Ir al contenido principal

Angel – White hot (Casablanca 1978)


Amigos, en los 80 fui un seguidor de los norteamericanos Giuffria, tanto que –cuando tuvieron sus problemas con MCA y tuvo que venir Gene Simmons a socorrer a su amigo Gregg– también me hice con el debut de House of Lords. Años más tarde, este White hot cayó en mis manos por 8 euros. En seguida relacioné a la banda con Giuffria porque en todas las biografías de su teclista y fundador se hacía mención a Angel, así que me lo tomé como la oportunidad de poseer un vinilo que faltaba en mi colección y escuchar al Gregg Giuffria setentero del que había leído pero nunca escuchado cosa alguna. Haciendo un poco de historia os diré que Angel se habían formado en Washington DC en los años 70 por Punky Meadows y Mickie Jones, guitarrista y bajista respectivamente. Había sido precisamente Gene Simmons de KISS quien los había descubierto –de ahí su amistad con Gregg– y había propiciado su fichaje por Casablanca records con la correspondiente grabación de su debut homónimo. La verdad es que nunca llegaron al estrellato e incluso tuvieron que bregar con el desprecio de parte de la crítica y la indiferencia generalizada de los medios. Mirad cómo de traumática sería la experiencia que, cuando Meadows dejó el grupo, se montó un centro de bronceado en un pequeño pueblo de Virginia y vivió totalmente apartado del negocio. Aún así, fueron capaces de grabar tres álbumes de estudio con la formación original y un par más con algunos cambios de formación (existe un sexto elepé grabado bajo el nombre de Angel que sólo tiene en sus filas ya al vocalista y al batería del line up original). Este que hoy os presento y que es –de momento– el único que tengo de la banda es su cuarta obra titulada White hot. Y creedme, pese a que quizás no los conozca ni el tato, eran estupendos. Grabado en The record plant de Nueva York con Eddie Leonetti a la producción, contó con la participación del mencionado Punky Meadows a las guitarras, Frank DiMino a las voces, Barry Brandt a la batería, Gregg Giuffria a los teclados y sintetizadores y Felix Robinson al bajo substituyendo al fundador Mickie Jones


Los temas que se podían escuchar al sacar el vinilo de la llamativa funda ilustrada por David MacMaken eran: 

A 
Don’t leave me lonely 
Ain’t gonna eat out my heart anymore 
Hold me, squeeze me 
Over and over 
Under suspicion 

B 
Got love if you want it 
Stick like glue 
Flying with broken wings (without you) 
You could lose me 
The winter song 

El disco comienza con unos bonitos teclados de Giuffria, que también tiene protagonismo a lo largo de Don’t leave me lonely, una preciosa muestra de rock melódico elegante que precede a Ain’t gonna eat out my heart anymore, tristemente el único Top 50 hit de la banda. Y digo tristemente porque en realidad no es una composición suya sino una versión del single de debut de los The Young Rascals. Es un pop rock sesentero simpático pero carente de complicación que, sin embargo, encantó a los seguidores de la banda mucho más que sus propios temas. Lo dicho, triste. Muchísimo mejor es la siguiente Hold me, squeeze me, un hard pop rock setentero con coros y pinceladas prog por cortesía de Gregg Giuffria y un buen trabajo de guitarras de Meadows. Over and over es un hard rock a lo Cheap Trick y Under suspicion, con la que finaliza la cara A, se acerca más al prog rock


Sonidos psicodélicos de sintetizador dan comienzo a la original Got love if you want it y luego llega una poco remarcable Stick like glue que, con su piano y los coros del estribillo me recuerdan a Nothing to lose de KISS. Flying with broken wings (without you) es un tema lento cuyo sonido y voces beben del pop rock sesentero de los Beatles. Se trata de una baladita que coge fuerza hacia el último tercio de la canción y precede a You could lose me, un hard rock zeppeliniano con arreglos de sintetizador muy interesante. Gran tema. Finaliza el álbum The winter song, una preciosa canción con gran presencia de los teclados de Gregg que no hace otra cosa que dar la razón a todos cuantos han convertido a los infravalorados Angel en un grupo de culto. Buenas melodías, ritmo y solvencia instrumental caracterizan sus trabajos. El por qué estos tipos no consiguieron el estrellato es algo que se me escapa. Y es que, como pasa en la vida, no siempre alcanzan la cima los mejores. 






¡There’s a feeling in the air, amigos, disfrutad de ello y feliz viernes! 

Por cierto, aunque no venga a cuento, deciros que tras décadas de alejamiento del mundo de la música, este año ha editado álbum Punky Meadows –recuperando a su compañero Felix Robinson al bajo– y debo deciros que el resultado es más que satisfactorio para un tipo que regentaba un salón de bronceado.


