"(Pronounced 'lĕh-'nérd 'skin-'nérd)" es el primer álbum de estudio del renombrado grupo de rock sureño Lynyrd Skynyrd. El título del álbum se refiere a como se pronuncia el nombre de la banda. Fue publicado el 13 de agosto de 1973 a través de la label MCA Records, fue el inicio de una brillante carrera que los catapultaría a los más grandes reconocimientos debido al estilo de la banda que nos entregaría un enorme talento con su primera placa discográfica. Un álbum para todos aquellos fans de la guitarra eléctrica y su importancia en el mundo del rock sin duda.
Producido por el mítico productor Al Kooper (Trabajó con Bob Dylan en el álbum "Highway 61 Revisited"), quien los descubrió y acompañó durante sus 3 primeras grabaciones, nos encontramos ante un material fresco y alegre que supera fácilmente la barrera del tiempo. Si bien es cierto que Lynyrd Skynyrd es la banda emblema de lo que en E.E.U.U. llaman “Rock Sureño”, prefiero referirme a este grupo como una (gran) banda de Rock, ya que como bien leí cientos de veces en otros medios, el rock sureño no es otra cosa que rock complementado con sutiles toques blueseros y alguna que otra pincelada del country. Además la banda contaba con tres enormes guitarristas entre sus filas, lo cual endurecía aún más su sonido, sobre todo en vivo y comparándolos con otras agrupaciones similares de la época (hablamos del año 1973).
La agrupación original de Lynyrd Skynyrd estuvo conformada por Ronnie Van Zant como vocalista,
Gary Rossington en la guitarra rítmica y solista, Allen Collins en la otra guitarra rítmica, Ed King en el bajo, Billy Powell en el teclado, Bob Burns en la batería excepto en "Tuesday's Gone" la cual se hizo cargo Robert Nix, además del propio Kooper que en el estudio se hizo cargo del bajo y mellotron. Un septeto que nos entregaría un enorme talento con las ocho canciones que conforman la placa del disco. Para todo aquel que se precie ser fan del sonido de la guitarra eléctrica éste disco debe ser uno de los que conforman su altar de material de culto.
El listado de las canciones fue el siguiente:
Lado A
I Ain't The One
Tuesday's Gone
Gimme Three Steps
Simple Man
Lado B
Things Goin' On
Mississippi Kid
Poison Whiskey
Free Bird
En aquel entonces el Heavy Metal como tal todavía no existía. Si bien en el viejo continente la trilogía sagrada (Led Zeppelin, Deep Purple y Black Sabbath) ya contaba en su haber con varios discos, los debuts de grupos como Judas, Maiden, ACDC o Motörhead aún no habían visto la luz (distinto es el caso de los maestros Scorpions cuyo debut salió en 1972, pero con un sonido totalmente ajeno al que más tarde los haría grande). Volviendo al país originario de los Lynyrd, grupos como Aerosmith, ZZ Top o Blue Oyster Cult ya habían dado sus primeros pasos.
Así nos encargamos de desglosar algunas de las canciones del primer material de Lynyrd Skynyrd para darnos una idea de la trascendencia del álbum.
Empezamos con "Ain´t The One" típico (buen) tema inicial de este grupo y excelente elección para abrir el cd: riff inicial roquero, al cual se le suma luego de unos segundos una guitarra líder y finalmente la voz inconfundible de Ronnie Van Zant. Excelente el solo principal de la canción (al minuto 1:52 obra de Rossington). A veces me resulta muy difícil describir con palabras la genialidad realizada por estos músicos, sobre todo por su simpleza. “I Ain´t The One” es uno de esos casos.
Seguimos con "Tuesday´s Gone" haciendo un giro de 180 grados, la banda nos regala el primero de los dos temas lentos que hay en el disco y quizás la canción más conocida por varios de los colegas del blog, cortesía de James Hetfield y Cía. en Metallica y su disco de versiones Garage Inc(ya reseñado de manera excelente en éste blog). Lo único que voy a decir es que me quedo lejos con la versión original. El sentimiento de tristeza y nostalgia que transmite esa guitarra y la interpretación vocal de Van Zant son irrepetibles. Nos transmiten melancolía desde el inicio con
La tercera pieza titulada "Gimme Three Steps" clásico infaltable en todos sus conciertos y recopilaciones. Tema rockero de buen riff central, con melodía y estribillo pegadizo y solo genial en forma de outro. Mención especial para la línea de bajo que se sostiene durante toda la canción. Otro claro ejemplo de la simpleza compositiva mencionada previamente.
"Simple Man" es una bella balada rock con todo el aire de los años '70s, en lo particular disfruto mucho el punteo de la guitarra en las notas de la composición que nos envuelve en todo momento por la melancolía y belleza musical que desprende al mismo tiempo. Ya nos imaginamos como debió sonar en vivo así como la reacción de la audiencia escuchaba las notas del inicio.
"Things Goin´ On" el tema comienza con una intro donde las guitarras, el bajo y la batería se complementan a la perfección. Pero es aproximadamente en el minuto 1:05 cuando el tecladista toma el timón del barco, para abandonarlo solo en contadas ocasiones, como por ejemplo en el solo central de la canción (el cual es nuevamente excelente por cierto producto de la excelente dupla con la que contaba el grupo). Se trata ante una canción entretenida, diferente al resto, la cual le agrega matices diferentes a este trabajo.
Finalmente tenemos el último track titulado "Free Bird" el cual representa la mejor pieza del disco y una de las mejores canciones de la historia del rock (hay rankings que avalan esta afirmación, por ejemplo la Guitar World que ubica el solo de la canción como el #3 de la historia del rock).
Nos encontramos ante una canción épica (con una duración de más de nueve minutos algo poco habitual en aquel tiempo), en donde su primera mitad es en plan balada (una vez más genial, por cierto) llegando a su clímax en su segunda mitad instrumental y convirtiéndose a partir del minuto 4:43 en un festín de guitarras y solos, donde la dupla Rossington-Colins se luce magistralmente. Lo cual los inmortalizaría hasta nuestros días.
"I Ain't the One"
"Tuesday's Gone"
"Simple Man"
"Free Bird" live 1977 Oakland Stadium
Así que para finalizar con esta auténtica obra maestra, solo comento que la banda se embarcó en una impresionante gira llevando a miles de fanáticos que quedaron maravillados con su estilo musical, lo cual los posicionó como una de las bandas emblemáticas de los años '70s y de la historia del rock. Un disco imprescindible en cualquier colección de clásicos del rock. Buen fin de semana amigos y amigas del blog, sus comentarios son bienvenidos siempre.
Marco Anton
Qué decir de este discazo que no se haya dicho ya... lo mejor es que suena igual de fresco ahora que cuando se publicó. Imprescindible. ¡Bravo!
ResponderEliminarFree bird es uno de mis temas favoritos. Gran disco, gran reseña.
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