Tengo que reconocer que no hace
mucho tiempo que empecé a escuchar la música de Jeff Beck. Hasta ahora era para
mí uno de esos tantos músicos de los que escuchas hablar y ni siquiera sabes
decir una canción o un álbum, pero sabes que es un grande.
Según he leído, es uno de los guitarristas
más respetados, o al menos en algún momento lo fue, por Ritchie Blackmore. Y claro, con un tan reputado padrino no podía
hacer más que escuchar a este maestro de las seis cuerdas.
Son ya varios los vinilos que
atesoro de Beck, y aunque empecé escuchando los primeros discos, que son una
maravilla - incluso he estado tentado de traer al blog el gran álbum Truth,
nada más y nada menos que de 1968 con el gran Rod Stewart a la voz, considerado
uno de los precursores del sonido Heavy Metal- he decidido dejarlo para más
adelante y traer la que fue mi primera adquisición de este genio: Blow
by Blow, editado unos añitos después, en 1975.
Este álbum nada tiene que ver con
esos primeros discos, y es que si algo caracteriza a Jeff Beck es su
versatilidad y su gusto por los sonidos diferentes, de ahí su gran variedad de
álbumes. Aviso a navegantes: este disco es instrumental y está basado en una
fusión de estilos centrados en el jazz y el funk, y ejecutado con grandes dosis
de sensibilidad, delicadeza, ritmo y virtuosismo que no puede dejar igual a
nadie. Y si es así, como decimos en mi tierra, es que “no tienes sangre en las venas”.
Para poneros un poco en
situación, el disco (el sexto de estudio en la carrera de Beck) viene precedido
de la disolución del power trio - al estilo Cream
- llamado Beck, Bogert & Appice
que solo grabó un álbum de estudio (homónimo de 1973) y otro en directo de su
gira nipona (Live in Japan). Ambos son muy recomendables (el primero lo
tengo y es digno de mención en una futura entrada; el segundo está entre mis
objetivos “vinileros” porque es una pasada de directo) pero no consiguieron
atraer la atención deseada.
Jeff Beck se marcha del grupo y
provoca su disolución para realizar este proyecto en solitario, el primer álbum
instrumental del guitarrista. Tras un periodo en el que hace de músico de
sesión para algunos grupos (llega incluso a realizar una audición para los Rolling Stones, en la que se muestran
totalmente incompatibles, lo cual viene a demostrar que Beck estaba ya más
interesado por universos más alejados del Rock) recluta a Max Middleton (teclista ya conocido por Beck de la época de Jeff Beck Group), a George Martin (como productor, conocido como el quinto Beatle por
su trabajo con los de Liverpool) y a los músicos de sesión Phil Chen al bajo y Richard
Bailey a la batería. Completa el combo Jeff
Beck, por supuesto, a la guitarra e incluso al bajo en alguna canción. Pero
para mí una de las piezas más importantes de este álbum, que casi está en la
sombra del mismo, es la presencia de Stevie
Wonder, el componente que le hace tener ese algo diferente y especialmente
sensible.
Pues bien, podemos decir que Blow by Blow rompe con todo lo anterior
y se lanza definitivamente a ese universo más alejado del rock pero que muestra
las posibilidades de otros estilos en apenas 45 minutos.
El álbum comienza con un tema
eminentemente Funk, “You know what I mean”; un tema
compuesto por Beck y Middleton, un comienzo espectacular para mi gusto, aunque
pienso que una canción así puede que eche atrás a más de uno. La verdad es que
este disco conlleva realizar varias escuchas para sacar lo mejor de él, porque
si no, canciones como esta pueden parecer aburridas, pero en cuanto entras en
la onda del álbum te atrapan los ritmos y la guitarra de Beck y te das cuenta de
que es todo lo contrario: un álbum que desprende diversión. A parte de la
guitarra, especial mención merece, sin duda, la batería.
Sin perder tiempo casi entre un
corte y otro comienza “She´s a woman”, una versión del tema
de los Beatles con toques algo caribeños y con unos efectos de guitarra
bastante curiosos usando el Talkbox al principio de la canción. Después la
maestría de Beck hace el resto. A decir verdad la canción no parece la misma
que la original, pero Beck le da su sello y a mi casi que me gusta más que la
de los propios Beatles. No es la primera vez que Beck interpreta esta canción, pues
aparece también en el álbum en directo Maybe
Today (Live At London) de 1974, anterior a este disco.
Continua con “Constipated
Duck”, que mantiene el aire funk pero con influencias más jazzísticas,
ya que es un tema un poco más anárquico. Perfectamente me puedo imaginar una
“jam sesión” con varios guitarristas tocando solos uno tras otro sin parar.
Especial mención merecen las líneas de bajo que mantienen el ritmo frenético
que contagia al resto de instrumentos.
El siguiente tema “AIR
blower” comienza un poco más movidito con bajo a toda pastilla y con un
riff más pegadizo. Los solos van y vienen entre teclados y guitarra, los
efectos del teclado a veces se confunden con los de la guitarra sin saber muy
bien de que instrumento se trata. Genial el cambio de ritmo tras unas notas de
piano, al más puro estilo Jazz, en el minuto 3:25, y desde aquí hasta el final
de la canción, donde ya no te acuerdas de que el principio no se parece en nada
a lo que acaba siendo. De nuevo, sin apenas dar un respiro, con un golpe de
caja y charles empieza el siguiente tema: “Scatterbrain”, un tema de nuevo más enrevesado
y anárquico donde Beck demuestra de nuevo su maestría desde el principio. Una
base rítmica inmejorable, como en todo el álbum: la batería y el bajo se salen.
