Ir al contenido principal

Rolling Stones - Sticky Fingers (1971 - Rolling Stones Records)



Tras dos años de inactividad, en los que los rumores de separación del grupo se dispararon, apareció “Sticky Fingers”, desde mi punto de vista el álbum esencial y de consolidación de los Rolling Stones. Aunque continuista con el sonido creado en “Let It Bleed”, los Stones añadieron como parte fundamental del mismo la generalización de los riff de guitarra de Richard y de las referencias oscuras en sus letras. El sonido y la actitud que se había alcanzado en este vinilo está en la sección de “como debe ser y sonar una banda de rock moderno” de cualquier manual de rock que se precie, de 1971 en adelante claro. También fue el álbum en el que Mick Taylor estuvo presente desde el principio, el primero en publicarse al amparo del nuevo sello propiedad de la banda: “Rolling Stones Records”, el primero en el que aparecía el logo más famoso y universal del rock obra de John Pasche, entre otros innumerables detalles y curiosidades, parte de los cuales hoy os quiero comentar.


Hace unas semanas, varios amigos de twitter capitaneados por el Wise @frailas, dueño y señor de Zeppelin Rock Sabbath, donde se publicaron los resultados, nos devanábamos los sesos para elegir nuestras cinco carátulas preferidas de la historia del rock. Yo lo tuve claro, la primera no podía ser otra que la carpeta de “Sticky Fingers”.


Para empezar, la doble carpeta fue realizada a partir de un diseño de Andy Warhol. La portada muestra la entrepierna de un ceñido pantalón vaquero al que se le colocó una cremallera real que se podía bajar. La imagen insinúa el abultado paquete del tipo que los lleva puesto, al que tras bajar la cremallera y mirar dentro (dentro del interior de la carpeta) se podía llegar hasta sus calzoncillos y por ende a su paquete. Acojonante, nunca mejor dicho. Como es de esperar, la contraportada muestra el trasero del modelo enfundado en el ceñido jean.



La leyenda dice que fue el propio Mick Jagger quién posó, aunque otra lo atribuye a Joe Dallesandro, uno de los modelo-actores fetiche de Warhol. No obstante, hay más nombres en las diferentes versiones que se consulten sobre este tema.

El detalle de la cremallera produjo algunas quejas ya que podía rayar el vinilo (yo no lo creo si no se aplasta, aunque sí que es verdad que daña la carpeta interior), cuestión que se superó bajando la cremallera a la mitad haciéndola coincidir así con el centro del disco.

Tan genial diseño fue censurada en España y sustituido por una carpeta simple, encargada a John Pasche (el diseñador del logo), en cuya portada aparece una fotografía de Phil Jude alusiva al título literal del disco en castellano: “Dedos Pegajosos”. En la imagen tres dedos de mujer salen de una lata que acaba de ser abierta en la que hay un líquido pringoso (melaza). Símil erróneo a todas luces ya que el título original del disco alude a la masturbación. En la contraportada aparece una fotografía coloreada de la banda realizada por Warhol, que en la versión original forma parte de una de las caras de la funda de papel donde se guarda el disco y en la que aparecen también el logo y los créditos. Por cierto, en la esquina superior derecha de la hoja que acompaña la edición española, que por lo menos también contiene el logo de la banda, aparece una curiosa advertencia del productor Jimmy Miller que no aparece en la edición norteamericana que es la que poseemos, y que en resumen viene a decir que si no escuchas bien el disco sube el volumen, curioso.




Y no sólo la portada fue la única mutilación en nuestro país de esta obra de arte. También lo fue el tema “Sister Morphine (Hermana Morfina)”. La polémica letra de Marianne Faithfull, ex novia de Jagger, narra la agonía de un hombre hospitalizado por un accidente de coche (presumiblemente a causa de una sobredosis) que reclama su dosis de morfina para aliviar el dolor. Al respecto hay que comentar que esta misma canción, pero grabada por la propia Marianne, fue también censurada unos meses antes Reino Unido, incomprensiblemente no así el tema de los Stones. En el vinilo de la edición española, esta canción fue sustituida por una versión de “Let It Rock” de Chuck Berry, grabada en directo en 13 de marzo en Leeds, que iba en la cara B de la edición norteamericana del primer single de promoción del disco con “Brown Sugar” en la cara A. Al ser un tema en directo y para superar la estructura del disco, a diferencia de este tema grabado en estudio, se suprimieron los treinta primeros segundos del tema en el que se escucha el típico sonido ambiente en directo. Así, la tercera pista de la cara B del vinilo aparece en blanco (con surcos) y en la etiqueta del disco un tercer tema denominado “…” con una duración de 30 segundos. Alucinante.


Todo ello ha convertido a esta edición en una pieza única, ya que no fue censurado en ningún otro país, objetivo de coleccionistas nacionales como internacionales. Al respecto os recomiendo la lectura del libro “Veneno en dosis camufladas. La censura en los discos de pop-rock durante el franquismo” al que ya le dedicamos una entrada en esta casa.

