Ir al contenido principal

Journey - Evolution (1979, CBS)



Hace un par de semanas trajo el compañero King el tercer álbum de Journey (Next) y comentaba que no había ninguno de la banda. Me sorprendió, por un lado, y me hizo reflexionar, por otro: más de mil trescientos vinilos y aún hay grupos o solistas famosos de los que no hemos subido nada. Y al buscar qué subir hoy he recordado que yo tengo algún vinilo de la época multiventas de Journey, me he venido arriba y aquí lo comparto con vosotros y vosotras. Más aún porque tiene una característica encantadora, a mi parecer. Es el disco español de Journey; esa costumbre que había de traducir el título de las canciones, los textos y, a veces, hasta los créditos y los títulos. En este vinilo escuchamos las canciones Majestuoso, el single Amando, tocando, apretando o Chica de suerte. Cosas de la época, pero reconozco mi afición por adquirir estas ediciones si caen a buen precio.

El caso es que Journey viajó en cohete desde aquel Next hasta este quinto álbum Evolution: consiguió su mayor éxito hasta el momento despachando tres millones de copias en Estados Unidos y poniendo su primer single en el top 20. Pero este viaje no salió gratis. En este tránsito ayudó, además del dinero de la multinacional, el fichaje definitorio de Steve Perry a la voz y de Roy Thomas Baker a la producción. El álbum intermedio, Infinity, con toneladas de overdubs y efectos, puso el primer ladrillo de su palacio de oro, y para este disco intentaron repetir experiencia. Según el propio Perry, Baker se pasó la mitad del tiempo "dando paseos en su Rolls o de compras" y fue el ingeniero Geoffery Workman, junto con la propia banda, quien se encargó del trabajo sucio. No debía ir desencaminado, pues el señor Workman se quedó de productor para el siguiente Departure. De hecho, en el álbum hay una nota que dice "nadie es tan responsable del sonido de esta grabación como nuestro primer ingeniero Geoffery Workman". Perdieron en el camino al batería Aynsley Dunbar, cansado de la rutinaria puesta en escena de la banda: "crees que el éxito financiero lo es todo, pero no lo es. Ellos querían tocar todo nota por nota exactamente como en el disco. Me aburrí una mierda. Tuve que salir de ahí. Fue la mejor decisión que pude tomar". 

Ficharon al batería Steve Smith (venía de tocar con Montrose) y se metieron a los estudios Cherokee de Los Angeles, con Steve Perry a la voz, Gregg Rolie a los teclados, Neal Schon a las guitarras y los sintetizadores y Ross Valory al bajo. Y parieron su primer superventas. Diez canciones y una intro.


Too late comienza con ese power pop sobreproducido y lleno de matices que escuchamos a lo largo de la discografía de la banda, entre balada y rock rompedor. Una letra sencilla y un excelente solo de guitarra. El single Lovin, touchin, squeezin pone el punto álgido del vinilo, muy pegajoso, con un piano que va marcando la pauta junto al ritmo de batería y bajo, una especie de AOR blues. Perry la compuso en solitario y se luce, la verdad. El mismo Perry y Rolie comparten composición en City of the angels, con un inicio fantástico a capella, un guitarraso de Schon y un meloso desarrollo. Otra cosa no, pero estribillos malos tampoco vas a encontrar. Schon pone su sello en When you're alone (it ain't easy) con un riff fácil de recordar y tararear y un breve pero intenso solo, una de mis favoritas. La cara A se cierra con una balada de cierto tufillo sixties titulada Sweet and simple. Buena evolución de los acordes y bien arreglada, pero nada intensa hasta el espectacular estribillo y ese rollo gospel.


