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Mostrando las entradas etiquetadas como Poison

Poison - Open Up and say... ahh! (1988 - Enigma/Capitol)

Todos amamos la música con la que nos criamos, aquella que escuchamos con diez, quince, veinte años, cada uno tiene su época. Algunas veces, esa música se pierde en el tiempo, la abandonamos, por mala, por que cambiamos de gusto, por que crecemos y nos sentimos otra persona. Pero en ocasiones, al volver a escuchar una canción con la que bebíamos, reíamos o intentábamos llevarnos a alguien a la cama (para dormir, ojo) hace muchos años se nos curva el bigote y nos bota un poquito el culo. A mí me pasa con un par de canciones de este Open up ane say... ahh!   de los archifamosos y multidespreciados Poison . Comienzan los acordes de Nothin' but a good time o Fallen angel y me pongo a cien. ¿A quién le importa que sea de una calidad ocho o cuatro? Me molan. Adoro esos riffs, esos estribillos, esos vídeos ridículos y vacilones, esos cardados, esa voz, esa producción tan L.A.80s. No se puede explicar: o lo amas o lo odias. Y yo amo a estos tipos. ¿El álbum? Ah, claro, que esto

Poison – Look what the cat dragged in (Enigma -1986)

Amigos, en este viernes festivo os traigo un vinilo que si de algo puede calificarse es de eso, de festivo. Con más de cuatro millones de ejemplares vendidos en todo el mundo, este Look what the cat dragged in de Poison es uno de los álbumes imprescindibles del hard rock de los 80. Sin embargo, no siempre he opinado igual. Lo admito. Con un frontman cuya voz me recordaba a la de Vince Neil y una pinta glam demasiado exagerada y artificial –yo era de los que abominaba de sus morritos hinchados, una de las señas de identidad más llamativas de la banda que rayaba lo ridículo y conseguía mi desprecio–, estos chicos de Pennsylvania que se plantaron en Los Angeles no se convirtieron precisamente en mis preferidos cuando coparon las portadas de revistas como Hit Parader . Durante años, escapé de ellos como de la peste. Pese a todo, esa imagen colorista que consiguió tantos fans como detractores estaba unida a una actitud sleazy , estribillos facilones y coreables y un sonido de guitar