Ir al contenido principal

The Black Crowes "Amorica" (American Recording, 1994)


The Black Crowes es una banda originaria de Marietta, Georgia en los Estados Unidos. Su paso a ser una banda reconocida desde su formación allá por el año de 1989 inició con su fichaje para la label Def American Recordings del productor George Drakoulias con el cual realizaron sus primeros dos estupendos discos titulados "Shake Your Money Maker" (1990) y "The Southern Harmony and Musical Companion" (1992) respectivamente. Pasaron dos años en los cuales luego de giras por varias partes de su país y el mundo debido al éxito de ventas de sus primeros materiales así como a la calidad compositiva de sus piezas para que la banda se reuniera de nuevo en estudio para dar forma a su nuevo material que vendría a ser la tercera placa de su material discográfico.


La banda de Blues Rock y Southern Rock estaba compuesta por los tremendos hermanos y líderes visibles Chris Robinson en las vocales y su hermano Rich Robinson en la guitarra principal, acompañados por Marc Ford en la guitarra acompañante, Eddie Harsch en los teclados, Johnny Colt en el bajo y finalmente por Steve Gorman en la batería. Todos ellos bajo la producción de un nuevo productor Jack Joseph Puig en sustitución de George Drakoulias el cual decidió seguir con su labor ejecutiva en la label y dar paso a otro productor, aquí el menudo lío resultaba producir a una banda ya consolidada y con la actitud sobrada de los hermanos Robinson así como los excesos de los cuales ya formaba parte el estilo de vida de la agrupación. Aún así pudieron sacar adelante el trabajo de manera conjunta entre las dos partes dando como resultado un emblemático disco que desde la portada pintaba para ser todo un referente de la década.


Y es que se arriesgaron en una sociedad conservadora de la época al presentar como portada la imagen de la entrepierna de una mujer con una tanga que tiene la bandera de los EE. UU. y decorando todo ésto se asoman vellos púbicos en las orillas de la misma. La imagen es de una portada de la revista para adultos Hustler que salió en el año de 1976 lo cual encendió las alertas de censura de tiendas especializadas en discos al considerarla "sexualmente explícita" lo que originó que finalmente se reemplazara con un fondo negro donde sólo aparece el triángulo que forma esa parte. Así sin más dificultades el álbum salió a la luz el 1 de noviembre del año 1994 sorteando todo tipo de dificultades que poco a poco fueron sorteando hasta posicionarse dentro de los mejores materiales publicados aquel año en medio del liderazgo del Rock Alternativo su estilo vino a refrescar la escena musical como propuesta lo cual les permitió seguir cosechando las mieles del triunfo como se dice en el argot periodístico.

El track list se compone de la siguiente manera
LADO A:
"Gone" – 5:08
"A Conspiracy" – 4:46
"High Head Blues" – 4:01
"Cursed Diamond" – 5:56
"Nonfiction" – 4:16
"She Gave Good Sunflower" – 5:48

LADO B:
"P.25 London" – 3:38
"Ballad in Urgency" – 5:39
"Wiser Time" – 5:33
"Downtown Money Waster" – 3:40
"Descending" – 5:4


Esta banda es un verdadero referente de lo que es la herencia del Blues y el Southern Rock que en décadas pasadas dominaron el panorama con grandes músicos como B.B. King o bandas como Lynyrd Skynyrd por mencionar unos ejemplos, todo el concepto del álbum estaba pensado en ser una obra maestra, debido a los altos estándares logrados en sus primeros materiales. Aquí es donde se siente el feeling del sonido de The Black Crowes con todo su esplendor ya que los músicos luego de trabajar varios años juntos se conocían a la perfección y sabían como complementar la nota del instrumento del otro hasta con los ojos cerrados, así venían las piezas donde se escucha ese sentimiento de los "jams" o sesiones donde los músicos hacen lo que mejor saben hacer desarrollar su música libremente sin nada de ataduras ni presiones de productores por recomponer una estructura de la composición así que la banda libremente se permitió trabajar para plasmar todas sus habilidades, aquí se acompañaron de buenas botellas de licor y otras cosas necesarias en la vida de algunos "Rock Stars" para inspirarse. Aunque sabemos de sobra que no es una regla a seguir, los Cuervos Negros si hicieron uso de ello para entrar al estudio de grabación y los resultados son los que comentaremos a continuación.


