Ir al contenido principal

The Beatles - A Hard Day's Night (Parlophone, 1964)


Lo que voy a comentar a continuación no suele estar bien visto entre fans fatales de los Fab Four, pero qué le voy a hacer, estos son mis principios y no tengo otros. A Hard Day's Night es mi disco favorito de los Beatles, el que más veces he escuchado y al que mayor cariño profeso. Supongo que queda mucho mejor decir que tu favorito es el Rubber Soul o el Revolver, pero no sería cierto. Es cierto que, según el momento vital que atraviese, suele haber un disco de los Beatles con el que me sienta más identificado, pero cada vez que vuelvo a escuchar A Hard Day's Night me siento como si volviera a casa. No importa dónde esté o cómo me haya ido ese día, estos treinta minutos son sinónimo de felicidad. Es lo que tiene la música: cuando te toca de verdad no hay manera de pararla, y ella a cambio te salva la vida una, mil y todas las veces que sea necesario. Imagina no amarla.
Después de esa introducción un tanto melosa, pero qué demonios, cierta, es momento de comenzar a surcar el LP, que se publicaba un día como hoy de 1964. La edición americana salió un par de semanas antes, pero con menos canciones y con diferente orden. Cosas de la industria discográfica del momento.


Gozosa cara A

La canción homónima se podría describir, sin miedo al error, como un elixir de la vida eterna comprimido en apenas dos minutos y medio. Mi parte favorita llega con ese puente donde Paul McCartney canta eso de "when I'm home, everything seems to be right", porque refleja perfectamente lo que siento con este disco. Los surcos continúan con I Should Have Known Better, cuyo inicio acompañado de esa armónica gozosa te invita a cantar hasta la afonía. If I Fell aparece para bajar un poco las revoluciones, rodeada de un aura intimista que te engancha sin remedio. I'm Happy Just to Dance with You es una de mis favoritas dentro de favoritas, con un ritmo irresistible de principio a fin. La letra no es ninguna maravilla en cuanto a que no invita a reflexiones cósmicas ni metafísicas, pero es adictiva como una canción pop debe serlo. Y para qué más. Tell Me Why consigue hechizarme sin límites, es empezar a cantar John Lennon y yo ya no sé si lo que se mueven son mis piernas, si mi cabeza sigue estando sobre los hombros... yo ya no sé nada.


 Maravillosa cara B

Any Time At All brilla con luz propia de manera espectacular, con un John Lennon simplemente brutal a unas voces de las que te atrapan sin preguntar. Things We Said Today, por otra parte, es seguramente la joya oculta del disco. Es una balada maravillosa de Paul McCartney que, directamente, rompe con los esquemas del disco. La letra evidencia una dedicación que supera al resto de canciones, mientras que musicalmente ofrece una calidez inusual para tratarse de una canción tranquila, como si intentara abrazar al oyente.
La All Together Band, maravilloso grupo de versiones de los Beatles, estuvo tocando estas canciones hace un buen puñado de años en un restaurante de Villaviciosa de Odón. Yo estaba ahí junto a mis padres y unas pocas personas más, pero para mí no habría sido menos emocionante si se hubiese tratado del Madison Square Garden. Yo flipé con When I Get Home, con Any Time At All, con A Hard Day's Night... me enamoré del todo de unos Beatles que siempre me han acompañado en mi vida, y espero que continúen haciéndolo. Creo que, viniendo de un amante de los Kinks como yo, Paul, George, Ringo y John pueden sentirse más que satisfechos por eso. Eternas gracias por la música.


Comentarios

  1. Cuánta razón tienes. Cuando un disco te llega, te llega, y las razones sólo las sabes tú. Luego lees aquí y allá que no fue uno de los mejores discos del grupo, o cualquier otra cosa, pero a ti te da igual, porque a ti te llegó, y ¿cuál es la función de la música sino la de generar emociones?
    Happy b-day a este disco que cumple años hoy, y que se siga escuchando muchos años. Buen fin de semana.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Efectivamente, el día que la música deje de generarnos emociones será porque estamos muertos. Por muchos años más de Beatles. Igualmente!!

      Eliminar
  2. De los Beatles es incontestable su lugar en la historia de la música y evidentemente me conozco los temas que todo el mundo ha escuchado mil veces. Sin embargo, nunca he profundizado en su carrera ni he escuchado sus obras de forma global. Pero, como toca, este finde cae el disco que recomiendas. Por cierto, totalmente de acuerdo con lo que dices. La crítica o incluso los grupos pueden opinar de sus álbumes lo que quieran, pero el mejor para uno mismo es el que importa de verdad por lo que te haya transmitido en su momento o por lo que te evoque con el paso de los años. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Efectivamente, y esa es al fin y al cabo la parte más bonita de la música. A mí que tal revista diga que el Sgt Pepper's es el mejor disco, o que otra coloque al Padrino como mejor película pues me da igual, lo que de verdad importa es lo que a cada cual le transmiten por dentro. Saludos King!!

      Eliminar
  3. Dos reflexiones así a bote pronto una vez leída tu entrada. Hay que tener principios de reserva, tenlo en cuenta, por si ocurren emergencias insoslayables. Y qué razón tienes: la música es emoción en primer lugar y luego técnica y matemáticas y mercadeo y todo lo demás. Lo que me gusta, me gusta, y si no es "lo mejor" me da igual. Siempre discuto sobre eso: ¿el mejor objetivamente? Eso cómo lo valoras. Dónde está la escala. Respecto a The Beatles, yo huyo de algunas de sus grandes obras, como de los Rolling, y me refugio en esos otros "menores" (ya ves). Como este, que me encanta también. Quizá me gusta más Revolver. Pero no me verás pinchar mucho al sargento. En fin: por aquí somos muy pasionales. Por eso, también, escribimos este blog. Por el placer de compartir el placer que la música nos mete en el cuerpo. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Intentaré contactar con Groucho a ver si consigo que me cuente el secreto sobre cómo conseguir principios de reserva si no gustan los primeros jeje. Y con respecto a lo otro, bueno, así es como lo siento yo, me parece absurdo catalogar un disco como "el mejor" porque creo que, en un mundo tan pasional como el de la música, no es posible la objetividad. Y tú lo has dicho: por eso escribimos aquí. Abrazo!!