Comienza cañera la cara 2 (ojo, son Journey), en este caso con la ayuda compositiva de Valory, meneando el culo en Lovin' you is easy, la más ¿compleja? del conjunto por los cambios que tiene y las armonías vocales. Vuelve Neil a mostrar su talento; qué pena esas gotas y no un río de locura de seis cuerdas. Just the same way explora el sonido de teclados y guitarras armonizadas en primer plano, rítmico y juguetón, resulta divertido. Do you recall? es, quizá, la mejor interpretación de Perry, no tan pirotécnica como en otros cortes, aunque muy sentida y consistente, y me encanta ese estribillo y la parte central. Daydream cambia el paso con un comienzo ambiental de sintetizadores para evolucionar a un estribillo popero y un pedazo de solo (otro) de Schon. Y el cierre con la (casi) zeppeliana Lady Luck, un buen trabajo de teclados y guitarras también.

En la contraportada avisa el grupo que "un nuevo ciclo comienza" y piden "llévate nuestros discos a tu casa y escúchalos, escríbenos y ven a vernos cuando actuemos en tu ciudad". Además, recuerdan que "aquellos de vosotros que aspiren a ser algo en la música, deberían saber que CBS continúa sola en el campo del desrrollo de nuevos aritstas, y buscando savia joven". Por si te interesa.

La fotografías de Randy Bachman no pueden ser más simples. Eso sí, el bigotazo de Neal Schon y la cara de "melafo" de Steve Perry no tienen precio. El diseño lo realizó Jim Weleh.

Pasad buen fin de semana.















Comentarios

  1. Pues me pongo con él. Me encanta que hayas recogido el testigo. A ver si alguien más se anima. Feliz finde.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es obligado recoger esos testigos siempre que se puede. No habiendo vinilo no habría sido posible. Journey son una banda obligada para los amantes del hard rock melódico, sin estar en mi top. Consiguieron comerse el melón del mercado que otros grupos que andaban ronroneando por allí, como Toto, REO y compañía, estaban abriendo. No su mejor, pero muy apetecible. Un abrazo de nuevo.

      Eliminar
  2. Yo le he acabado cogiendo mucho gusto a eso de las ediciones españolas con todo traducido, por la idiosincrasia de la gente de la época y esa forma de ser tan natural reflejada en las revistas y ediciones de este tipo, el mundo del siglo XX

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es una curiosidad muy de época, desde luego, y aunque algo cutre tienen su encanto. Un saludo.

      Eliminar
  3. Lady Luck es posible que ma versión original sea la de Ted Nugent del '74

    ResponderEliminar
  4. Una cerveza en alto por esas ediciones españolas donde se traduce absolutamente todo, y no siempre de la mejor manera. Yo tengo varias copias de esas, está claro que para muchos serán auténticos destrozos pero a mí también me han llamado siempre la atención. Cuando acabe con el disco de las Runaways me pongo con este, a ver si consigo que me entre un pcoo. Abrazos!!

    ResponderEliminar
  5. Soy un puto seguidor del mainstream: lo siento por el disco que subió el King, pero este con Perry me gusta mucho más. Asin es, me rindo a los superventas, jeje.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Maddening Flames - Six Ways To Sunday (Radiation Records, 1995)

  Hace unos días me encontraba yo como un gorrino en plena charca escuchando el White Bear de los Temperance Movement. El disco agonizaba con ese broche dorado llamado I Hope I'm Not Losing My Mind y decidí (aprender a hacerme yo la maleta, es más sencillo así) que era momento de embarcarme en una de mis listas interminables, capaces de asustar a la de Schindler. Peliculones aparte, empecé a recopilar con enfermiza dedicación un suculento plato cuyos ingredientes tenían en común el síndrome de pertenencia a la cosecha del 95, entre los que estaba esta joyita. Una cosa llevó a la otra y, en fin, aquí estamos. Los Maddening Flames podrían ser catalogados como uno de los secretos mejores guardados de nuestra música, que dirían los entendidos. Yo prefiero referirme a ellos como un grupo de puta madre con la misma dosis de suerte que capacidad comercial. Y eso que los años 90 en mi querida España, esta España mía y esta España nuestra vieron como un buen puñado de grupos ofrecían jugosa...