Especial mención merecen los arreglos orquestales, con violines que quedan de
maravilla, y los pasajes rapidísimos, vertiginosos más bien, que te hacen
pensar en escenas de películas de persecuciones. Y para acabar, de nuevo, nos
sorprende un parón final en el ritmo, con otras notas de guitarra del mejor
Beck rompiéndolo todo. En fin, una pedazo
de pieza para finalizar la primera cara del vinilo.
Para mí ya es difícil de superar
el nivel impuesto, pero la primera canción de la segunda cara es mi preferida
del disco, y en parte la principal culpable de que este vinilo fuera el primero
de mi colección del señor Beck. Se trata del tema "Cause We've Ended as Lovers"
(no os perdáis el enlace que he puesto de esta canción, la bajista, Tal
Winkelfeld, se sale, una maestra a la altura de Jeff Beck, os lo
recomiendo. Aunque la canción original del disco me parece la mejor versión y
es la que más me gusta). La canción está compuesta por Stevie Wonder, que se la dio a Beck para este álbum. Y es a esto a
lo que me refería al principio, la sensibilidad que destila se debe en gran
parte a este gran músico al cual respeto muchísimo y al que, sin embargo, no
conozco profundamente, aunque lo que conozco de él contiene grandes cantidades
de este ingrediente. Esto, unido a la forma en que Beck se deja el alma en cada
nota, hace que esta canción esté entre mis preferidas ya que provoca que me
emocione cada vez que la escucho. La guitarra suena especialmente limpia y Beck
aplica unos matices y unos agudos que te dejan sin habla.
Y tras unas emociones a flor de
piel llega el turno del tributo a Thelonius Monk, el pianista y compositor de
Jazz. De nuevo de la mano del señor Wonder, ya que el
tema “Thelonius” también está
escrito por él. Volvemos al Jazz-Fusión. Participa el propio Stevie Wonder
tocando el clavinete (aunque no se recoge en los créditos) y de nuevo aparece
el Talkbox aplicado por Beck. Una canción que demuestra lo bien que se lo
tuvieron que pasar los músicos, una característica del álbum que viene
sintiéndose desde el principio del mismo, un carácter divertido pero
manteniendo la calidad de las interpretaciones, propias de los músicos del
nivel de este combo.
Casi enlazada a Thelonius
comienza “Freeway Jam”. El nombre lo dice todo, otro divertido tema a
medio camino entre el Jazz y el Funk, quizás más jazzístico en este caso, con
una base rítmica donde destaca la batería con unas líneas de bajo muy sólidas
pero divertidas, y con un riff de guitarra pegadizo a lo largo de toda la
canción que empiezas a tararear después de escuchar el disco. Junto con Scatterbrain, es el tema más rápido,
aunque no llega al ritmo vertiginoso de este. Este tema podría usarse
perfectamente como música de cabecera para un programa de Radio 3 dedicado al
jazz-fusión (de nuevo os recomiendo el enlace que añado, vais a flipar con un
bajo tocado a cuatro manos).
El tema que cierra el álbum, “Diamond
Dust”, es mucho más sobrio que el resto de canciones, salvando “Cause We've Ended as Lovers” que puede ser la “balada del
álbum”. En este caso Beck se despega del aire funky y se adentra en un universo
mucho más cercano al jazz con ciertos tintes progresivos. El uso de arreglos
orquestales vuelve a hacernos pensar que estamos inmersos en un sueño, así como
las líneas de guitarra, que parecen contarte una historia como si de una
película se tratase. Pero esta canción deja tiempo además para los demás instrumentos
que parece tener su momento para cada uno. El tema es la “medicina” para esos
días en los que te apetece adentrarte en tus pensamientos. Perfecto broche
final.
Lo mejor es escuchar el álbum del
tirón por lo que os dejo el enlace con el disco completo.
Lado 1
1. "You Know What I Mean"
3. "Constipated Duck"
4. "A.I.R. Blower"
Lado 2
2. "Thelonius"
4. "Diamond
Dust"
Para quién
quiera ir más allá que no se pierda este concierto: Live at Ronnie Scotts
Espero que lo disfrutéis como lo hago yo. Salud, vinilos y buen fin de semana!!!
Pues si, Beck es uno de los grandes aunque no muy facil de digerir. Yo tengo media docena de discos de este hombre pero mi favorito es The Jeff Beck Group del 72 con el gran Cozy Powell detrás de los tambores.
ResponderEliminarUno de los grandes, muy libre desde el punto de vista creativo, es muy posible que unos discos gusten mas que otros pega a muchos palos y muy bien, The Jeff Beck Group y este son mis favoritos.
ResponderEliminarBuena entrada.
No es que sea muy prolífico, no. Pues yo me quedo con Truth. Un apunte que ayuda a comprender el guitarrista que es Jeff: formo parte de los Yardbirds, con otro par de cracks...
ResponderEliminarEse par de cracks son Jimi Page y eric Clapton no? El Truth es un gran disco pero quería romper una lanza por Blow by Blow
Eliminaryes, los mismos, ya ves que trio. Dos grandes discos ;D
EliminarA mí me ha costado mucho llegar a Beck, lo confieso, y no me vuelve loco, aunque por aquí tengo un par de joyitas también. Truth y BB&A fueron mis acercamientos. Me ha gustado mucho la entrada. Un saludo.
ResponderEliminarPues a mi me pasa como a ti hace un tiempo... Se que es uno de los grandes, pero no me he puesto nunca a escucharlo, creo que va siendo hora de empezar.
ResponderEliminarGran entrada, saludos!