Hace años, en pleno apogeo de los vinilos, no era nada difícil encontrar bootlegs en cualquier tienda de discos. La mayoría de ellos costaban un ojo de la cara y además, en muchas ocasiones, resultaban ser un bullicio apenas audible. A día de hoy que con un simple click puedes acceder a miles de grabaciones en directo del grupo que desees han perdido un poco su esencia, pero antes era una de las pocas opciones que teníamos de poder escuchar conciertos de giras anteriores o actuales de nuestros grupos preferidos. Hace un tiempo, con el resurgir del vinilo, se están editando bootlegs de nuevo y continúa siendo emocionante toparse con alguno de ellos en las tiendas de discos. Si encima se trata de un directo con buen sonido y a buen precio, como es el caso, la satisfacción es doble.