Si hace unos meses os hablaba de un recopilatorio de Led Zeppelin –tres vinilos nada más y nada menos– y admitía que se trataba de una entrada no de relleno pero sí de vagancia y gandulería, hoy hago lo propio con los Deep Purple –mi ingreso hospitalario de hace unas semanas me trastocó un poco el calendario– y este disco de sus mejores temazos titulado Deepest Purple y subtitulado The very best of Deep Purple . En esta ocasión sólo nos encontramos con un humilde vinilo y una funda simple que nada tiene que ver con la edición cuidada de los Zeppelin , pero lo que aquí hay es cremita, amigos. Porque, si Encarnita se preguntaba aquello de “¿A quién no le va a gustar un baptisterio romano del siglo primero?” –cada vez dudo más que los jóvenes lean este blog, así que la parroquia de asiduos viejunos supongo que pillarán la referencia–, yo me siento libre para parafrasearla y preguntarme de igual forma a quién no le