Ir al contenido principal

Bow Wow – Warning from stardust (Heavy Metal Worlwide-1983)


Pues ya estamos aquí un nuevo viernes y esta vez con los Bow Wow, otro de esos grupos de los que solo hablo yo. Antes de nada, dejadme deciros que este álbum es original del 82 pero resulta que yo tengo la edición británica del año siguiente, por eso he fechado el disco en el 83. Desde un punto de vista musical, poco importa. Eso sí, esta versión no tiene las letras y los créditos en la funda interior. 

Mi toma de contacto con este disco fue precisamente ese 1983, cuando se despertaba en mi con virulencia el interés por la música –por cierto, vaya pedazo de año el 83 en lo que a hard rock y heavy metal se refiere– y compraba mis primeras publicaciones para estar medianamente informado. Recuerdo haber visto una reseña de este Warning from stardust en un Popular1 y haberme sorprendido porque en Japón pudiesen editarse discos de ese estilo. Y poca broma, amigos, porque estamos ante uno de las obras más importantes de la historia del hard rock nipón, un álbum de transición entre lo que fueron Bow Wow y su renacimiento como Vow Wow a partir precisamente del disco que me ocupa esta semana. 


Total, que de su primera etapa ya hablé aquí sobre su Hard Dog y de su segunda ya di buena cuenta de su discografía aquí y también aquí, pero hoy toca que dedique mis comentarios a este Warning from stardust, el primero –como os digo– con el que tuve conocimiento de la existencia del grupo formado por Kyoji Yamamoto a la guitarra y voz principal, Mitsuhiro Saito a la guitarra y voces, Kenji Sano al bajo y voces y Toshihiro Niimi a la batería y coros. 

Producido por la banda en los Matrix studios y con portada de Atsushi Yoshioka, el extenso track list fue: 

A 
You’re mine 
Jets 
Clean machine 
Can’t get back to you 
Heels of the wind 
Poor man’s eden 

B 
20th Century child 
Abnormal weather 
Welcome to the monster city 
Break out the trick 
Warning from stardust 

El disco comienza muy directo con You’re mine, un heavy rock cañero, espídico diría incluso, que precede a una Jets hard rockera en la que Kyoji Yamamoto se luce a la guitarra pero no a las voces. Estilísticamente ya presagiaba el cambio de dirección de la banda que cristalizaría en su siguiente lanzamiento, ya con el estupendo Genki Hitomi como cantante. Clean machine es otro estupendo hard rock con unas buenas guitarras y Can’t get back to you sigue el mismo camino hacia el hard grandilocuente con coros, algo que ya queda del todo claro con Heels of the wind, un medio tiempo que adolece de unas voces y una producción algo simples. Y la cara finaliza con algo más de energía con una Poor man’s eden que no tiene nada destacable si no es que suena a hard nipón por los cuatro costados. Porque, no sé si estaréis de acuerdo conmigo pero los primeros Loudness, los Earthshaker, los E.Z.O. o estos Bow Wow... todos sonaban igual. No sé si eran las guitarras Yamaha, una manera propia de producir o la forma de pronunciar de los japoneses, pero el hard japonés de la época suena de una manera distintiva o al menos así me lo parece a mi. En fin, no me hagáis mucho caso. 


La cara B se inicia enérgicamente con 20th Century child, otro tema en el que ya queda claro del todo que en la banda no queda ni rastro del rock setentero que podía encontrarse en sus inicios. Abnormal weather –donde canta Saito– es un tema sencillito que tampoco destaca demasiado y que está seguido por Welcome to the monster city –aquí canta Sano–, con mucho más ritmo y unas guitarras más trabajadas. De nuevo, lo malo es la voz. En Break out the trick volvemos a encontrar a las labores vocales a Mitsuhiro Saito –en su última grabación con la banda antes del cambio de nombre– y finaliza el álbum con el temazo Warning from stardust, un hard rock resultón, bien ejecutado y perfecto colofón a esta etapa. 