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Firehouse - Firehouse (CBS, 1990)

El pasado 5 de abril falleció el cantante de Firehouse, Carl Jeffrey Snare, por un fallo cardíaco en un proceso cancerígeno que le había llevado unos días antes a pasar por un quirófano. Además de ser un seguidor fiel de la banda, les he visto dos veces en directo; una de ellas la recuerdo con especial felicidad por lo que disfruté (tocaron junto a unos fantásticos TNT).  Casualmente, la semana pasada en este blog hablaba, en los comentarios de un post, del legado de algunos músicos más o menos desconocidos por el "gran público" comparándolo con otros del mismo o menor valor idolatrados, quienes reciben homenajes y se les dedican calles. Con esa reflexión me quedé enganchado. Al repasar la discografía de Firehouse, me di cuenta de algo obvio: existen músicos que han dejado un legado en nosotros. Da igual lo importante que sean más allá de nuestras orejas. Nos pertenecen. Y C. J. Snare es, para mí, uno de esos músicos. Desde este debut que hoy comparto su voz me ha acompañ

Scorpions – Love at first sting (Harvest-EMI, 1984)

Y si hace unas semanas os hablé aquí del inmenso 1984 de Van Halen , hoy toca comentar el no menos imprescindible Love at first sting de los alemanes Scorpions , otro que este año también celebra su 40º aniversario. La banda venía de una gira internacional presentando Blackout , el pedazo de disco que finalmente los había puesto en el mapa –yo mismo los descubrí gracias a él, os lo conté aquí – y tenían la misión de superarse, algo nada fácil no sólo en el aspecto creativo. Una de las razones era la mala relación entre el bajista Francis Buchholz y Dieter Dierks , dueño de su compañía de discos y productor del grupo desde 1975. Por eso, cuando la banda –que empezaba a tener dinerito del bueno– pidió grabar el nuevo álbum en un estudio que no fuese el del productor, Dierks se los llevó a los Polar studios de Estocolmo –exacto, los de Björn y Benny de ABBA – pero dejó en Hannover al bajista, contratando como músico d

CJ Ramone "Last Chance To dance" (2014)

En 1989 poco después de la publicación de   Brain Drain ,  Ramones  se encontraban en un momento de crisis interna. El bajista y principal compositor del grupo, el carismático  Dee Dee Ramone , abandonaba el combo definitivamente. Para cubrir su plaza  Johnny  reclutó al joven  Chris Ward , rebautizado para la ocasión como  CJ Ramone . Al principio, como es normal, costó que los fans del grupo lo aceptasen pero a lo largo de los siguientes siete años  CJ  llegó a tener un fuerte rol dentro del grupo, llegando a grabar hasta cuatro temas en  Adiós Amigos  (1995), el disco póstumo de  Ramones.

Paice Ashton Lord - Malice in Wonderland (Polydor, 1977)

Esto no estaba previsto. Este disco no estaba en la lista de títulos para reseñar en #FFVinilo. Pero es que el fin de semana pasado por fin pude hacerme con él, y tenía ganas de compartirlo. Los que leéis esto ya conocéis esa sensación de ir pasando discos y encontrar de repente esa portada que tienes en la cabeza desde hace tiempo. Qué sensación. Se que vosotros me entendéis, así que no encuentro mejor foro para compartir ese momento que este blog, lleno de melómanos “vinileros”. Lo curioso es que no solo encontré una, sino dos copias, una francesa (“gatefold”) y una inglesa (sencilla). Con buen criterio, me quedé con la inglesa. Y claro, eso se nota en el sonido. ¡Como suena esta maravilla! Si os gustan esas producciones típicas de los 70 con mucha profundidad y dinámica lo vais a disfrutar (nada que ver con las producciones actuales, cada vez más “planas”). A la producción, la leyenda, Martin Birch (Deep Purple, Whitesnake, Black Sabbath, Iron Maiden, …). ¿De dónde sale este grupo?

Saxon - Destiny (EMI Records - 1988)

  Grabación sonora original, EMI Records . Vinilo en edición española (Madrid), 1988.   Incluye las letras de las canciones, como debe de ser!! El disco de la controversia. El disco de Saxon que odian hasta los propios Saxon (o al menos Biff Byford ) y que fue vilipendiado por prensa y público cuando salió el 20 de junio de 1988. Desde “ Wheels of Steel ” y “ Strong Arm of Law ” (los dos producidos por Pete Hinton ), la banda cambió de productor en cada disco porque nunca acababan contentos con el resultado y de cara a "Destiny" no iban a ser menos. Después de trabajar con Gary Lions en “Rock the Nations”, el elegido (por EMI ) fue Stephen Galfas (que había trabajado con artistas tan dispares como Meat Loaf ,  Stryper , Cher , Savatage , Allman Brothers o Kool & The Gang ) quien se encargó de la producción del disco, logrando ese sonido tan “americano”, buscado por la discográfica. Ya en los discos anteriores, sobre todo desde que ficharon por la todopode