Ir al contenido principal

DIO - Holy Diver (Warner, 1983 - Back to Black, 2010)



Esta semana (exactamente ayer) se han cumplido cinco años de mi primera incursión en este blog de la Comunidad #FFvinilo (135+1 discazos) con una entrada de mis adorados KISS (aquí mismo). Cuando releo ese artículo me doy cuenta de lo mucho que ha cambiado mi estilo y, de rebote, mi vida, cómo han crecido a mi alrededor las mujeres (antes niñas), cómo ha decrecido mi cabello y cómo hemos ido mutando en este espacio los compañeros habituales. Y me apetecía rendir un pequeño homenaje a todos nosotros, los que semana sí semana no (o de vez en cuando, cada uno a su aire) dejamos por aquí una muestra de uno de nuestros tesoros preciados, esos círculos plásticos que ocupan un lugar cada vez mayor de nuestras casas.

Y qué mejor que con el maestro Ronnie James Dio y su álbum antológico Holy Diver. Y en
edición picture disc nada menos. No sé ni cómo suena porque no lo he pinchado nunca pero es precioso. Lo editó en el año 2010 Back to Black. Algún día me haré un reloj hortera o un  salvaplatos de lujo.

Del álbum poco os voy a contar (porque está muy trillado y yo muy vago). Mr. Dio a la voz y componiendo todos los temas, algunos con la ayuda de sus secuaces, a saber: el nunca suficientemente valorado Vivian Campbell a la guitarra, Jimmy Bain al bajo y Vinny Appice a la batería. 

Aprovecho para desearos feliz verano a los que soléis cerrar por estas fechas vuestra participación en el blog y pediros a los que sigáis visitando este hueco que vengáis con cervezas, pues comentan que va a ser un verano jodidamente caluroso.

A todos y a todas las que nos leéis y aún no participáis de esta locura del blog vinílico deciros: ¡vamos ya! Traed vuestro cachito de colección al rincón de los locos por el black circle.

Buen finde. Stand up and shout!!


Comentarios

  1. Palabras mayores!! todos en pies, por favor!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No hay muchos álbumes en el que de manera unánime todos los heavies roqueros o metaleros nos pongamos tan de acuerdo como con este.

      Eliminar
  2. Stand up and shout amigo mío, un estupendo álbum, imprescindible, mítico y trillones de veces escuchado.
    La reedición es muy bonita.
    Y gracias por la dedicatoria.

    De aquí a quince días prometo publicar una nueva entrada, que dependiendo del número de colaboradores de vacaciones quizás sea la última del curso. Ya veremos.

    De momento, leo a todos con devoción.
    Viva el vinilo, viva la música y viva el rock.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. De nada que la dedicatoria es comunitaria, porque nos lo curramos mucho y punto. Para mí es un punto de encuentro donde compartir el vicio del vinilo. Abrazo de vuelta.

      Eliminar
  3. Tengo este mismo disco en esta edición, me hice con el hace un par de años. Discazo!!. Buen verano para ti también y de paso ya para los demás. Que lo disfrutéis al máximo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Comentario no visto antes. Gracias aunque nos seguiremos leyendo por aquí de vez en cuando (creo). Discazo bonito.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Paice Ashton Lord - Malice in Wonderland (Polydor, 1977)

Esto no estaba previsto. Este disco no estaba en la lista de títulos para reseñar en #FFVinilo. Pero es que el fin de semana pasado por fin pude hacerme con él, y tenía ganas de compartirlo. Los que leéis esto ya conocéis esa sensación de ir pasando discos y encontrar de repente esa portada que tienes en la cabeza desde hace tiempo. Qué sensación. Se que vosotros me entendéis, así que no encuentro mejor foro para compartir ese momento que este blog, lleno de melómanos “vinileros”. Lo curioso es que no solo encontré una, sino dos copias, una francesa (“gatefold”) y una inglesa (sencilla). Con buen criterio, me quedé con la inglesa. Y claro, eso se nota en el sonido. ¡Como suena esta maravilla! Si os gustan esas producciones típicas de los 70 con mucha profundidad y dinámica lo vais a disfrutar (nada que ver con las producciones actuales, cada vez más “planas”). A la producción, la leyenda, Martin Birch (Deep Purple, Whitesnake, Black Sabbath, Iron Maiden, …). ¿De dónde sale este grupo?

Scorpions – Love at first sting (Harvest-EMI, 1984)

Y si hace unas semanas os hablé aquí del inmenso 1984 de Van Halen , hoy toca comentar el no menos imprescindible Love at first sting de los alemanes Scorpions , otro que este año también celebra su 40º aniversario. La banda venía de una gira internacional presentando Blackout , el pedazo de disco que finalmente los había puesto en el mapa –yo mismo los descubrí gracias a él, os lo conté aquí – y tenían la misión de superarse, algo nada fácil no sólo en el aspecto creativo. Una de las razones era la mala relación entre el bajista Francis Buchholz y Dieter Dierks , dueño de su compañía de discos y productor del grupo desde 1975. Por eso, cuando la banda –que empezaba a tener dinerito del bueno– pidió grabar el nuevo álbum en un estudio que no fuese el del productor, Dierks se los llevó a los Polar studios de Estocolmo –exacto, los de Björn y Benny de ABBA – pero dejó en Hannover al bajista, contratando como músico d

Boikot - Los ojos de la calle (Discos Barrabás, 1990)

  Hay música que corresponde a un momento concreto de nuestra vida y que, por edad usualmente, por cuestiones personales a veces, queda ahí anclada, como un bonito recuerdo. Música a la que no suelo volver casi nunca. Y ese caso lo representa perfectamente el debut de Boikot. En el devenir de la cultura rock madrileña se conformó, en la segunda mitad de los ochenta, un grupo de bandas jóvenes con unas sonoridades muy particulares, emparejadas con eso del rock urbano, pero tintado de una manera particular en la que escuchábamos las raíces de Leño o Burning junto con ramalazos unas veces punk, otras más metaleras, otras más seventies, incluso algo de blues. Ahí puedes meter a Esturión, Casablanca, Porretas o los mismos Boikot.  En medio de ese “fregao” musical cobró protagonismo Mariano García, polémico personaje, especialmente en sus últimos años. Generó negocio, oportunidades y ayudó a crear y mantener “la escena” madrileña a través de varias salas (Canciller, Barrabás), su labor promo

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Firehouse - Firehouse (CBS, 1990)

El pasado 5 de abril falleció el cantante de Firehouse, Carl Jeffrey Snare, por un fallo cardíaco en un proceso cancerígeno que le había llevado unos días antes a pasar por un quirófano. Además de ser un seguidor fiel de la banda, les he visto dos veces en directo; una de ellas la recuerdo con especial felicidad por lo que disfruté (tocaron junto a unos fantásticos TNT).  Casualmente, la semana pasada en este blog hablaba, en los comentarios de un post, del legado de algunos músicos más o menos desconocidos por el "gran público" comparándolo con otros del mismo o menor valor idolatrados, quienes reciben homenajes y se les dedican calles. Con esa reflexión me quedé enganchado. Al repasar la discografía de Firehouse, me di cuenta de algo obvio: existen músicos que han dejado un legado en nosotros. Da igual lo importante que sean más allá de nuestras orejas. Nos pertenecen. Y C. J. Snare es, para mí, uno de esos músicos. Desde este debut que hoy comparto su voz me ha acompañ