Ir al contenido principal

Warlock - Triumph and agony - 1987



No hay otra dama del metal como Doro Pesch. Su voz puede subir tan alto como la de cualquier hombre pero mantiene la suficiente dulzura para engancharnos con elegantes baladas. Además, esa imagen de rubia maliciosa que sabe explotar llena de fuerza y sexualidad el escenario.
Warlock editó tres álbumes entre 1984 y 1986 (Burning the witchesHellboundTrue as steel) en una línea de heavy metal muy influenciado por Accept. De manera progresiva, introdujeron más elementos melódicos y perdieron algo de fuerza, buscando, quizá, aumentar sus ventas y su popularidad. Pero la cosa no acababa de funcionar.

Doro decidió romper la baraja y se mudó a Nueva York. Contrató a nuevos músicos y montó un proyecto a medias con Joey Balin, quien compuso y produjo el siguiente Triumph and agony. El sonido había evolucionado hasta un heavy rock más accesible en el que se mezclan momentos muy melódicos y guitarras hard con otros más afilados con tremendas baterías y explosivos riffs. Y, sobre todo, un trabajo vocal extraordinario.

Junto con Doro, el álbum lo grabaron Tommy Henriksen al bajo, Niko Avanitis y Tommy Bolan a las guitarras y Michael Eurich a la batería. 

Junto con Doro, el álbum lo grabaron Tommy Henriksen al bajo, Niko Avanitis y Tommy Bolan a las guitarras y Michael Eurich a la batería. La presentación del vinilo es espectacular con esa portada archifamosa de Geoffrey gillespie. La contraportada impresionante. La verdad, da gusto tener un vinilo con este artwork y poderlo disfrutar en su tamaño natural, je je. El interior contiene las letras, los créditos y alguna fotito. El vinilo es de buen gramaje y suena potente, lleno de vida y cuanto más subes el volumen, mejor se disfruta. 





Buen fin de semana a todos y todas!!

Comentarios

  1. Tremenda entrada y tremenda Doro y su voz ;D

    ResponderEliminar
  2. Muy especial este disco. Le tengo un cariño indescriptible.

    Gran entrada.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Power Trip - Nightmare Logic (2017)

  El disco de esta semana es uno de mis favoritos de los últimos años. No es un género que actualmente escuche demasiado pero sí que me gusta reescuchar los mejores trabajos que se han sacado en el mismo. Es por ello por lo que desde hace tiempo estaba pendiente de incorporar a mi colección. Power Trip no se anda con rodeos. Nightmare Logic es una descarga de thrash moderno con actitud hardcore, que toma las raíces del género y las machaca con rabia y contundencia. Ocho temas, poco más de media hora, y ni un momento de tregua.                                                   La fórmula es simple, pero funciona como un mazo: riffs afilados, ritmos implacables y una producción que potencia el golpe sin necesidad de embellecerlo. "Executioner's Tax (Swing of the Axe)" se ha convertido en un himno por méritos propios: groove pegajoso, mensaje directo y una ej...

Georgia Satellites - Georgia Satellites (Elektra, 1986)

  Este podría ser uno de los mejores discos debut de los ochenta si fuera de verdad un disco primerizo. Según como se mire, porque la historia que llevó al parto de esta joya que hoy nos ocupa tiene mucha miga. Remontémonos al inicio de 1983 cuando unos muchachos de Georgia consiguen grabar una maqueta de seis canciones en unos pequeños estudios de Atlanta con Jeff Glixman a los mandos. ¿Y por qué un productor tan afamado se fijó en estos desconocidos? Jeff era un tipo de Atlanta que gustaba de tomar cervezas en los garitos de la zona, allá donde hubiera actuaciones, y coincidió varias veces con “The Satellites” (que así se llamaban por entonces). Congeniaron y les hizo de celestina para aquella primera maqueta. Cuando las fechas para grabar un disco “de verdad” estaban a punto de llegar el verano siguiente, los muchachos partieron peras: adiós banda, adiós oportunidad.  Ya sabemos en este blog que la suerte aparece en el camino de muchos de nuestros músicos favoritos. Y en es...

Magnum - The eleventh hour (Jet Records, 1983)

Todas las bandas alcanzan en algún momento un “punto final”: si sobreviven a esa crisis el futuro del grupo está asegurado; de lo contrario, ¡adiós, amigos! En el caso de Magnum , este es el álbum que cambió la historia de la banda, el que pudo haber sido el final y se convirtió en la puerta al futuro.   Porque, cuando los muchachos estuvieron listos para grabar el que sería su cuarto disco de estudio, se encontraron con un “pequeño” contratiempo: la compañía (Jet Records) se negó a poner dinero para un productor o un estudio decente. Y, eso, teniendo en cuenta que su anterior Chase the dragon había alcanzado un decente puesto 17 en las listas de ventas británicas. Tony Clarkin se vio en la obligación de encargarse de la parte técnica por primera vez (en el futuro lo haría numerosas veces) y en unos estudios que, según sus palabras, “tenían un nivel tecnológico de 1930”. Bob Catley hizo de ayudante de producción y Dave Garland de ingeniero. "¡Vamos a hacer una tortilla de pat...

Rick Springfield - Living in Oz (1983, RCA)

    Pues voy a ser sacando mis mierdas ochenteras, tras los Mr. Mister y Bruce Hornsby . Como ya esperáis de mí, todo en una balanza que se decanta más por el pop que por el rock, pero con algún guitarreo majo que al final podría hacernos inventar un género hard pop o similar. Y esta vez el protagonista es el cantante y actor australiano, aunque su carrera se desarrolló principalmente en USA, Rick Springfield . El bueno de Rick comenzó a tocar en grupos en su Australia natal, también una época en Inglaterra cuando su padre fue destinado allí. Todo esto en los 60/70, debutando en solitario en 1972 con Begginings . Tras editar este disco, se mudó a USA donde tuvo un éxito moderado con el single “ Speak to the sky ” que hizo que su disco se metiera en el top 40 de los más vendidos. Hasta el inicio de la siguiente década, sacó más discos y empezó su carrera actoral pero su imagen se quedó en la del adolescente/joven. Sin embargo, todo esto cambió en el 81. Una doble explosió...

The Killer Barbies - Dressed to Kiss (Subterfuge, 1995)

Hace pocos días me llegó la noticia de la publicación del nuevo single de Killer Barbies. Excusa perfecta (aunque no hacía falta ninguna), para recuperar su primer disco. Uno de esos discos que en lo personal marcaron una época. Como se suele decir, lo que hoy traigo aquí no es un simple trozo de plástico, aquí hay vivencias y recuerdos de una época determinada de mi vida. Un disco que tenia en mi lista para FFVinilo desde hace tiempo, y que ha llegado el momento de compartir con todos vosotros. Lo cierto es que hace muchos a ños que no lo escuchaba completo. Lo hago ahora para escribir este texto, y, a pesar del paso del tiempo, no ha cambiado nada mi admiración hacia este trabajo. Me sigue pareciendo una absoluta genialidad. Es verdad que, en este caso, me resulta imposible separar el aspecto estrictamente musical con los recuerdos que acompañan a esta música. Pero eso no tiene nada de malo. Para mi es uno de los discos más importantes de la década de los 90. Durante ese peri...