Como ya habíamos comentado que los muchachos de Georgia ya estaban firmemente asentados en la élite del rock se podían permitir descartar un disco ya grabado porque no les satisfacía lo suficiente o cambiar de productor sólo por apetecerles para dar luz a ésta absoluta obra maestra. Más liberados que nunca de ataduras estilísticas, The Black Crowes se pasean con absoluta suficiencia por su vastos gustos musicales y se muestran más reflexivos, con un detallismo digno de orfebre que no afecta para nada al "feeling" que se respira en la audición. Los medios tiempos  de las guitarras así como baladas se imponen, aunque los fans más rockeros se pueden conformar con grandes canciones como la inicial "Gone" o "She Gave Good Sunflower" (¡un pedazo de tema!), mientras que ciertos aires funkies aparecían en "P 25 London" y la influencia latina ya apuntada en la percusión de "Thorn on my Pride", la creatividad se desbordaba en la deliciosamente auditiva "High Head Blues" un homenaje a los grandes maestros del género blues. Sin embargo, las joyas de la corona son esas baladas deslumbrantes, con inicios al piano tan preciosos como los de las piezas "Cursed Diamond" o "Descending" y esas dos canciones fusionadas que simplemente no he escuchado algún artista solista o banda que las supere: por supuesto hablo de las piezas "Ballad in Urgency" y "Wiser Time". Pero no podemos acabar éstos comentarios sin recordar a uno de los sencillos de presentación más pletóricos y a la vez menos exitosos del año 1994. Está claro que el tema "A Conspiracy" no era una canción destinada a las grandes audiencias; debido a ese sentimiento, ese memorable estribillo, ese absoluto derroche de facultades solo está al alcance de melómanos, que disfrutan mucho como yo al escuchar ésta estupenda canción todo un referente de aquella época y habitual para muchos de los seguidores de la banda.


Siempre he considerado que The Black Crowes como una banda muy aparte del resto de las otras tanto de las agrupaciones contemporáneas de su tiempo como de las que han existido anteriormente y después de ella. Sin duda que de no haber existido tendría que haberse inventado, éste año nos enteramos de su desintegración pero más como un rumor que como una confirmación oficial por parte de la banda. Ojalá la sabiduría musical llegue de nuevo a la banda y nos sorprendan con una nueva grabación en éstos tiempos donde falta una banda con un sonido como ellos. Les dejo algunos links para escuchar algunas de las joyas del tremendo álbum "Amorica"


The Black Crowes "Gone"


The Black Crowes "A Conspirancy"


The Black Crowes "High Head Blues"


The Black Crowes "She Gave Good Sunflower"

A disfrutar Rock sureño y festivo para el fin de semana amigos que no muchas veces se recuerda los grandiosos aportes históricos de éste estilo a la música en genera por lo que sabemos que su sonido te atrapará sin duda desde el riff inicial, buen viernes y feliz fin de semana para todos y todas. Hasta el próximo viernes.  

Comentarios

  1. De los primeros discos de The Black Crowes no sabría cuál señalar como el mejor, pero creo que este es el que tengo más escuchado, al que vuelvo más veces. Quizá atesore lo mejor de la banda en todos los sentidos, tanto interpretativos como compositivos. Y tiene una producción de primera. En fin, un gran vinilo. Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Sin duda que los dos primeros trabajos de Black Crowes sirvieron de base para que lograran ésta gran obra que fue su tercer disco. Uno de los que más disfruto en lo particular, costo encontrar este disco en vinilo pero lo conseguí. Saludos amigo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Extremoduro - Yo, minoría absoluta (DRO, 2002/2014)

  Cuando una banda de rock alcanza el éxito tiende a repetir la fórmula o a dejarse domar por los sonidos que le imponga la discográfica. En el caso de Roberto Iniesta, el Robe, alma, cerebro, venas y corazón de Extremoduro, el éxito le pilló preparado. "La masa es imbécil. Si sales en la tele puedes hacer un libro, un disco o lo que se te ponga en la punta del nabo. A mí eso no me interesa ni vender más discos ni que me conozca más gente. Como estoy ahora estoy bien, pudiendo organizar una gira y no tener que decir «no puedo dejar de tocar en noviembre porque no tengo un puto gil», así me vale". Y continuó haciendo lo que le dio la gana después del éxito de Agila (1996): editaron el directo Iros todos a tomar por culo (1998) y el controvertido Canciones prohibidas (1999), donde daban rienda suelta a su creatividad, con éxito y críticas reguleras.  Y se tomaron un descanso. "Creo que cuando siguen haciendo cosas buenas y nuevas los grupos funcionan, aunque estén dos o...