En definitiva, que si no me hicísteis ni puñetero caso en mi anterior entrada sobre la banda, ahora estáis ante una estupenda ocasión para entrar en contacto con su sonido. Y si sois más de sonidos ochenteros al uso, también os sirve para entender de donde venían los Vow Wow y escuchar al gran Kyoji Yamamoto, que no tiene nada que envidiar al dios Akira Takasaki

¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. No conocía a este grupo y me temo que va a ser demasiado "heavy" para mi, pero una escucha no mata a nadie, así que te voy a hacer caso y voy a escuchar este. Aparte, el diseño de la etiqueta me parece brutal, con lo sosainas que son muchas veces... ¡Feliz fin de semana!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En realidad no es heavy, es más hard rock. Pero resulta más melódica ochentera su etapa como Vow Wow, con el cambio sutil de nombre. Tienes entradas y reseñas para escoger en este mismo blog. A ver si consigo que te gusten, aunque sea un poquito. Saludos.

      Eliminar
  2. Wow, si tu intención era doctorarte en hard rock internacional con este plástico, creo que has ganado unos cuantos puntazos. Me suena haber leído la otra entrada que les dedicaste, creo que en este sitio todos tenemos algunas bandas de las que solo hablamos nosotros, pero ahí está la magia, en compartirlo. Buen findee!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias, pero cuanto más años pasan y más bandas conozco, más me doy cuenta de que el doctorado me queda francamente lejos jajajaja Eso sí, mi querencia por lo nipón me ha hecho querer profundizar en bandas como esta, por otra parte de lo más interesante y reivindicable. Espero que le dediques una escucha al menos a este elepé, seguro que algo te gustará. Buen finde.

      Eliminar
  3. Pues creo que has creado la etiqueta New Wave of Japan Heavy Metal (NWOJM) en este artículo. Al fin y al cabo, eres nuestro especialista en el país nipón y en sus bandas metaleras. Es cierto que a veces las bandas japonesas sonaban igual y quizá por eso tardé en prestarles atención. Una buena propuesta para terminar el día. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta eso de la NWOJHM. Soy como el cuñao pesado de "escucha a los Vow Wow, que son la caña" pero no me importa. Dadle a estos tipos una -o dos- oportunidades. Otro abrazo de vuelta.

      Eliminar
  4. Japón. Mira está lejos, Japón.
    No conocía nada sobre nada de lo que has escrito. Lo interiorizo para ir luego de cultureta musical con los conocidos, jeje. No me llenan, pero no suenan mal. Me los pondré de vez en cuando. Al menos no es J-Pop. Gran entrada

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ponte el Cyclone o el III de su etapa como Vow Wow que quizás te "llenen" más, aunque este disco es estupendo. Gracias por lo de "Gran entrada", me llena de horgullo y satisfazión. ;P

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Rainbow – Down to earth (Polydor-1979)

Sin vinilos raros o exóticos para comentaros esta semana, echo mano de mi fondo de armario vinílico y como en mi anterior visita, dedico la reseña de hoy a otra de esas obras incontestables de finales del siglo XX de las que nadie quiere hablar porque todo cuanto pueda decirse, sobra o es redundante. Pero para eso estoy yo, para redundar en lo obvio. Y para dar a la reseña un enfoque diferente, más que del álbum –que también–, os hablaré de su vocalista. Total, que después de saber de él en Alcatrazz [ aquí ] o MSG [ aquí ], hoy os traigo de nuevo al incombustible Graham Bonnet para presentaros otro enorme disco en el que participó aportando su personalísimo estilo. Poneos cómodos.    Érase que se era el británico Graham Bonnet , un adolescente nacido en una localidad costera del condado de Lincolnshire que se ganaba unas libras cantando jingles para la radio. Su primo Trevor había emigrado con sus padres a Australi...

Helloween - Pink bubbles go ape (1991, EMI)

  Aprovecho la reciente visita a nuestro país de la banda multigermánica Helloween para compartir aquí contigo, lector con orejas inquietas, otro de esos discos que me gusta catalogar con la etiqueta de “síndrome del disco de después”: aquella obra musical editada tras un pelotazo, éxito o gloria en forma de DISCARRAL y que palidece a su sombra independientemente de su calidad o éxito. Discos que han sido “un fracaso” porque vendieron la mitad que su predecesor o porque, simplemente, no respondió a las expectativas. En este contexto, queda claro que casi cualquier cosa que nuestros protagonistas hubieran editado después de “Keeper of the seven keys II” (más aún si lo consideramos un solo disco con su primera parte) iba a ser valorado con el rasero de una(s) obra(s) catalogadas aún hoy como Obras Maestras del Discarralismo (OMD para los entendidos). Si añadimos que las acciones (o inacciones) de algunos de los protagonistas de la banda y alrededores contribuyeron a dificultar la pr...

