Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando las entradas etiquetadas como 1989

Barricada - Rocanrol (1989)

Toc, toc. ¿Se puede?. Reconozco que me da un poco de vergüenza asomar la cabeza por aquí así sin avisar. Puede que algunos os acordéis de mi. Otros diréis, ¿y este?, ¿de dónde ha salido ahora?. No recuerdo la última vez que escribí en esta casa que ayude a fundar, y no es que sea incapaz de ubicarme en el tiempo tan solo por mi mala cabeza, es que han pasado ya unas cuantas -bastantes- lunas desde la última. Eso sí, nunca he dudado un instante de ser bien recibido, ya lo cantaban Barricada, "...aún queda un sitio, si me quieres acompañar". Ay, los Barri. Mis queridos Barricada. ¡Qué suerte hemos tenido de haberlos disfrutado, haber sido coetáneos de sus tiempos!. ¡Qué afortunado me siento de haberlos visto en directo un puñado de veces!. Fueron mi primera vez, Cádiz, ahora mismo tengo una laguna mental, que no sabe ubicarme si en 1989 o 1990. El caso es que era la primera vez que acudía a un concierto, y recuerdo cada segundo que pasé frente al escenario, dejándome la voz a l

Soga – Juega Limpio (1989 – EDIGAL)

A parte de estar en las cubetas de  heavy nacional , dos cosas me llamaron la atención de este disco, la cachonda y horrible fotografía para una portada de un disco -vamos para cualquier portada de algo-, que creía indicaba que iba a escuchar algo así como a los Mojinos o al  Opa , me equivoqué, y la segunda el reclamo de  “Nº 1! en ninguna parte ”, que en el inserto atribuyen a Carlos Pina, me imagino que en clara referencia a nuestro  Panzer radiofónico . De Santiago de Compostela,  SOGA  lo forman Santiago Pérez, cantante, Armando Díaz " Mandy ", guitarra, Alfonso Díaz " Sito ", guitarra, José Luis Gómez, al bajo, e Isidro, a la batería.  En 1989, entran en los estudios Soniarte de Vigo, para grabar, para el sello gallego Edigal, su primer y único trabajo discográfico bajo título de  Juega limpio . La producción corre a cargo del propio grupo y Arturo Sabugueiro. La comentada foto de portada es de A. Lubián y L. Bará, y el logo de la banda dibujado en la contrapo

Black Jack - Do you want to play, or…? (Cambaya Records – 1989)

Y llegó agosto. Creo que aún no nos habíamos pasado por Málaga, donde, tanto la capital como provincia, son unos de los destinos turísticos preferidos por lugareños y foráneos. Pues sí, también en Málaga se hacía hard rock en los ochenta. En 1987, Sergio Cascales " Sergei ", cantante;  Caniho  y Gabi, a las guitarras; Paco " El Indio ", al bajo;  y Antonio Otero  "Oti" , a la batería, forman  BLACK JACK , banda heredera nacional, tanto musical como estéticamente, del hard rock angelino que se hacía por aquellos años. Tras varios conciertos y actuaciones en festivales de la zona, consiguen grabar su primer y único álbum de título  Do you want to play, or...?  con nueve temas cantado íntegramente en inglés, que intuía la proyección internacional de la banda teniendo como trampolín una de las ciudades más cosmopolitas de España. Parece ser que tenían un segundo trabajo entre manos de título  The same old fuckin stuff , que habían plasmado en un master de doce

Tina Turner - Foreign Affair (1989, Capitol Records)

  Pues hoy vengo a reparar una tremenda injusticia que se está cometiendo en este blog con una de las más grandes figuras del mundo del rock. De hecho, muchas veces se la etiqueta como la “Reina del Rock”.   Efectivamente, aunque parezca mentira, no existe ninguna entrada sobre Tina Turner en el #FFVinilo. Y aún estamos dentro del primer mes de su fallecimiento en mayo del 2023, por lo que, como doble homenaje a su figura, os traigo uno de sus mayores éxitos: el Foreign Affair de 1989. Hubiese preferido reseñar el Private Dancer , el Break Every Rule o el Tina Live in Europe . Incluso uno que estaba por casa de mis padres con el “mano larga” Ike . Pero es que este es el único LP que tengo de ella y es lo que os voy a dar. Tampoco me meto en contar su historia, pues se supone que es conocida por todos o casi todos (biopic en los 90 protagonizado por Angela Bassett , musical en el West End y Broadway en la década pasada…), ni en su influencia en el mundo de la música (el propio Mick

Vamp - The rich don't rock (Atlantic, 1989)

  ¿Qué hacía falta para triunfar en el rock a finales de los ochenta? Exacto: unos chicos guapos con mucha peluquería, un productor de renombre y una compañía poniendo dinero. Aquí tenemos a los melenudos: Dicki Filszer a la batería, Oliver Scholz al bajo, Ricolf Cross a las guitarras y Tom Bellini a la voz. Tres alemanes (de Bonn para más señas) y un cantante yanqui. El productor: Tony Platt, quien había trabajado a la sombra de «Mutt» Lange para AC/DC y Foreigner y se había curtido en singles y discos de Iron Maiden, Saxon, Motorhead o Gary Moore, entre otros. ¿Y la compañía? No podía ser más grande: Atlantic.  Además, estos muchachos parieron una joyita de hard rock que puede rivalizar con cualquiera. La voz de Bellini, sin destacar del conglomerado de cantantes de la época, resulta fantástica, muy bien trabajada en el estudio y con unas interpretaciones de altura. Cross juega con el shredding, claro, pero sin abandonar la melodía y dejando unos riff estupendos. La pareja rítmica su

Bonnie Raitt - Nick of Time (Capital Records, 1989)

      Sigo buceando en los vinilos que me compré a finales de los 80 y principios de los 90 de mujeres con voces personales. Alguna también en CD, claro. Ya os he traido por aquí a Alannah Myles , Cher , Melissa Etheridge , Belinda Carlisle , Bonnie Tyler . No sé por qué, pero durante unos años sentía predilección por ese tipo de voces. Quizás Bonnie Raitt sea la poseedora de la voz menos marcada entre todas las que os he ido contando. Pero recuerdo que el Lp de Nick of Time fue bastante promocionado, ganando diversos premios y creo que eso pesó casi más en la compra del vinilo que la atracción de su voz.   En absoluto quiero insinuar que el disco es malo. Sólo que podría ser mejor. Raitt comenzó en esto de la música a principios de los 70, con una mezcla de folk, blues y rock muy típica en aquellos lares americanos que llevó su disco de 1972 Give it Up al número uno. Durante esa década mantuvo un relativo éxito, pero en los ochenta casi desapareció del mapa. Terminó abandonando