Ir al contenido principal

Jetbone "Magical Ride" (2016)


Magical Ride (2016) es el segundo disco de estos jóvenes y, si en el primer y excelente Jetbone (2012) bebían de  bandas vecinas como Hellacopters o Gluecifier, aquí son los Stones años setentas, los Faces o los también suecos Diamond Dogs algunos de los nombres que te vienen a la cabeza al escuchar sus composiciones. Guitarras adictivas, estribillos festivos, elegantes pianolas, sutiles metales…en pocas palabras: Rock’n’Roll.
Jetbone son una banda sueca con tan solo tres discos que empezaron su andadura hacia  2008. Come Out And Play es su último disco, editado este mismo año. Los tres son muy recomendables pero si me he de quedar con uno solo, sin duda este Magical Ride es el elegido.
Cómo su nombre indica, el disco promete justo eso: un viaje mágico de la mano de estos chicos que tan bien han sabido asimilar los viejos discos de casa de sus padres: funkbluesrocksoulsouthern rock … todo ello mezclado sin complejos y con una naturalidad pasmosa.

C’mon abre el disco, un tema que invita a la fiesta, pura diversión de la vieja escuela. El segundo tema, Mixed Emotions contiene un solo de guitarra sublime que va in crescendo hasta llevarnos a un final con coros góspel que nos hace ver la luz, al más puro estilo Blues Brothers.

No Way Out es un tema de aires southern que bien podría encajar en cualquier disco de los Lynyrd Skynyrd. Bajan revoluciones con el medio tiempo Woman, también de aires sureños, en la que dan rienda suelta a las guitarras. Las emotivas Rosalie You Are My Love completan el cupo de baladas del disco.

La sección de vientos está omnipresente a lo largo de todo el disco y le da un indudable aire de rock festivo. El disco no tiene ni un solo ni un solo momento de decaimiento ni un solo tema de relleno. Imposible no mover los pies ante el groove de Everybody Need Somebody To Love (puro Stones!!), Working Out For The MoneyFifth Time Loser o el tema que da título al disco Magical Ride….un conjunto de temas que te alegran el día en cuanto la aguja toca los primeros surcos.

Magical Ride es un disco directo, puro rock’n’roll que suena añejo pero refrescante al mismo tiempo y todo ello sin aditivos ni conservantes añadidos.
Eso sí, imperdonable dejarlos pasar en directo, porque son capaces de incendiar hasta la sala más fría.
Jetbone en directo en la Sala Rocksound, Barcelona.


Comentarios

  1. No he escuchado este disco y le voy a poner remedio ahora mismo. Una recomendación muy interesante. Una de las cosas que más me gusta de los viernes en FFvinilo es conocer música nueva (a veces con muchos años de antigüedad pero desconocida por mí), así que me los voy a escuchar. Un saludaco.

    ResponderEliminar
  2. Estas son las bandas actuales que me molan.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Joe Satriani - Flying in a Blue Dream (1989)

Joe Satriani - Big Bad Moon - Live Expo 92 (Sevilla) ¿ Vaya presentación la del Tio Joe eh?, mira que plantarse en Sevilla, en medio de la Expo92 y vomitar el Big Bad Moon acompañado del gran Brian May, no había visto nada igual hasta la fecha y creo que a día de hoy, tampoco.  ¿Quién se esperaba ese Slide con la propia armonica? Bueno, que me dejo llevar por la emoción, Joe Satriani forma parte de la banda sonora de mi infancia.  Sin ningún tipo de duda, soy quien soy, musicalmente hablando, por mi primo, el cual me encamino hacia que escuchar y que instrumento tocar, a través de cintas como esta descubrí al profesor y a muchos mas.  En esta cinta destacan Joe Satriani, un tal Jason Becker, Steve Vai o el mismísimo Paul Gilbert con Racer-X, anda que no le di vueltas a esa cinta, aun la conservo.  Una cosa que llama mucho la atención de esta clase de músicos, es que las canciones, la gran mayoría de veces carecen de letras y eso no suele gustarle a todo el mundo. Hablar de un disco de

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero

Surgin' – When midnight comes (Music For Nations, 1985)

  Hoy traigo el único álbum (oficial) de la efímera banda neoyorquina Surgin , una joya escondida en el resto de saldo que fue el rock melódico de los ochenta, con un protagonista especial: Jack Ponti. Igual no tienes ni idea de quién es este personaje. Fíjate en la foto de abajo, es el de la izquierda, tocando con su colega de instituto John Bongiovi en un concierto del grupo que montaron juntos, Rest. Su poco éxito en aquellos primeros ochenta disolvió la historia, pero no así la amistad que ambos se profesaron. Aunque habría que revisar esas “amistades” de Mr. Bongiovi: para el puesto de guitarrista de su banda eligió a un desconocido Richie Sambora antes que a sus colegas Ponti o Snake Sabo. Por algo sería, claro. Jack formó su propia banda, que acabó llamándose Surgin, y consiguió editar este disco que hoy comparto por aquí, When midnight comes , en 1985. Compuso, produjo y tocó en él con la esperanza de alcanzar el estrellato roquero, objetivo que, obviamente, no logró. ¿Por

KISS-ASYLUM (1985-Mercury)

  A mediados de los 80, seguramente que de KISS lo único que quedaba era el nombre. Ace Frehley y Peter Criss no estaban físicamente y Gene Simmons aunque seguía figurando casi que tampoco, vivía más interesado en una carrera cinematográfica que no despegaba o produciendo a bandas del nuevo Glam Metal USA como Keel o Black N Blue.  Si me apuras, The Paul Stanley Band no hubiese sido un mal nombre, ya que el antaño "Chico de las Estrellas" era el único que realmente tiraba del carro en aquellos años. Gracias a él y a Vinnie Vincent disfrutamos de los primeros Kiss "desmaquillados" merced al aplastante por momentos "Lick It Up". Cuando Cusano fue expulsado por sus excentricidades la banda grabó el irregular "Animalize", que bueno, tampoco estaba tan mal y hasta nos brindó con un VHS de la época bastante subido de tono.  Y luego llegó "Asylum" con un nuevo guitarrista llamado Bruce Kulick y otra oportunidad para seguir en la reciente rueda

Cream - Wheels of Fire (Polygram Records, 1968)

Me he llevado una pequeña sorpresa al bucear en el blog buscando este disco, por aquello de no repetir entrada, y comprobar que aun nadie ha reseñado el tercer largo de los ingleses. Imagino que mi predilección por Clapton hace que la mayoría de los clásicos del guitarrista se me antojen imprescindibles, de ahí la sorpresa. Pero bueno, aprovecho yo para dejar aquí mis impresiones sobre este Wheels of fire , además de unas fotos de la edición en vinilo, que me parece espectacular.  Antes de entrar en materia, me gustaría aclarar algo: pese a que conocí a Cream por Clapton, la realidad es que los dos gallos del gallinero eran sin duda Jack Bruce (bajo y voz) y Ginger Baker (batería), hasta el punto que en este disco el guitarrista no aparece acreditado como compositor. Sin duda su mano y su característica voz fueron imprescindibles para el sonido de la banda, pero las fuertes personalidades de los dos personajes mantenían el equilibrio y hacían que Clapton, que podría estar soleando dura