Extremoduro - Yo, minoría absoluta (DRO, 2002/2014)

  Cuando una banda de rock alcanza el éxito tiende a repetir la fórmula o a dejarse domar por los sonidos que le imponga la discográfica. En el caso de Roberto Iniesta, el Robe, alma, cerebro, venas y corazón de Extremoduro, el éxito le pilló preparado. "La masa es imbécil. Si sales en la tele puedes hacer un libro, un disco o lo que se te ponga en la punta del nabo. A mí eso no me interesa ni vender más discos ni que me conozca más gente. Como estoy ahora estoy bien, pudiendo organizar una gira y no tener que decir «no puedo dejar de tocar en noviembre porque no tengo un puto gil», así me vale". Y continuó haciendo lo que le dio la gana después del éxito de Agila (1996): editaron el directo Iros todos a tomar por culo (1998) y el controvertido Canciones prohibidas (1999), donde daban rienda suelta a su creatividad, con éxito y críticas reguleras.  Y se tomaron un descanso. "Creo que cuando siguen haciendo cosas buenas y nuevas los grupos funcionan, aunque estén dos o...

Megadeth – Peace sells... but who’s buying? (Capitol records-1986) [Resubido]

Hay álbumes que se resisten a aparecer por estos pagos porque son obras tan incontestables y sobre las que se ha dicho y escrito tanto que parece que sobra regresar a ellas. Pero hoy me siento en la necesidad de que eso no me afecte y he venido a expresar obviedades. Creo que no miento si os digo que descubrí a los Megadeth con el So far, so good... so what! [ aquí ] y es un disco que adoro, como otros de la banda. Sin embargo, creo que es en este Peace sells... but who’s buying? en el que se sientan las bases de la carrera de Dave Mustaine y sus Megadeth . Y sí, desde un punto de vista comercial o de calidad compositiva o de sonido, quizás otros álbumes están por encima... pero la importancia de esta obra es capital (sí, yo también utilizo mucho los tres puntos), desde su icónica portada hasta su última nota. Por eso, aunque Omar Sandoval ya comentó [ aquí ] hace más de una década este disco desde una apro...

Mötley Crüe - Too Fast For Love (Leathur Records,1981)

  Mötley Crüe en los días en los que grabaron " Too Fast For Love " vivían como auténticos vagabundos, de casa en casa de quien tuviese las pocas luces de dejarles entrar, lugares abandonados, furgonetas cutres y un sinfín de cuchitriles a cual peor donde los cuatro solían dejarse caer totalmente colgados de caballo.  No era algo exclusivo de ellos, así coexistían muchas de las bandas de la ciudad de los Angeles justo cuando entraron a grabar su debut en Octubre de 1981. La cosa fue muy rápido, en cinco días ventilaron las canciones en una vieja consola API de 24 pistas con Michael Wagener de ingeniero de sonido, el alemán venía directamente de terminar con Accept su tercer disco en estudio " Breaker" .  La grabación se la costeo el propio manager de la banda, y les costó unos cinco mil dólares. Vince, Nikki, Mick y Tommy no tenían casi ni para comprar hamburguesas, pero se las arreglaron para prensar inicialmente 900 copias de Too Fast For Love y venderlas con ...

Asteroid B-612 - "Roads, Stars" (2025)

…guitarras distorsionadas, más sutiles y cromáticas creando un paisaje más amable que el poderoso y furibundo bramido de antaño… Por  Jorge García . Cuatro discos como cuatro soles en la década de los noventa, cuatro toques de queda indispensables para aquellos que gustan del rock de fuerte pegada con ascendentes de Detroit y de su Australia natal. Un cuarto de siglo de silencio discográfico, y ahora podemos  decir con pruebas físicas y sonoras en la mano, que  Asteroid B-612   ha vuelto.   Para este retorno, que según palabras de la propia banda  ha nacido del simple deseo de subirse a un escenario con viejos amigos , publican un nuevo álbum titulado  "Roads, Stars"  que ha sido grabado en Australia y España durante el año 2024 y que ha mezclado  Pepe Gomar  y  Mike Mariconda . Por supesto  Johnny Spittless  en la guitarra y el vocalista  Grant McIver  continuan capitaneando la nave junto al batería  Ben Fo...