Y como uno tiene alma, instinto e inquietud coleccionista, de objetos y cosas normales y de otras no tanto, no podía falta en nuestra colección otra pieza aunque menos cotizada que las anteriores. Se trata de una segunda edición española del año 1979 realizada por Emi-Odeon. Se presenta en una carpeta simple con imágenes, impresas en una calidad pésima, de portada y contraportada iguales que el original sin censurar, pero sin la cremallera verdadera, en la que se vuelve a recoge el censurado “Sister Morphine”.





Buen finde. Sed felices.

Temas

Cara A:
1. «Brown Sugar»
2. «Sway»
3. «Wild Horses»
4. «Can't You Hear Me Knocking»
5. «You Gotta Move»

Cara B:
6. «Bitch»
7. «I Got the Blues»
8. «Sister Morphine» (En 1ª edición España: Let It Rock – 2: 32)
9. «Dead Flowers»
10. «Moonlight Mile»






Comentarios

  1. Buenísima y completa entrada, caballero. Y trío de ases vinílicos en esa pequeña pero impresionante colección dedicada a estos mitos visientes de la historia del ROCK.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me costó conseguir, aun precio razonable, el disco censurado pero al final lo pillé. Por cierto es curioso que cuando lo pincho siempre pongo la edición americana.

      Eliminar
  2. Vivientes, no visientes, claro :D

    ResponderEliminar
  3. Excelente comentario y análisis sobre el artwork de este disco pero de la música qué? jajajaj todos la conocemos de sobra y esos temas demuestran que el rock está muy vivo después de más de 40 años, ¿alguien puede resistirse a los riffs de de Brown Sugar, Bitch ... ? Eso es alta escuela.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jaja por supuesto que lo mejor está en el interior, en el vinilo. Cualquiera de los temas son palabras mayores. Pero hoy quería centrarme en el resto de detalles que hacen más grande si cabaeste disco, a diferencia del artwork de los cds acuales que no nos llevan a ningún sitio .... Hoy me salió la vena coleccionista e investigadora ;D

      Eliminar
  4. Pedazo entrada, jefe, un aluvión de aplausos. Es, junto con Let it bleed, mi favorito de los Rolling. Y la colección... de envidia cochina. Genial.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. jaja El Let it bleed también son palabras mayores. Costó encontrar el censurado en buen estado y a buen precio, pero supe esperar. Saludos.

      Eliminar
  5. Sí señor, entrada fetichista/vinílica donde las haya, con las tres ediciones de este gran disco que es un lujazo.

    Si se me permite, ojalá hubiese aparecido esta entrada antes. Te cuento.
    Cada año, por las fiestas de Navidad, me voy con mi hijo pequeño, un rockero de pro a Els Encants Vells de Barcelona (Encantes Viejos o lo que sería el Rastro en Madrid.
    Y siempre nos pasamos por una tienda que hay allí que tienen vinilos y discos de pizarra a trastear.
    Justo este viernes me encontré con este disco en una vitrina (el vendedor muy hábil ya sabe lo que hace), y justamente el vinilo de la cremallera.
    Mi fallo fue preguntar por el disco justo cuando entré. Debería haberme hecho el loco y pasearme un rato y después preguntar como despistado, pero es que parecía que me estaba llamando el dichoso vinilo.
    Pues nada, me pedía 20€. Miré por el móvil por internet y vi que por ese precio puedo encontrar también alguno (poco más o menos).
    Tal vez si hubiese visto esta entrada antes y hecho algunas consultas igual me lo hubiese llevado. Eso sí, debería haber sacado de la vitrina el disco a ver el estado en el que estaba. La carpeta parecía algo tocada.

    En fin, un gran disco de los Stones, a mi también me gustan más los anteriores, donde Brian era más participativo. Este, como bien dices, fue el inicio de una nueva época en la banda.

    PD: Por favor, NO me digas que me tenía que haber llevado el vinilo, que me das un disgusto de muerte. ;-)

    ¡Feliz Año a todos!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Por cierto, yo tengo una edición rarísima del Sticky Finger con cremallera, pero en Cd.
      Ya lo sé, no es lo mismo, pero menos da una piedra. ;-)

      Eliminar
    2. Si te sirve de consuelo hay algunas ediciones que llevan la cremallera pero no son del 71 y no se puede bajar. Eso sí, lo tenías que haber abierto. Se vendieron muchos por lo que aún se pueden encontrar a buen precio, eso sí mira que el cinturón, la cremallera, el interior de la carpeta y el vinilo estén más o menos bien....

