A veces los discos llegan a ti de la manera más inesperada. Conseguí
este vinilo de mis adorados R.E.M. hace más de una década. Paseaba por una de
las calles del barrio de Sants en Barcelona, tal vez sería la calle Vallespir.
No lo recuerdo bien. Pasé por delante de una tienda que parecía ser un
anticuario, eso siendo benevolente, aunque el término trapero tampoco
desentonaría. El caso es que en la misma puerta, apilotonados en una caja de
naranjas, había diversos discos. Hasta ahí, nada nuevo. En anticuarios, tiendas
de viejo o cualquiera de las múltiples tiendas de segunda mano que proliferan
últimamente, es sencillo encontrar LPs amontonados de cualquier manera. El
problema es que habitualmente hay mucha basura (lo cual da una muestra de qué
clase de música se escucha por estos lares) y, en general, en unos estados de
conservación pésimos.
Yo mismo he comprado mucho vinilo de segunda mano. De hecho, la
mayoría del vinilo que compro es de segunda mano. Me gusta esa sensación de
tener un objeto antiguo. Tal vez romanticismo, tal vez tontería. Qué sé yo.
Pero amigos, intento filtrar. La carpeta puede tener polvo, ya la limpiaré,
pero debe estar en un estado decente. Y el plástico, claro, tiene que estar digno.
Está claro que algunas veces es difícil apreciar el estado del disco a simple
vista, pero en otras ocasiones, se tratan de vender vinilos con unos rayajos
que dan vergüenza. Y en un cuchitril de trastos de segunda mano, pase, pero en
una feria de discos, eso es lamentable.
Pues bien, en aquella tienducha de la calle Vallespir había una copia
del “Green” de R.E.M. en un perfecto estado de conservación, plástico y
portada, por unos miserables tres euros. El mismo cartón que alojaba el disco
estaba casi intacto. Pocos discos de segunda mano he encontrado así. Y del LP
en sí, qué puedo decir. Una maravilla.
“Green” es el sexto disco de los R.E.M., que publicaron en 1988. Ha
pasado mucho tiempo, y el estatus de R.E.M. ha pasado de mitos de underground a
superventas y luego, a dinosaurios para acabar como un grupo que quizás tuvo su
canto de cisne un poco tarde. Y me sigo encontrando mucha gente, dentro de la
parroquia rockera, a quienes
no les gusta nada la banda de Athens (Georgia).
Bueno, para mi gusto, los seis discos que grabaron entre 1986 y 1994
son imprescindibles (“Lifes Rich Pageant”, “Document”, “Green”, “Out Of Time”,
“Automatic for the People”, “Monster”). En concreto, el “Green” que nos ocupa
muestra a una banda asentada. Llevaban ya 5 LPs y se habían convertido en el
secreto peor guardado (afortunadamente) del pop-rock underground
estadounidense. En la referencia. Pero en ese 1988 cometieron un acto muy
arriesgado, por aquél entonces, y para su situación: firmaron con una
multinacional (Warner).
De lo mejorcito de los 80s!
Ya se sabe lo que ocurre en esos casos, que si ya no es lo mismo, que
si se van a vender, que si patatín, que si patatán. Ocurre que R.E.M., además
de hacer una música increíble, habían mantenido siempre una postura muy propia.
Quizás algo seriotes, pero hay que considerar la frivolidad de gran parte del
rock n’ roll en los 80s (y ojo, que no tengo problemas con ello). Además de su
pose seria y algo “arty”, por si fuera poco, estaban abiertamente posicionados
a nivel político, a la izquierda del Partido Demócrata (a quienes apoyaban) y
claramente ecologistas.
Pues bien, esa primera grabación para Warner, “Green”, no afloja ni en
calidad, ni en pose, ni en actitud política. Es más, quizás contiene alguna de
las letras más explícitas de su carrera. Y lo importante, al menos siete de las
diez canciones que contiene el trabajo son, directamente, clásicos de su
discografía. La cara A abriendo con esas maravillas que son “Pop Song 89” y
“Get Up”, con la canción de “Búscate La Vida” (divertidísima teleserie, pionera
del humor absurdo y pasado de vueltas), que es “Stand” y con esa politizada
“World Leader Pretend”. La cara B, a priori, sería más floja. Error. En
realidad, requiere de más escuchas. Un tema como “Orange Crush” podría ser
perfectamente un hit radiofónico. Y “Turn You Inside Out” justifica el LP.
Como solían hacer, pocas pistas en la portada y carpeta interior. Una
pequeñísima foto de la banda (no es que fueran bellezas o lucieran modelitos
impactantes). La letra de “World Leader Pretend”, solamente de esa canción,
significativo. Pero en un tipo de letra pequeño y en blanco, que cueste de
leer. Un diseño de portada poco definido. Así eran los R.E.M. de 1988, poco
dados a poner las cosas fáciles. Las cosas cambiaron mucho para Michael Stipe,
Peter Buck, Mike Mills y Bill Berry con la llegada de la siguiente década y los
miles de discos vendidos. Ya quisieran, sin embargo, muchos grupos, tener una
carrera la mitad de interesante que ellos. Y amigos, para los que no conozcáis
a R.E.M. (y no, saber tararear “Man On The Moon” no cuenta), este LP, “Green”,
puede ser una perfecta puerta de entrada.
PD: Parece ser que este año, que se conmemora el 25º aniversario del
disco, habrá reedición, y todas esas chorradas. ¿Qué queréis que os diga? Yo
estoy encantado con mi vieja edición en vinilo.
PD2: mi primer texto en este blog, y estoy muy contento por ello... que sea el primero pero no el último! Me podéis encontrar también en Twitter, @carloskarmolina
Bienvenido al blog, siempre agradecemos gente nueva.
ResponderEliminarMe llamarás blasfemo, pero nunca he escuchado este disco de REM; para mi REM siempre son "automatic, out of time, monster" y ya. Pero gracias a tu entrada ahora mismo lo remedio.
Nos seguimos leyendo.