con cariño jejeje. Pues será un mito, será Dios o lo que queráis, pero nunca me ha llamado la atención en demasía este señor. Fustigadme cuanto queráis. Eso sí, su versión del Still got the blues me gusta mucho más que la que hizo Moore. La encuentro más fresca de sonido y melancólica en voces que aquella, que me resultó cansina de tanto como se radió en su momento. Voy a escuchar el resto de temas. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Siempre con cariño, es mi "piltrafillas" de hoy, je, je. A mí me encanta el Clapton de hace cuarenta años. Del resto me quedo con este álbum y alguna canción suelta. Abrazo de vuelta.

      Eliminar
  2. Desde luego Clapton puede permitirse lo que quiera. Este disco tiene unas versiones fantásticas con ese rollito fresco y vacacional; la versión de Moore es una pasada, quizás con el punto melancólico justo. A mi tb me gusta más el Clapton de hace mil, aunque tengo cierta debilidad por uno de los más modernetes Back Home.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En todos sus discos rascas algo, porque el feeling y la técnica están ahí, desde luego, pero son escuchas que no suelo hacer, la verdad. Un abrazo.

      Eliminar
  3. Me encanta este disco, y lo sigo disfrutando sobre todo en verano con daikiri en la piscina o playa.

    Besotes.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Desde luego, donde mejor se disfruta. ¿Cuándo publicas tú por aquí?

      Eliminar
  4. Solamente por la versión de Still Got the blues,ojo que la de Moore es de otra galaxia!!!Ya hay que tener este vinilo!!!
    Un Genio que la edad y los excesos ya le apartan de la escena musical en la que sin ninguna duda es uno de los GRANDES de la historia de la música.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Quizá esos excesos nos privaron de alguna genialidad en aquellos años setenta, pero qué le vamos a hacer. Al menos sobrevivió con más o menos salud y le hemos disfrutado muchos años. Un saludo.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Power Trip - Nightmare Logic (2017)

  El disco de esta semana es uno de mis favoritos de los últimos años. No es un género que actualmente escuche demasiado pero sí que me gusta reescuchar los mejores trabajos que se han sacado en el mismo. Es por ello por lo que desde hace tiempo estaba pendiente de incorporar a mi colección. Power Trip no se anda con rodeos. Nightmare Logic es una descarga de thrash moderno con actitud hardcore, que toma las raíces del género y las machaca con rabia y contundencia. Ocho temas, poco más de media hora, y ni un momento de tregua.                                                   La fórmula es simple, pero funciona como un mazo: riffs afilados, ritmos implacables y una producción que potencia el golpe sin necesidad de embellecerlo. "Executioner's Tax (Swing of the Axe)" se ha convertido en un himno por méritos propios: groove pegajoso, mensaje directo y una ej...

Magnum - The eleventh hour (Jet Records, 1983)

Todas las bandas alcanzan en algún momento un “punto final”: si sobreviven a esa crisis el futuro del grupo está asegurado; de lo contrario, ¡adiós, amigos! En el caso de Magnum , este es el álbum que cambió la historia de la banda, el que pudo haber sido el final y se convirtió en la puerta al futuro.   Porque, cuando los muchachos estuvieron listos para grabar el que sería su cuarto disco de estudio, se encontraron con un “pequeño” contratiempo: la compañía (Jet Records) se negó a poner dinero para un productor o un estudio decente. Y, eso, teniendo en cuenta que su anterior Chase the dragon había alcanzado un decente puesto 17 en las listas de ventas británicas. Tony Clarkin se vio en la obligación de encargarse de la parte técnica por primera vez (en el futuro lo haría numerosas veces) y en unos estudios que, según sus palabras, “tenían un nivel tecnológico de 1930”. Bob Catley hizo de ayudante de producción y Dave Garland de ingeniero. "¡Vamos a hacer una tortilla de pat...

Georgia Satellites - Georgia Satellites (Elektra, 1986)

  Este podría ser uno de los mejores discos debut de los ochenta si fuera de verdad un disco primerizo. Según como se mire, porque la historia que llevó al parto de esta joya que hoy nos ocupa tiene mucha miga. Remontémonos al inicio de 1983 cuando unos muchachos de Georgia consiguen grabar una maqueta de seis canciones en unos pequeños estudios de Atlanta con Jeff Glixman a los mandos. ¿Y por qué un productor tan afamado se fijó en estos desconocidos? Jeff era un tipo de Atlanta que gustaba de tomar cervezas en los garitos de la zona, allá donde hubiera actuaciones, y coincidió varias veces con “The Satellites” (que así se llamaban por entonces). Congeniaron y les hizo de celestina para aquella primera maqueta. Cuando las fechas para grabar un disco “de verdad” estaban a punto de llegar el verano siguiente, los muchachos partieron peras: adiós banda, adiós oportunidad.  Ya sabemos en este blog que la suerte aparece en el camino de muchos de nuestros músicos favoritos. Y en es...

Rick Springfield - Living in Oz (1983, RCA)

    Pues voy a ser sacando mis mierdas ochenteras, tras los Mr. Mister y Bruce Hornsby . Como ya esperáis de mí, todo en una balanza que se decanta más por el pop que por el rock, pero con algún guitarreo majo que al final podría hacernos inventar un género hard pop o similar. Y esta vez el protagonista es el cantante y actor australiano, aunque su carrera se desarrolló principalmente en USA, Rick Springfield . El bueno de Rick comenzó a tocar en grupos en su Australia natal, también una época en Inglaterra cuando su padre fue destinado allí. Todo esto en los 60/70, debutando en solitario en 1972 con Begginings . Tras editar este disco, se mudó a USA donde tuvo un éxito moderado con el single “ Speak to the sky ” que hizo que su disco se metiera en el top 40 de los más vendidos. Hasta el inicio de la siguiente década, sacó más discos y empezó su carrera actoral pero su imagen se quedó en la del adolescente/joven. Sin embargo, todo esto cambió en el 81. Una doble explosió...

The Killer Barbies - Dressed to Kiss (Subterfuge, 1995)

Hace pocos días me llegó la noticia de la publicación del nuevo single de Killer Barbies. Excusa perfecta (aunque no hacía falta ninguna), para recuperar su primer disco. Uno de esos discos que en lo personal marcaron una época. Como se suele decir, lo que hoy traigo aquí no es un simple trozo de plástico, aquí hay vivencias y recuerdos de una época determinada de mi vida. Un disco que tenia en mi lista para FFVinilo desde hace tiempo, y que ha llegado el momento de compartir con todos vosotros. Lo cierto es que hace muchos a ños que no lo escuchaba completo. Lo hago ahora para escribir este texto, y, a pesar del paso del tiempo, no ha cambiado nada mi admiración hacia este trabajo. Me sigue pareciendo una absoluta genialidad. Es verdad que, en este caso, me resulta imposible separar el aspecto estrictamente musical con los recuerdos que acompañan a esta música. Pero eso no tiene nada de malo. Para mi es uno de los discos más importantes de la década de los 90. Durante ese peri...