Ir al contenido principal

EZO – Fire Fire (1989)


Pues sí, amigos del vinilo, además de los famosos Loudness y los menos conocidos Earthshaker –de ambas bandas niponas ya os he hablado en este blog-, también adquirí en su día un vinilo de estos japoneses, aún menos recordados a nivel mayoritario, tanto por su discografía reducida como por la época en la que quisieron lanzarse internacionalmente. Me estoy refiriendo a EZO y en concreto a su segundo álbum, el muy recomendable Fire Fire. Los orígenes del grupo los encontramos a principios de los 80 en su Sapporo natal –de hecho, el nombre de la banda tiene su raíz en un antiguo nombre de la isla de Hokkaidô- cuando bajo el nombre de Flatbacker, la banda formada por Masaki Yamada a las voces, Shoyo Iida a la guitarra, Taro Takahashi al bajo y Hiro Homma a la batería editó algunos álbumes que solo tuvieron repercusión en Japón. Sin embargo, en 1987 desembarcan en los Estados Unidos y gracias a Gene Simmons –que está a punto de crear Simmons Records- consiguen un contrato con Geffen, que está a punto de convertirse en la discográfica del momento por razones harto conocidas. Su primera obra homónima –ya con el nombre de EZO- no es en mi opinión demasiado redonda en composición y producción, pero sinceramente este Fire Fire tiene ya un nivel bastante aceptable. 

Con portada de Michael Levine, producido por Stephen Galfas –manager, productor, ingeniero y otro de los nombres míticos de la industria discográfica moderna- con la ayuda de James Palace y Jody Gray en composición, melodías y arreglos –lo que nos da una idea de la razón por la que la segunda obra de los EZO quedó más redonda que su primer álbum- y grabado en los Atlantic Studios de Nueva York, este Fire Fire contó también con el talento de John Mahoney –reputado teclista, ingeniero y productor que había trabajado con Billy Joel, Roberta Flack, Barbra Streisand y más tarde en remasters de Elvis Presley, Johnny Cash o Led Zeppelin- en la programación de synclavier

El track list era: 

A 
Love junkie 
Night crawler 
Fire fire 
Wild talk 
Burn down the night 

B 
Black moon 
Back to zero 
Cold-blooded 
She’s ridin’ the rhythm 
Streetwalker 
Million miles away 


Sin embargo, pese a que Geffen parecía apostar por ellos y la calidad general de Fire Fire hacía presagiar una prometedora carrera internacional, las típicas diferencias en el seno del grupo –es decir, que no se aguantaban- dio al traste con la banda. Y ya que al principio os he mencionado a Loudness, deciros que la conexión entre los de Osaka y los de Sapporo es bastante estrecha ya que Masaki Yamada reemplazó en Loudness a Mike Vescera cuando dejó EZO y dos años más tarde fue el batería Hiro Homma el que entró en el grupo. 




La selección de canciones que os acompaño incluye la que da título al álbum –un tema que sobrepasa al resto en duración y en el que destaca una batería machacona y un riff repetitivo, además de una bonita melodía y un final épico-, la hardrockera Night crawler y la pegadiza Million miles away, uno de esos temas con los que no se pueden mantener los pies quietos. 

Feliz viernes! 

@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Gene Simmons se cruzó en el camino de tantos grupos y me temo que, no siempre por su culpa, a ninguno acabó bien. Estos EZO los tenía escuchados pero olvidados. Su conexión japonesa les da nueva vida, je, je. La verdad, suenan muy bien.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Lo que intentó con Doro fue patético, lo de House of Lords acabó mal, estos EZO tampoco llegaron a nada, a Silent Rage los destruyó... solo fue positivo para Van Halen y para Black'n Blue (que se lo pregunten a Thayer sino).

      Eliminar
  2. Se nota que le va el rollito nipón. Tomo nota de estos EZO.

    ResponderEliminar
  3. El rollito nipón me va, pero mucho. He estado allí, sueño con regresar algún día (utopía), me van sus películas, sus artistas... y de la misma manera que hay bandas en USA, UK, Alemania, etcétera que son muy buenas, también en Japón hay grupos enormes. Pero -como en todas partes- tampoco es todo bueno. Eso sí, buena parte de la discografía de Loudness, el primero de Earthshaker o este segundo de EZO son muy recomendables ¿no cree?

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Van Halen - For unlawful carnal knowledge (Warner Bros., 1991)

  Como un cochino con un buen charco disfruto debatiendo sobre el bien y el mal de mis bandas favoritas, especialmente cuando en su historial ha habido un hecho diferenciador. ¡Y qué cambio más significativo en una banda de rock que su cantante! ¿David Lee Roth o Sammy Hagar? Al pobre Cherone ni mentarlo, que vaya marrón se comió. En este mismo blog podemos disfrutar de esta división: de los seis discos que editaron Van Halen con Roth a las voces, hay cuatro publicados por nuestro adorado King; con este de hoy, he traído yo dos de la época Hagar. Y no es Mr. Piltrafilla enemigo del pelirrojo, pues de los seis posts sobre su discografía en solitario escritos para nuestro blog, cinco son suyos (el otro, mío). Juzguen ustedes. Eso sí, no se nos puede negar nuestro afán por meter a los hermanos Van Halen y a sus voceras con calzador en esta vinilopedia. Por cerrar esta introducción. Aunque nunca levantaré el pendón de los Van Hagar en una batalla, pues algunos de los discos de Van Roth...

