De Golpes Bajos tengo dos recuerdos muy precisos de mi preadolescencia Uno de ellos es la primera vez que escuché su canción “Colecciono moscas”. Mi primo nos la puso (a mis hermanos y a mí) en su radiocasete (la había grabado de la radio), y aún recuerdo esa sensación de sorpresa al escuchar la inusual letra. Recuerdo perfectamente que no prestaba mucha atención a la música. Toda mi atención estaba centrada en imaginar lo que la letra de la canción relataba: un tipo observando su colección de moscas en su habitación. Y claro, al estar escrita en primera persona, y con esa histriónica forma de cantar, me imaginaba a ese loco coleccionista de moscas narrando las desventuras de estos insectos. La segunda es el video de “Cena recalentada” que, si la memoria no me engaña, salía en “La bola de cristal”. Lo que recuerdo sobre todo es la sensación de tristeza que provoca esta canción (que yo tengo indisociablemente asociada al video). ¿Cómo puede una canción transmitir de manera tan real