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Maddening Flames - Six Ways To Sunday (Radiation Records, 1995)

  Hace unos días me encontraba yo como un gorrino en plena charca escuchando el White Bear de los Temperance Movement. El disco agonizaba con ese broche dorado llamado I Hope I'm Not Losing My Mind y decidí (aprender a hacerme yo la maleta, es más sencillo así) que era momento de embarcarme en una de mis listas interminables, capaces de asustar a la de Schindler. Peliculones aparte, empecé a recopilar con enfermiza dedicación un suculento plato cuyos ingredientes tenían en común el síndrome de pertenencia a la cosecha del 95, entre los que estaba esta joyita. Una cosa llevó a la otra y, en fin, aquí estamos. Los Maddening Flames podrían ser catalogados como uno de los secretos mejores guardados de nuestra música, que dirían los entendidos. Yo prefiero referirme a ellos como un grupo de puta madre con la misma dosis de suerte que capacidad comercial. Y eso que los años 90 en mi querida España, esta España mía y esta España nuestra vieron como un buen puñado de grupos ofrecían jugosa...

Charlie - Charlie (Polydor, 1983)

    Hoy os traigo el séptimo hijo del séptimo hijo (más o menos), una preciosa basura melódica “as usual” que, espero, os resulte un descubrimiento tan bueno como lo fue para mí. Hasta hace pocos meses ni siquiera había oído hablar de estos tipos; por casualidad, en una de esas búsquedas random que a veces hago por Deezer, cayó el tema It’s inevitable y le encontré algo, un regustillo AOR ahí al fondo, que me hizo ahondar más. Tras varias canciones, comencé la escucha de álbumes completos. Y a las pocas semanas me había empapado de la discografía variopinta de estos tipos. Y, de manera inevitable, como la canción, bicheando en redes y tiendas por algún vinilo a buen precio. Y aquí está, por fin, en nuestro blog. ¡Que no nos falte de nada! Charlie fue el vehículo creativo del cantante y compositor Terry Thomas, más famoso por su labor como productor y arreglista que por el desempeño en este combo. Thomas, que ya se encargaba de mandar y mucho en el sonido de Charlie, dedic...

Miguel Ríos - El Río (Hispavox, 1968)

  No tengo muchos singles en mi colección, pero este disco ocupa un lugar especial en mi discoteca. Os explico a continuación las razones. Tengo una simpatía especial por Miguel Ríos, aunque no puedo afirmar que sea mi cantante favorito (tengo otras preferencias). Esto puede sonar raro. He seguido su carrera, y disfruto con muchos de sus discos, pero tampoco es que haya sido su fan n° 1 durante toda su carrera. No me gustan por igual todos sus discos, pero es innegable que es cantante excepcional, y una figura histórica del rock en España. Pero, además del respeto que le tengo como profesional, la figura de Miguel Ríos ha sido, por razones personales, decisivo en mi formación musical. La razón es que el “Rock and Ríos” fue mi primer disco (cassette grabado) de música adulta. Pasé de escuchar los discos de “Parchís”, al “Rock and Ríos”. Aquel año del 82, Miguel Ríos arrasó en España, y marcó a varias generaciones con este disco (reseña aquí ), entre ellos a un chaval de 8 años que...

Ten Years After - Ten Years After (Decca, 1967, 2015)

  Cuando por fin consiga ahorrar lo suficiente para comprarme la máquina del tiempo, tengo preparada una lista de sitios y momentos donde pasar, al menos, una semana de mi vida. Y el Swinging Sixties de Londres será uno de ellos: The Kinks, The Who, The Small Faces, Eric Clapton, Jimi Hendrix, The Rolling Stones, Pink Floyd y, claro, el boom sin igual de The Beatles, cotillear los primeros pasos de Deep Purple o las habilidades de un joven Jimmy Page tonteando con un tal Jeff Beck. Y no me perdería los primeros conciertos de estos tipos que hoy os traigo en el Club Marquee del Soho, efervescente ecosistema que rompió los estándares y las barreras entre el blues, el rock y la psicodelia para dar a luz ese hijo bastardo que fue el rock duro. Como banda, Ten Years After nacieron hace casi sesenta años en torno a toda esta movida musical, hijos genuinos de la British Invasion . Oriundos de Nothingham (Manchester), Alvin Lee (guitarrista) conoció a Leo Lyons (bajista) en la adolescenci...

Thin Lizzy – Nightlife (Vertigo, 1974)

Estamos a principios de 1974. En un marco de alcoholismo, crisis nerviosas, insatisfacción artística y una situación personal caótica en el plano sentimental, Eric Bell –guitarrista de Thin Lizzy – ha abandonado la banda y esta es historia, al menos en teoría. Y es que en ese momento, Phil Lynott y Brian Downey no tenían claro si seguir con el grupo o dejarlo estar, pero lo que sí parecía seguro es que no utilizarían más el nombre. No obstante, antes de poner el punto y final al proyecto, la banda tenía que cumplir con sus compromisos contractuales y completar la gira por Irlanda. Para ello, Lynott pidió ayuda a su amigo Gary Moore , que aceptó y no sólo se aprendió el repertorio en un tiempo récord sino que ofreció lo mejor de si mismo sobre el escenario e incluso participó en la grabación de un par de temas. Pero Moore no estaba preparado para formar parte de un grupo bajo el liderazgo de algui...