Steelover – Glove me (Pronit, 1984)

Ya estoy aquí de nuevo con otra de mis adquisiciones estivales, este Glove me de los belgas Steelover que me traje concretamente de Cracovia. Y como en el caso del vinilo que os comenté hace quince días, se trata de otra edición polaca licenciada por el sello Mausoleum de una banda belga. Ya es casualidad ¿no os parece?. La banda, formada a principios de los 80, estaba formada por tres amigos de Lieja, el bajista Nick Gardi y los guitarristas Mel Presti y Pat Fréson . Estos se hicieron con los servicios del batería Rudy Lenners , quien había formado parte de Scorpions llegando a grabar dos discos con ellos, y este propuso a Vince Cardillo como vocalista.    Producido por Lenners y el resto de la banda en los Shiva studios de Bruselas, este fue su primer álbum, que les otorgó cierta fama, sobre todo en Polonia. Sin embargo, el proyecto no cuajó y se separaron. Visto y no visto. Pero lo que me lla...

Dominoe – Keep in touch (RCA, 1988)

  Algunas historias merecen ser contadas y esta que hoy voy a contaros de la banda germana Dominoe es una de ellas. Raro que conozcas o recuerdes a estos muchachos hoy en día, pero hace casi cuatro décadas tuvieron sus famosos segundos de fama, justo los que duraba un comercial para televisión en aquella época. Formados en la República Federal Alemana, alrededor de Múnich, editaron a finales de 1987 su primer sencillo de título Here I am . La cancioncilla fue elegida por la marca Renault para promocionar su nuevo Renault 5; ese tipo de melodías se colaban en todas las casas: franceses, suizos y alemanes escucharon la pegajosa canción mientras comían o cenaban. El single trepó hasta el cuarto puesto en las listas alemanas y suizas, donde se mantuvo varios meses. Actuaron en las televisiones, hicieron algunos bolos. Y todo con una sola canción en las tiendas. Aquí os dejo la versión larga del promocional, que no tiene desperdicio. Cuando el álbum salió poco después, tuvo un subidón ...

Helix- No Rest for the Wicked (EMI/Capitol 1983)

  El nombre de Helix lleva persiguiéndome desde la adolescencia más o menos. Ahí estaban en la Heavy Rock o en Metal Hammer , que no es que saliesen entrevistas suyas cada poco, pero sí que se anunciaban sus nuevos discos, y luego en la publicidad de aquellas revistas, venían tiendas de vinilos en los que también aparecían la banda original de Ontario.  Otra publicación, Popular 1 , les empezó a prestar atención cuando se vinieron como teloneros de Kiss en el " Lick it Up Tour ". La primera vez en el Estado Español de los norteamericanos fue despintados y con Helix, y hay que decir por las crónicas escritas entonces que causaron muy buena impresión gracias a sus potentes shows.  Pude verles por primera vez en " Disco Visto ", programa dedicado íntegramente a video clips que se emitió entre el 84 y el 85,  en un espacio dedicado al Heavy Metal pasaron " Rock You ", muy potente tanto visual como musical, era el tema que abría el visceral " Walkin The...

Killer – Shock waves (Klub Płytowy Razem, 1986)

Este es otro de los vinilos que me traje de Polonia, que no es polaco... pero casi. Me explico. Como veis, se trata de Shock waves , editado en 1984 y tercer elepé de la banda belga Killer a la que recuerdo conocer de nombre, pero en la que nunca profundicé. Formada en 1980 por el guitarrista y vocalista Shorty ( Paul Van Camp ) y su amigo el batería Fat Leo ( Leon Van Roosbroeck ), contó con la adición posterior del bajista y vocalista Spooky ( Ivo van Dooren ). Después de editar dos discos, Alfie Falckenbach –publicista de la banda– cumplió el sueño de crear su propio sello discográfico, Mausoleum , y por supuesto, Killer fueron uno de sus primeros fichajes.    Con un line up formado por los mencionados Shorty , Spooky y Double Bear ( Robert Cogen ) –que había substituido a Fat Leo tras su marcha después de editar el primer elepé de la banda–, los Killer entraron e...

Mogul Thrash - Mogul Thrash (RCA, 1971)

  El grupo que hoy traigo por aquí es uno de esos al que se le encuadra gerealmente como dentro del género del Jazz Rock. Siempre he renegado algo de esta denominación “Jazz Rock” que se dio a los primeros grupos que comenzaron a mezclar rock con metales. Esta etiqueta empezó sobre todo con los “Blood, Sweat & Tears” o los “Chicago Transit Authority”. Aunque esto grupos si tenían influencias del Jazz, a mí personalmente me gusta mas llamarlos grupos de “Rock con metales“ (Brass Rock). Mi objetivo es diferenciarlos del “verdadero” Jazz Rock, es decir, el de los grupos de fusión como la Mahavishnu Orchestra, Weather Report, o el acercamiento al Jazz de guitarristas como Jeff Beck o Santana. No olvidemos que, antes incluso que los BS&T o los primeros Chicago, el grupo de Mike Bloomfield, The Electric Flag, ya había incorporado ese sonido de metales en el ámbito del blues rock. Así que, los que tengáis algo de reparo con el Jazz, que no os asuste esta denominación. Musicalmente...