@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Buena entrada para la re-entrada vacacional. La verdad, casi nadie conoce a estos tipos. Yo llegué desde el debut de House of Lord (por aquí lo tengo, por cierto) y la historia con Gene. No soy devoto de este grupo pero son agradables de escuchar y tienen algunos buenos temas. Prefiero a Giuffria en "solitario". Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si, yo también prefiero a Gregg con David Glenn Eisley... pero tú lo has dicho, son agradables de escuchar y siempre va bien descubrir cosas poco conocidas por el gran público, sobre todo si tienen esta calidad. Otro abrazo, amigo.

      Eliminar
  2. Muy interesante aporte, saludos! \m/!!

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Extremoduro - Yo, minoría absoluta (DRO, 2002/2014)

  Cuando una banda de rock alcanza el éxito tiende a repetir la fórmula o a dejarse domar por los sonidos que le imponga la discográfica. En el caso de Roberto Iniesta, el Robe, alma, cerebro, venas y corazón de Extremoduro, el éxito le pilló preparado. "La masa es imbécil. Si sales en la tele puedes hacer un libro, un disco o lo que se te ponga en la punta del nabo. A mí eso no me interesa ni vender más discos ni que me conozca más gente. Como estoy ahora estoy bien, pudiendo organizar una gira y no tener que decir «no puedo dejar de tocar en noviembre porque no tengo un puto gil», así me vale". Y continuó haciendo lo que le dio la gana después del éxito de Agila (1996): editaron el directo Iros todos a tomar por culo (1998) y el controvertido Canciones prohibidas (1999), donde daban rienda suelta a su creatividad, con éxito y críticas reguleras.  Y se tomaron un descanso. "Creo que cuando siguen haciendo cosas buenas y nuevas los grupos funcionan, aunque estén dos o...

Ramoncín - Al límite vivo y salvaje (1990, BMG)

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que este sábado tengo una Cita con mi chica para irnos de concierto a ver y escuchar al señor José Ramón Márquez , os traigo uno de los directos más importantes del rock español. Muchos denostan y menosprecian la figura e impronta de Ramoncín en nuestro rock patrio por su época de adalid de los derechos de autor a la cabeza de la infame SGAE, por su etapa de tertuliano y protagonista del papel cuché e, incluso, por su largo periplo como presentador de un concurso de televisión (mis amigas se pegaban por ir de público para verlo, todo hay que decirlo). Bien, pues no saben separar el polvo de la paja. Yo paso de todo aquello, y me quedo con la música que es lo que todos aquí amamos. Me voy a quitar desde el principio la parte técnica e histórica. Grabado en el 90 durante unos recitales en los que no presentaba ningún disco nuevo lo que le quitaba un poco de presión. Luego nos enteramos de que eran una despedida: en aquel m...

Medina Azahara - En directo (Avispa, 1990)

  Ya lo he escrito en este blog: a veces no escucho música, escucho recuerdos. Las canciones se pegan a los momentos en los que vivimos y al volver a ellas es inevitable revisar las imágenes y las emociones que las acompañaron. En otras ocasiones, uno se siente hasta protagonista, como si el músico las hubiera compuesto para nosotros, pensando en "eso" que nos sucede. Y en otras, literalmente, sin tocar ningún instrumento, somos esa canción. Esto último sucede con este Medina Azahara en directo : yo estuve en ese concierto, por lo que, de algún modo, cuando escucho el disco, ahí al fondo, está mi voz. Fan de "los Medina" ni fui ni me considero, pero un concierto de ruido al lado de casa había que disfrutarlo. El álbum se grabó un 30 de junio de 1990 en el anfiteatro Egáleo de Leganés, Madrid, escenario al aire libre mítico aquellos años; allí vi también a Panzer, Burning, Sangre Azul y alguno más. Por cierto, a la banda la presentó aquella noche José Carlos Molina (...

Los Relámpagos – Nit de llampecs (Novola-1965)

Y tras el hiato estival y la visita de Hetfield & co . de hace quince días, hoy toca reseña de la serie “ Los singles de mami ” en la que, como ya sabéis los habituales, aúno mi amor a la música en formato vinílico con el recuerdo a mi madre –fallecida hace poco más de un año– y a su gusto por la música pop de su juventud. Los protagonistas de hoy son Los Relámpagos , un grupo de rock instrumental que –como muchas bandas e intérpretes en aquella época– surgieron a raíz de un concurso musical en el que coincidieron José Luis Armenteros (guitarra), Pablo Herrero (órgano), Ricardo López Fuster (batería) y los hermanos Ignacio y Juan José Sánchez-Campins (guitarra y bajo, respectivamente). Los cinco darían forma a Dick y los relámpagos , que no tardaron en perder de su nombre a Dick , fuese quien fuese el tipo.    En 1962 comienzan a tocar en un club a cambio de vales de consumición y propinas y dedican los domin...

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero ...