Ir al contenido principal

Roy Etzel - Il Silenzio (Belter, 1965)


Hoy os traigo un nuevo minivinilo de mi socorrida serie “Los singles de mami”, uno de los pocos que me queda por reseñar de la herencia de mi madre y que utilizo como último recurso para no faltar a mi acostumbrada cita quincenal con este blog. Os lo debo. Así que no esperéis ni un particular valor musical ni una especial conexión sentimental con este disco –obviando que era de mi madre– porque me parece infumable y tedioso a más no poder. Ignoro cómo alguien podía financiar la edición de algo así y –lo más raro aún– cómo a alguien le podía resultar atractivo escucharlo. Lo sé, no es una presentación demasiado buena para esta entrada, pero es que he estado liado últimamente y no he podido preparar otra cosa. No sé, quizás aprendáis algo de los datos que he encontrado sobre el single de marras. 
 
El artista en cuestión es Roy Etzel –en realidad, en su pueblo todos le conocían como Hans Joachim Etzel–, un trompetista, compositor y director de orquesta de Breslau, que en el momento de su nacimiento era alemana y que actualmente es la polaca Wraclaw. Formado en la Escuela de Música del Ejército, tras su paso por diversas big bands después de la Segunda Guerra Mundial acabó creando su propia banda, la Soundorchester Roy Etzel y comenzó una carrera de éxito, sobre todo en Alemania, llegando a aparecer en películas de cine y en numerosos programas de televisión. 
 

Y así es como a mediados de los 60, el sello barcelonés Belter licenciado por Cantagallo –editorial fundada por el músico y productor Karl Heinz Busse para publicar en España discos de los artistas de su oficina de management– le edita este single de Il Silenzio que acabó comprando o recibiendo como regalo mi madre y que hoy poseo yo. En su portada –ignoro el autor– destaca Roy en una azotea de Múnich, lo sé porque tras él destacan las cúpulas de las dos torres de su Frauenkirche
 
El primer tema que encontramos en el single es una versión de Il silenzio, escrito originalmente por el trompetista italiano Celeste Raffaele Rosso y que arregló el compositor, pianista de jazz y director de orquesta romano Willy Guglielmo Brezza. Es como si en un entierro de un agente de policía de Nueva York se hubiese contratado a un mariachi para hacer el acompañamiento musical de la ceremonia. Los coros y la utilización de sordina acaban de “redondear” la pieza. Completa la cara Oh Warum, una mezcla de música de ascensor de grandes almacenes y banda sonora para spaghetti western compuesta por el arreglista, pianista y compositor alemán Heinz Meier y su colega Kurt Hertha
 

En la cara B podemos escuchar en primer lugar Melancholie, original de Konrad Fuchsberger, guitarrista y compositor alemán cofundador de la banda germano-austríaca Die Bambis. El temita a cargo de Etzel me recuerda en algunos momentos a Pérdoname, del Dúo Dinámico. Y para finalizar esta obra capital de la música europea del siglo XX (guiño, codazo), Goldfinger, una pieza que seguro que conocéis todos y que el compositor británico John Barry compuso para la banda sonora de la película homónima de James Bond. A ver, la versión con la trompetita de Etzel me parece prescindible en grado sumo, pero al menos la tonada me resulta conocida. 
 

Y eso es todo por hoy gracias a mi madre, la primera vinilófila de mi familia. Etzel murió en la primavera de 2015 con 90 años recién cumplidos en Múnich. Dios lo tenga en su gloria y lo que es más importante, mantenga oculta al mundo su trompeta. 
 
¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Mira que has avisado de lo que había en este disco, pero aun así no he podido evitar escucharlo, como fan que soy de tu sección. Pero no ha podido ser, no he conectado con la música del Sr. Etzel. Seguro que este señor tenia su publico, y no soy yo. En cualquier caso, la reseña bien merece todos mis respetos. Ya es difícil escribir sobre la música que nos gusta, así que hacerlo sobre una música que no despierta nuestra pasión es aún más admirable. Bravo. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anónimo5/4/25 10:50

      Gracias por tus palabras y por la escucha. Ya sabes que también es mi filosofía en este agujero musicófilo. Pero, alma de cántaro, mira que os he avisado. Este estilo de tocar con la trompetita tonadas de otros no lo he entendido nunca. Me resulta muy irritante. Pero, como ya he dicho en otras ocasiones, era de mi mami y es un vinilo... así que p'al blog. Saludos. KING

      Eliminar
  2. Con esta aportación te has posicionado a la altura de Tina, no te digo más. Esto demuestra que hay un roto para cualquier descosido, que para gustos colores y que a todo el mundo le gustan sus mierdas. Hay oportunidades para cualquier género. Ya está. Te mando un abrazo 😂

