Sorprendentemente uno de los mejores temas de aquéllas maquetas, la iracunda "Violent Kid" se queda fuera de un excelente debut grabado en los Dierks Studios alemanes con la supervisión del afamado productor de Scorpions y dueño de los estudios, Dieter Dierks. El disco vendió relativamente bien, aunque lejos de lo conseguido por los debuts de vecinos como Ratt o WASP. El sonido del debut de BNB se decantaba por los efluvios que emanaban en los dos discos que Def Leppard habían grabado con Mutt Lange, por lo que muchos de los temas debut suenan Pyroleppardianos dentro de una pasta metálica aderezada por unos chorus de lo más potentes, ahí tenemos "Hold On to 18" y " Wicked Bitch" donde se ven las influencias del nuevo metal británico con las propias del Rock duro USA de finales de los 70 (Kiss, Starz, Aerosmith o los británicos Sweet, de los que rescatan con éxito "Action")
Extraña un poco pues el giro de 180 grados que experimentaría la banda tan solo un año después con la publicación del segundo álbum ("Without Love") donde se mantenía el sonido más Leppard, pero despojándolo de su filo metálico y sustituyéndolo por unas melodías muy cercanas al AOR tan de moda a mediados de los 80, como si el grupo de repente estuviese más interesado en Loverboy o Bryan Adams, buscando quizá esa mezcla de Pastel endurecido que Ratt habían cocinado para el superventas "Out Of The Cellar" un año antes.
E imagino que buscando a su propio Beau Hill, Geffen apuesta por el músico (miembro de Prism) Bruce Fairbairn que como productor ya había trabajado con sus paisanos Loverboy y con los Blue Oyster Cult junto a un viejo conocido de Brian Adams en las tareas compositivas, Jim Vallace.
Copia Geffen USA 1985 |
La banda seria la misma, pero el sonido de las canciones será totalmente diferente a lo grabado en el periodo del 81 al 84, cuando aún estaban en Portland y cuando se mudaron a Los Angeles buscando la suerte de unos Van Halen o unos Mötley Crüe.
Seguramente que no pocos fans se quedaron a cuadros con el sonido de canciones que miraban al Pop de soslayo, esas baladas cuasi aoreras ("Strange Things" y "Miss Mistery") o el Heavy Pop de "Nature of The Beach" y "Stop The Lightning", con tantos teclados como los que podían usar Honeymoon Suite, todo ello sirvió para que los poco convencidos les dejasen tirados mientras que una base sólida y no muy grande les seguirá durante este y dos discos más, sobre todo el público femenino (Algo que comentaba gente de Warrant en "Nothin But a Good Time" de Tom Beaujour y Richard Bienstock), que conectaba más con el gancho ultra comercial del tema título, estupendo por otra parte, con ese sonido deudor todavía de los Leppard más radiofónicos, o de la inicial "Rock on a Heavens Door", un atractivo y resultón Rock Duro de estribillos mega tarareables y guitarras afiladas lo justo para ser pasto de las FM, algo que desgraciadamente no ocurriría, en una jugada pésima en mi opinión del sello a la hora de elegir single y clip para las estaciones de radio o para la incipiente MTV.
Obviamente el Heavy americano a la Dokken sigue presente, "We Got The Fire" es más que satisfactoria con su estribillo Loctite, y "Bombastic Plastic" pese a su bobalicón estribillo es lo bastante cool como para escucharla del tirón. Luego tenemos un Hard Blues Sleazy vacilón ("Two Wrongs dont Make it Love") y la divertida "Swing Time", un tema inspirado probablemente en los Van Halen, al menos en el tempo de la canción. La edición japonesa incluye un tema extra, una potable versión del clásico de Aerosmith "Same Old Song & Dance".
Una vez publicado el disco les metieron como parte del Asylum Tour de KISS y las ventas fueron más discretas que las del debut. Personalmente creo que canciones para conseguir algún hit tenían en Without Love, pero el sello tan solo apostó por Miss Mistery que pasaron regularmente por los programas heavy rockeros de la MTV. Otro apunte, a John Bon Jovi parece ser que le flipó el sonido del disco por lo que insistió a su sello para la contratación de Bruce Fairbairn para el tercer trabajo de su banda Slippery When Wet, y el resto como se ha dicho mil y una veces ya es historia.
Del primero ya di cuenta aquí mismo hace unos años y es cierto que este supone un paso atrás en calidad y fuerza. No obstante, la producción es buena y el sonido es fiel reflejo de su época. Estupenda entrada y buen disco para comenzar el sábado. Saludos. KING
ResponderEliminarme gustó la reseña y fue lo que me animó a escribir esta.
EliminarEstupenda reseña. A mí este disco me gusta mucho, en especial por el sonido, fíjate, que consiguió (junto con lo hecho para Loverboy, por ejemplo) llevar a Fairbairn al regazo de la fama con aquel Slippery mítico. Por cierto, tendría que comprobarlo, pero no me suena que Fairbairn produjera a REO. Lo del cambio es natural teniendo en cuenta la compañía de discos y la época. Luego de aquella gira con Kiss cayeron en las manos de Gene Simmons y la cosa se torció del todo. Saludo, colega.
ResponderEliminarha sido una errata por mi parte, he confundido a Fairbairn con Kevin Beamish, así que toca arreglarlo. Mil disculpas!
EliminarRecuerdo este disco que estaba en la colección heavy de mi hermano y me resultaba agradable de escuchar. Lo he vuelto a poner y será que me gusta el sonido Fairbairn, me sigue molando y resultando fácil y agradable de escuchar. Un saludo.
ResponderEliminarFui muy fan de Black N Blue, hasta el punto de que era mi banda favorita de Heavy Americano 80`s junto a Dokken, Ratt o Motley Crue.
EliminarTela!!
Eliminar