Ir al contenido principal

Angelus Apatrida - Hidden evolution (Century Media, 2015)


Qué bueno es tener entre nosotros a una gran banda de thrash metal, un combo que gira por ciudades cercanas y al que podemos disfrutar de vez en cuando. Si no los has visto nunca en directo, no te los pierdas si se pasan cerca de tu ciudad: atronadores y precisos.

El nuevo disco de Angelus Apatrida continúa la senda de su anterior "The call" y recupera
elementos de aquel excepcional "Give'em war", creando un conjunto de temas más que recomendables. Sigue sonando a una mezcla que podríamos encasillar titulando al álbum "Painkiller is my business" pero con enormes influencias de bandas como Testament, Exodus o, incluso, Slayer. Canciones como Inmortal o Serpens on parade corren, revientan cuerdas, parches, cuellos, mientras que otras se recrean en la melodía, en buenos estribillos, en la mezcla justa de cambios y armonías: End man, Wanderes forever. Y entrelazando todo esto, ambiciosa voz propia: la que da título al álbum, Hidden Evolution, con sus más de ocho minutos, o Tugs of war, y sus imprevisibles cambios.

Letras con toque apocalíptico, tocando la guerra, el futuro del hombre y la esperanza en uno mismo, con unas composiciones y una interpretación lograda.


Angelus Apatrida lo forman Guillermo Izquierdo a la voz y la guitarra, David Álvarez también a la guitarra (una pareja absolutamente descomunal), José Izquierdo al bajo y Víctor Valera a la batería (qué caña metes, crack). La producción se la curran Daniel Cardoso y la propia banda. Fue grabado en los Ultrasound Studios 2 de Moita (Portugal).

El workart corresponde a Gyula Havancsák con diseño de Guillermo.


El vinilo de Century Media se presenta muy cuidado, con una calidad de materiales de primera. Suena muy bien, equilibrado, limpio a pesar del estruendo que mete. Además, trae de "regalo" el cedé (incluye de tema extra una versión del "Higway star" de Deep Purple) y en la pre-venta "regalaban" una camiseta (perdón, t-shirt) del grupo (fea de narices, pero qué más da).

Si te gusta el thrash, imprescindibles. Buen fin de semana.

Angelus Apatrida - End man


Angelus Apatrida - Architects


Angelus Apatrida - Wanderers forever



Comentarios

  1. Por mi parte y por ahora el mejor trabajo del thrash patrio, pero echo de menos ese megatema que lleve a los albaceteños a las grandes ligas. Todo se andará ya que son jóvenes y calidad, ideas y ganas no les falta. Bonito vinilo. Saludos

    ResponderEliminar
  2. Un discazo de éste año sin duda pinta para mi como uno de los mejores materiales del 2015 en cuanto a Metal se refiere. Sin duda que cuando lo vea en éste formato lo voy a comprar. Una gran reseña amigo.

    ResponderEliminar
  3. Es un grupo que va mejorando con cada disco, éste me parece una pasada. Pronto viene por Murcia, a ver si hay suerte y puedo verlos, ganas no faltan

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Firehouse - Firehouse (CBS, 1990)

El pasado 5 de abril falleció el cantante de Firehouse, Carl Jeffrey Snare, por un fallo cardíaco en un proceso cancerígeno que le había llevado unos días antes a pasar por un quirófano. Además de ser un seguidor fiel de la banda, les he visto dos veces en directo; una de ellas la recuerdo con especial felicidad por lo que disfruté (tocaron junto a unos fantásticos TNT).  Casualmente, la semana pasada en este blog hablaba, en los comentarios de un post, del legado de algunos músicos más o menos desconocidos por el "gran público" comparándolo con otros del mismo o menor valor idolatrados, quienes reciben homenajes y se les dedican calles. Con esa reflexión me quedé enganchado. Al repasar la discografía de Firehouse, me di cuenta de algo obvio: existen músicos que han dejado un legado en nosotros. Da igual lo importante que sean más allá de nuestras orejas. Nos pertenecen. Y C. J. Snare es, para mí, uno de esos músicos. Desde este debut que hoy comparto su voz me ha acompañ

Scorpions – Love at first sting (Harvest-EMI, 1984)

Y si hace unas semanas os hablé aquí del inmenso 1984 de Van Halen , hoy toca comentar el no menos imprescindible Love at first sting de los alemanes Scorpions , otro que este año también celebra su 40º aniversario. La banda venía de una gira internacional presentando Blackout , el pedazo de disco que finalmente los había puesto en el mapa –yo mismo los descubrí gracias a él, os lo conté aquí – y tenían la misión de superarse, algo nada fácil no sólo en el aspecto creativo. Una de las razones era la mala relación entre el bajista Francis Buchholz y Dieter Dierks , dueño de su compañía de discos y productor del grupo desde 1975. Por eso, cuando la banda –que empezaba a tener dinerito del bueno– pidió grabar el nuevo álbum en un estudio que no fuese el del productor, Dierks se los llevó a los Polar studios de Estocolmo –exacto, los de Björn y Benny de ABBA – pero dejó en Hannover al bajista, contratando como músico d

CJ Ramone "Last Chance To dance" (2014)

En 1989 poco después de la publicación de   Brain Drain ,  Ramones  se encontraban en un momento de crisis interna. El bajista y principal compositor del grupo, el carismático  Dee Dee Ramone , abandonaba el combo definitivamente. Para cubrir su plaza  Johnny  reclutó al joven  Chris Ward , rebautizado para la ocasión como  CJ Ramone . Al principio, como es normal, costó que los fans del grupo lo aceptasen pero a lo largo de los siguientes siete años  CJ  llegó a tener un fuerte rol dentro del grupo, llegando a grabar hasta cuatro temas en  Adiós Amigos  (1995), el disco póstumo de  Ramones.

Barricada - Rocanrol (1989)

Toc, toc. ¿Se puede?. Reconozco que me da un poco de vergüenza asomar la cabeza por aquí así sin avisar. Puede que algunos os acordéis de mi. Otros diréis, ¿y este?, ¿de dónde ha salido ahora?. No recuerdo la última vez que escribí en esta casa que ayude a fundar, y no es que sea incapaz de ubicarme en el tiempo tan solo por mi mala cabeza, es que han pasado ya unas cuantas -bastantes- lunas desde la última. Eso sí, nunca he dudado un instante de ser bien recibido, ya lo cantaban Barricada, "...aún queda un sitio, si me quieres acompañar". Ay, los Barri. Mis queridos Barricada. ¡Qué suerte hemos tenido de haberlos disfrutado, haber sido coetáneos de sus tiempos!. ¡Qué afortunado me siento de haberlos visto en directo un puñado de veces!. Fueron mi primera vez, Cádiz, ahora mismo tengo una laguna mental, que no sabe ubicarme si en 1989 o 1990. El caso es que era la primera vez que acudía a un concierto, y recuerdo cada segundo que pasé frente al escenario, dejándome la voz a l

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.