Charlie - Charlie (Polydor, 1983)

    Hoy os traigo el séptimo hijo del séptimo hijo (más o menos), una preciosa basura melódica “as usual” que, espero, os resulte un descubrimiento tan bueno como lo fue para mí. Hasta hace pocos meses ni siquiera había oído hablar de estos tipos; por casualidad, en una de esas búsquedas random que a veces hago por Deezer, cayó el tema It’s inevitable y le encontré algo, un regustillo AOR ahí al fondo, que me hizo ahondar más. Tras varias canciones, comencé la escucha de álbumes completos. Y a las pocas semanas me había empapado de la discografía variopinta de estos tipos. Y, de manera inevitable, como la canción, bicheando en redes y tiendas por algún vinilo a buen precio. Y aquí está, por fin, en nuestro blog. ¡Que no nos falte de nada! Charlie fue el vehículo creativo del cantante y compositor Terry Thomas, más famoso por su labor como productor y arreglista que por el desempeño en este combo. Thomas, que ya se encargaba de mandar y mucho en el sonido de Charlie, dedic...

Miguel Ríos - El Río (Hispavox, 1968)

  No tengo muchos singles en mi colección, pero este disco ocupa un lugar especial en mi discoteca. Os explico a continuación las razones. Tengo una simpatía especial por Miguel Ríos, aunque no puedo afirmar que sea mi cantante favorito (tengo otras preferencias). Esto puede sonar raro. He seguido su carrera, y disfruto con muchos de sus discos, pero tampoco es que haya sido su fan n° 1 durante toda su carrera. No me gustan por igual todos sus discos, pero es innegable que es cantante excepcional, y una figura histórica del rock en España. Pero, además del respeto que le tengo como profesional, la figura de Miguel Ríos ha sido, por razones personales, decisivo en mi formación musical. La razón es que el “Rock and Ríos” fue mi primer disco (cassette grabado) de música adulta. Pasé de escuchar los discos de “Parchís”, al “Rock and Ríos”. Aquel año del 82, Miguel Ríos arrasó en España, y marcó a varias generaciones con este disco (reseña aquí ), entre ellos a un chaval de 8 años que...

Ten Years After - Ten Years After (Decca, 1967, 2015)

  Cuando por fin consiga ahorrar lo suficiente para comprarme la máquina del tiempo, tengo preparada una lista de sitios y momentos donde pasar, al menos, una semana de mi vida. Y el Swinging Sixties de Londres será uno de ellos: The Kinks, The Who, The Small Faces, Eric Clapton, Jimi Hendrix, The Rolling Stones, Pink Floyd y, claro, el boom sin igual de The Beatles, cotillear los primeros pasos de Deep Purple o las habilidades de un joven Jimmy Page tonteando con un tal Jeff Beck. Y no me perdería los primeros conciertos de estos tipos que hoy os traigo en el Club Marquee del Soho, efervescente ecosistema que rompió los estándares y las barreras entre el blues, el rock y la psicodelia para dar a luz ese hijo bastardo que fue el rock duro. Como banda, Ten Years After nacieron hace casi sesenta años en torno a toda esta movida musical, hijos genuinos de la British Invasion . Oriundos de Nothingham (Manchester), Alvin Lee (guitarrista) conoció a Leo Lyons (bajista) en la adolescenci...

Thin Lizzy – Nightlife (Vertigo, 1974)

Estamos a principios de 1974. En un marco de alcoholismo, crisis nerviosas, insatisfacción artística y una situación personal caótica en el plano sentimental, Eric Bell –guitarrista de Thin Lizzy – ha abandonado la banda y esta es historia, al menos en teoría. Y es que en ese momento, Phil Lynott y Brian Downey no tenían claro si seguir con el grupo o dejarlo estar, pero lo que sí parecía seguro es que no utilizarían más el nombre. No obstante, antes de poner el punto y final al proyecto, la banda tenía que cumplir con sus compromisos contractuales y completar la gira por Irlanda. Para ello, Lynott pidió ayuda a su amigo Gary Moore , que aceptó y no sólo se aprendió el repertorio en un tiempo récord sino que ofreció lo mejor de si mismo sobre el escenario e incluso participó en la grabación de un par de temas. Pero Moore no estaba preparado para formar parte de un grupo bajo el liderazgo de algui...