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anónimo5/4/25 15:34

      Y una mierda a la altura de Tina... que lo he reseñado pero lo he puesto a parir. Vas a comparar. Recojo tu abrazo, pero que sepas que me has ofendido jeje KING

      Eliminar
  3. Coño, como que el toque de trompeta inicial es el que se usa en el ejército como minuto de silencio. En fin, infumable, como tú bien dices pero otra muesca para este blog. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anónimo5/4/25 15:33

      En efecto, nada queda por decir. Abrazo de vuelta. Voy a por el tuyo... que parece, estooo... interesante 😂 KING

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Extremoduro - Yo, minoría absoluta (DRO, 2002/2014)

  Cuando una banda de rock alcanza el éxito tiende a repetir la fórmula o a dejarse domar por los sonidos que le imponga la discográfica. En el caso de Roberto Iniesta, el Robe, alma, cerebro, venas y corazón de Extremoduro, el éxito le pilló preparado. "La masa es imbécil. Si sales en la tele puedes hacer un libro, un disco o lo que se te ponga en la punta del nabo. A mí eso no me interesa ni vender más discos ni que me conozca más gente. Como estoy ahora estoy bien, pudiendo organizar una gira y no tener que decir «no puedo dejar de tocar en noviembre porque no tengo un puto gil», así me vale". Y continuó haciendo lo que le dio la gana después del éxito de Agila (1996): editaron el directo Iros todos a tomar por culo (1998) y el controvertido Canciones prohibidas (1999), donde daban rienda suelta a su creatividad, con éxito y críticas reguleras.  Y se tomaron un descanso. "Creo que cuando siguen haciendo cosas buenas y nuevas los grupos funcionan, aunque estén dos o...

Ramoncín - Al límite vivo y salvaje (1990, BMG)

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que este sábado tengo una Cita con mi chica para irnos de concierto a ver y escuchar al señor José Ramón Márquez , os traigo uno de los directos más importantes del rock español. Muchos denostan y menosprecian la figura e impronta de Ramoncín en nuestro rock patrio por su época de adalid de los derechos de autor a la cabeza de la infame SGAE, por su etapa de tertuliano y protagonista del papel cuché e, incluso, por su largo periplo como presentador de un concurso de televisión (mis amigas se pegaban por ir de público para verlo, todo hay que decirlo). Bien, pues no saben separar el polvo de la paja. Yo paso de todo aquello, y me quedo con la música que es lo que todos aquí amamos. Me voy a quitar desde el principio la parte técnica e histórica. Grabado en el 90 durante unos recitales en los que no presentaba ningún disco nuevo lo que le quitaba un poco de presión. Luego nos enteramos de que eran una despedida: en aquel m...

Medina Azahara - En directo (Avispa, 1990)

  Ya lo he escrito en este blog: a veces no escucho música, escucho recuerdos. Las canciones se pegan a los momentos en los que vivimos y al volver a ellas es inevitable revisar las imágenes y las emociones que las acompañaron. En otras ocasiones, uno se siente hasta protagonista, como si el músico las hubiera compuesto para nosotros, pensando en "eso" que nos sucede. Y en otras, literalmente, sin tocar ningún instrumento, somos esa canción. Esto último sucede con este Medina Azahara en directo : yo estuve en ese concierto, por lo que, de algún modo, cuando escucho el disco, ahí al fondo, está mi voz. Fan de "los Medina" ni fui ni me considero, pero un concierto de ruido al lado de casa había que disfrutarlo. El álbum se grabó un 30 de junio de 1990 en el anfiteatro Egáleo de Leganés, Madrid, escenario al aire libre mítico aquellos años; allí vi también a Panzer, Burning, Sangre Azul y alguno más. Por cierto, a la banda la presentó aquella noche José Carlos Molina (...

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero ...

Los Relámpagos – Nit de llampecs (Novola-1965)

Y tras el hiato estival y la visita de Hetfield & co . de hace quince días, hoy toca reseña de la serie “ Los singles de mami ” en la que, como ya sabéis los habituales, aúno mi amor a la música en formato vinílico con el recuerdo a mi madre –fallecida hace poco más de un año– y a su gusto por la música pop de su juventud. Los protagonistas de hoy son Los Relámpagos , un grupo de rock instrumental que –como muchas bandas e intérpretes en aquella época– surgieron a raíz de un concurso musical en el que coincidieron José Luis Armenteros (guitarra), Pablo Herrero (órgano), Ricardo López Fuster (batería) y los hermanos Ignacio y Juan José Sánchez-Campins (guitarra y bajo, respectivamente). Los cinco darían forma a Dick y los relámpagos , que no tardaron en perder de su nombre a Dick , fuese quien fuese el tipo.    En 1962 comienzan a tocar en un club a cambio de vales de consumición y propinas y dedican los domin...