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Mostrando las entradas etiquetadas como Heavy Metal

Steeler – Strike Back (Steamhammer-1986)

No hace mucho fue noticia que el estrellado Dabiz Muñoz había situado en no sé qué lugar de Madrid unos food trucks en los que vendía dos hamburguesas de autor por 15,50 euros. Una era una doble cheeseburger con Gouda, noodles Yakisoba cremosos de pimientas del mundo, miso y périgourdine de trufas negras. La otra, era una doble cheeseburger de Cheddar, mayonesa de chipotles, salsa chiflar y lámina de arroz inflado. La verdad es que se me hace la boca agua tan solo con escribir estas líneas. Sin embargo, lo que fue noticia no era que Muñoz vendiese hamburguesas sino su precio. Eran caras, decían. Sin embargo, todo es relativo.    En mi reciente estancia en Basel, por citar unos ejemplos, una vulgar Chilli Cheeseburger de Burger King con patatas y Coca-cola me costó 17 euros, un pincho de carne –por muy sabroso que fuese, que lo era– me costó 19 eur y por un mojito en la Stein

Accept - I’m a rebel (Reflektor Z-1980)

Pues sí, con esta serán siete las entradas dedicadas a la banda Accept y cuatro de ellas van firmadas por un servidor. ¿Se nota que me gustan estos alemanes, no? Bueno, al menos hasta la salida de Udo Dirkschneider . Los descubrí el verano del 84, con su fabuloso Balls to the wall . Al año siguiente cayó el no menos imprescindible Metal heart y de ahí pasé a hacerme con el Restless and wild –con la icónica Fast as a shark –, el Breaker con su impactante portada, el estupendo Russian roulette o su debut, con esa llamativa y elegante portada a lo Helmut Newton . Hasta el Eat the heat me compré, aunque no sea mi disco preferido de la banda precisamente. Y supongo que fue por esa época cuando también me hice con el I’m a rebel que hoy os comento, más que nada por no tener un agujero en la colección. Así se explica que mi ejemplar sea una edición de 1987 hecha en Coslada para Discos Victoria S.A.     Grabado e

Scorpions – Blackout (Harvest-1982)

Antes de comenzar os diré que no sé ya si escribo para mi o para los dos o tres gatos que caemos habitualmente en esta cubeta de vinilos. Y es que de un tiempo a esta parte estoy viendo que el compromiso por este blog está decayendo. A ver, que a uno también le cuesta escribir sobre sus discos y tal. Por eso convertí mi colaboración semanal en una quincenal. No me daba la vida para escuchar, analizar y escribir cada viernes sobre uno de mis vinilos. Sin embargo –tampoco cuesta tanto hacerlo– tengo por costumbre escuchar los discos sobre los que escribís los demás, todos –incluso el de C Tangana me lo tragué enterito– y comentar vuestras entradas. Por respeto. Porque sé que no resulta fácil hacer una reseña con algo más que un copia y pega líneas de la Wikipedia . Por eso, cuando veo que hay quien ya no entra nunca en el blog o no comenta nunca... incluso hay quien ni responde a los comentarios a sus propias entradas, que en algunos ca

Alice Cooper – Raise your fist and yell (MCA records – 1987)

Como puede leerse en entradas como esta de aquí , soy un enamorado de la época setentera de Alice Cooper . También me encantan álbumes de los 90 como Hey stoopid o The last temptation –incluso me llegó a gustar Trash , el más comercial de sus trabajos previos– aunque no puedo hablaros de ellos aquí porque los tengo en cedé, cosas del momento que nos tocó vivir. Pero si hay una época que adoro es la que Alice pasó junto al estupendo compositor y guitarrista Kane Roberts –con sus guitarras ametralladora y esa pinta a lo Rambo con esteroides–, de quien también os comenté aquí su fantástico primer disco en solitario. Pues bien, después de abandonar la música a principios de los 80 para restablecerse de su alcoholismo y sus graves problemas de hígado, al iniciarse la segunda mitad de la década Alice comenzó a trabajar dispuesto a relanzar su carrera musical que alternó con algunas incursiones en el mundo del séptimo arte. Así, entre 1986 y 1987 grabó los metál

Quiet Riot- Condition Critical (CBS-1984)

Amigos y amigas, vayamos por partes. Los dos primeros álbumes de Quiet Riot me parecen estupendos, pero –aún no había llegado a las tiendas The Randy Rhoads Years ni internet– la mayoría de mortales fuera de Japón no teníamos ni idea de su existencia cuando se produjo uno de los mayores pelotazos de la historia del heavy metal: la publicación de Metal Health .  La enorme popularidad de ese álbum convirtió a la banda en uno de los mayores exponentes de one hit wonder group del género, víctimas de su propio éxito que por culpa del carácter volátil de su líder y vocalista propició cambios diversos de formación y de dirección musical que los apartaron del olimpo metalero, aunque siempre conservaron –bajo la alargada y eterna sombra del mencionado Metal Health – el reconocimiento de sus fans más acérrimos.    Así las cosas, regresamos a la resaca de la salida de dicho disco, los conciertos de presentación

Warlock - Burning the witches (Mausoleum records – 1984)

Amigos del vinilo, metidos ya en plena canícula –cómo me gusta utilizar palabras raras y eso que soy de ciencias– voy a dedicar mi entrada de hoy al debut del grupo de Doro Pesch . Porque sí, aunque evidentemente Warlock nació como banda y la la diminuta vocalista de Düsseldorf era principalmente su frontwoman , lo cierto es que su carisma y su fuerza –además de su continuidad en el tiempo al frente del proyecto– la acabaron convirtiendo su parte más visible e identificable. De hecho, Doro ha construido su carrera con esos cimientos y el recuerdo de sus compañeros se ha ido difuminando entre la bruma del tiempo. Total, que tras pasar por numerosas bandas underground , el batería Michael Eurich , el bajista Frank Rittel , los guitarristas Peter Szigeti y Rudy Graf y la pequeña Dorothee –que por entonces contaba 18 años– fundan oficialmente Warlock y consiguen su primer contrato con el sello Mausoleum , que pone en las tiendas este sem

WASP – Inside the electric circus (Capitol records-1986)

Ladies and gentlemen, boys and girls and wild ones of all ages ... vamos allá. Tal como ya os dije en mi anterior entrada, voy a ir tirando de colección y a traeros vinilos de los que aún no haya hablado nadie, aunque en el fondo no tengan ninguna característica que los haga especiales, más allá que mi amor por ellos y las innumerables ocasiones en las que la aguja de los tocadiscos que he tenido a lo largo de los años ha discurrido por sus dos surcos. Total, que este viernes les toca a los WASP . Y si hace ya unos añitos os hablé aquí de The headless children , hoy os presentaré a su anterior álbum de estudio, el controvertido Inside the electric circus . Controvertido por su portada, por el giro comercial de su sonido y por los cambios de formación, todo por obra y gracia del señor Steven E. Duren , más conocido como Blackie Lawless , quien además ha declarado alguna vez que este es el peor disco de WASP , algo en lo que no