Rainbow – Down to earth (Polydor-1979)

Sin vinilos raros o exóticos para comentaros esta semana, echo mano de mi fondo de armario vinílico y como en mi anterior visita, dedico la reseña de hoy a otra de esas obras incontestables de finales del siglo XX de las que nadie quiere hablar porque todo cuanto pueda decirse, sobra o es redundante. Pero para eso estoy yo, para redundar en lo obvio. Y para dar a la reseña un enfoque diferente, más que del álbum –que también–, os hablaré de su vocalista. Total, que después de saber de él en Alcatrazz [ aquí ] o MSG [ aquí ], hoy os traigo de nuevo al incombustible Graham Bonnet para presentaros otro enorme disco en el que participó aportando su personalísimo estilo. Poneos cómodos.    Érase que se era el británico Graham Bonnet , un adolescente nacido en una localidad costera del condado de Lincolnshire que se ganaba unas libras cantando jingles para la radio. Su primo Trevor había emigrado con sus padres a Australi...

Ilegales - Agotados de esperar el fin (Epic, 1984)

  Este es uno de los discos de mi vida. De esos que tienes tan metidos dentro de ti que no necesitas escucharlos con frecuencia. De hecho, hace muchos años que no lo escuchaba, y al volver a hacerlo para escribir esta reseña me ha provocado las mismas sensaciones que recordaba. Como suele pasar en estos discos, me sabía de memoria el orden de las canciones y hasta el tiempo que dura el espacio entre canción y canción. Esta nueva escucha me ha servido también para reafirmar mi opinión de que este es uno de los mejores discos españoles de la historia. Así de claro. Esta cinta (ya que primero fue una cinta grabada, antes de hacerme con el vinilo), fue una de esas que desgasté en mi radio cassette en mi época preadolescente. Ni siquiera tenía caratula, ni los títulos de las canciones, pero fue una de mis cintas favoritas durante esa época. Siempre me chocó el sonido tan especial del disco. Una “reverb” exagerada en la voz, el sonido de la batería super seco, casi cercano al de una ...

Helloween - Pink bubbles go ape (1991, EMI)

  Aprovecho la reciente visita a nuestro país de la banda multigermánica Helloween para compartir aquí contigo, lector con orejas inquietas, otro de esos discos que me gusta catalogar con la etiqueta de “síndrome del disco de después”: aquella obra musical editada tras un pelotazo, éxito o gloria en forma de DISCARRAL y que palidece a su sombra independientemente de su calidad o éxito. Discos que han sido “un fracaso” porque vendieron la mitad que su predecesor o porque, simplemente, no respondió a las expectativas. En este contexto, queda claro que casi cualquier cosa que nuestros protagonistas hubieran editado después de “Keeper of the seven keys II” (más aún si lo consideramos un solo disco con su primera parte) iba a ser valorado con el rasero de una(s) obra(s) catalogadas aún hoy como Obras Maestras del Discarralismo (OMD para los entendidos). Si añadimos que las acciones (o inacciones) de algunos de los protagonistas de la banda y alrededores contribuyeron a dificultar la pr...

Mötley Crüe - Too Fast For Love (Leathur Records,1981)

  Mötley Crüe en los días en los que grabaron " Too Fast For Love " vivían como auténticos vagabundos, de casa en casa de quien tuviese las pocas luces de dejarles entrar, lugares abandonados, furgonetas cutres y un sinfín de cuchitriles a cual peor donde los cuatro solían dejarse caer totalmente colgados de caballo.  No era algo exclusivo de ellos, así coexistían muchas de las bandas de la ciudad de los Angeles justo cuando entraron a grabar su debut en Octubre de 1981. La cosa fue muy rápido, en cinco días ventilaron las canciones en una vieja consola API de 24 pistas con Michael Wagener de ingeniero de sonido, el alemán venía directamente de terminar con Accept su tercer disco en estudio " Breaker" .  La grabación se la costeo el propio manager de la banda, y les costó unos cinco mil dólares. Vince, Nikki, Mick y Tommy no tenían casi ni para comprar hamburguesas, pero se las arreglaron para prensar inicialmente 900 copias de Too Fast For Love y venderlas con ...

Asteroid B-612 - "Roads, Stars" (2025)

…guitarras distorsionadas, más sutiles y cromáticas creando un paisaje más amable que el poderoso y furibundo bramido de antaño… Por  Jorge García . Cuatro discos como cuatro soles en la década de los noventa, cuatro toques de queda indispensables para aquellos que gustan del rock de fuerte pegada con ascendentes de Detroit y de su Australia natal. Un cuarto de siglo de silencio discográfico, y ahora podemos  decir con pruebas físicas y sonoras en la mano, que  Asteroid B-612   ha vuelto.   Para este retorno, que según palabras de la propia banda  ha nacido del simple deseo de subirse a un escenario con viejos amigos , publican un nuevo álbum titulado  "Roads, Stars"  que ha sido grabado en Australia y España durante el año 2024 y que ha mezclado  Pepe Gomar  y  Mike Mariconda . Por supesto  Johnny Spittless  en la guitarra y el vocalista  Grant McIver  continuan capitaneando la nave junto al batería  Ben Fo...