Ir al contenido principal

Windir – Likferd (Head not found-2003)


Como ya os conté en mi última entrada, en mi viaje a Oslo y Estocolmo mi intención era adquirir a modo de souvenir algunos vinilos de bandas de black metal de la zona y le tenía el ojo echado a los noruegos Windir. Pese a no ser una de las bandas más conocidas del país –al menos para mi–, había escuchado su álbum 1184 que me había parecido soberbio. Así pues, estando en Oslo era obligado visitar Neseblod Records, una tienda que es el Valhalla del black metal. Y es que su nombre a principios de los 90 era Helvete, sí amigos, la tienda fundada por Euronymous en cuyo sótano se reunían los miembros del infame Inner Circle. El local es pequeño, angosto, oscuro y el calor húmedo era ese día insoportable. Para más inri, los miles de vinilos (y cedés, camisetas, deuvedés... qué sé yo) que atesora están bastante desorganizados, por grupos pero sin orden alfabético, en cubetas unas debajo de otras, en fin, un desastre. Pedí ayuda a la dependienta –muy amable, ciertamente– pero, aunque me dijo que creía que sí tenía algo de los Windir, fue incapaz de encontrar sus discos. Por otro lado, yo ya estaba sudando como un cerdo. Total, que ni bajé al sótano de la tienda, lugar de peregrinaje entre los blackmetaleros de pro, y salí de allí desmayado y decepcionado. 
 

Por suerte, en la misma tienda del Gamla Stan de Estocolmo donde compré el vinilo de Dark Funeral, pude encontrar el álbum que os traigo hoy. Sin embargo no se trata del mencionado 1184 sino de una reedición de 2021 limitada a 800 copias del sello Season of mist de su cuarta y última obra, Likferd. Y al igual que en mi entrada anterior, también toca presentar al grupo al no haber pasado nunca por este blog. 
 

Windir era el proyecto de Terje Bakken, que adoptó el nombre artístico de Valfar. Multiinstrumentista, en 1997 grabó su estupendo debut Soknardair cantado en sognamaol –un dialecto del noruego– ocupándose de las voces, la guitarra, el bajo, el acordeón... todos los instrumentos excepto la batería, lo mismo que en su segunda obra. Sin embargo, en su tercer disco –ese fabuloso 1184 que os he mencionado antes y os recomiendo desde aquí– se acompañó de los miembros de la banda Ulcus y dio forma a un grupo de verdad, alternando además su lengua con el inglés. Y es en 2003 que graban este Likferd que hoy os presento, que no tiene nada que envidiar a su predecesor y cuyo line up estaba compuesto por Valfard a las voces e instrumentos varios, Hvàll (Jarle Kvale) al bajo, Steingrim (Jorn Holen) a la batería, Strom (Stian Bakketeig) y Sture Dingsoyr a las guitarras y Righ (Gaute Refsnes) a los sintetizadores. 
 

Grabado con Valfar, Hvàll y Stengrim a la producción junto a Stig Ese y Thorbjorn Akkerhaugen en el estudio de grabación de este último y con una portada reproduciendo la obra Likferd på Sognefjorden de los pintores románticos noruegos Adolph Tidemand y Hans Fredrik Gude, el track list de esta reedición es: 
 
A 
Resurrection of the wild 
Maertyrium 
 

B
 
Despot 
Blodssvik 
 

C
 
Fagning 
On the mountain of goats 
 
D 
Dauden 
Aetti morkna 
 

Resurrection of the wild abre el álbum con un inicio sosegado que no tarda en verse interrumpido por la voz desesperada de Valfar que se acompaña de numerosos cambios de ritmo en los que los riffs enérgicos y un bajo con mucha presencia son arropados por los sintetizadores de Righ. Le sigue Maertyrium, que no engaña y ya comienza con una batería desbocada aunque rapidamente se introducen sonidos medievales que otorgan a la composición ese sello distintivo Windir. Despot también se inicia con rapidez aunque a mitad del tema ofrece un descanso con una bajada de velocidad, que no de fuerza. Y después de diversos cambios de ritmo y riffs incluso jebimetaleros, el tema se vuelve a acelerar hasta un final algo súbito antes de que Blodssvik ponga fin al primer disco de este doble vinilo con otro perfecto ejemplo de folk metal oscuro con pasajes de sintetizadores, diferentes velocidades y riffs gruesos. 
 

La cara C se inaugura con Fagning, que con sus 8 minutos y medio es la más extensa del álbum y que se inicia con una batería enloquecida y un alarido desgarrador que de pronto sufre un cambio de ritmo con la llegada de un sintetizador antes de que un riff grueso sirva de preámbulo a las voces de Valfar, arropadas por un punteo de guitarra que se va repitiendo a lo largo de la canción. Coros, más y más cambios de ritmo... en fin, un temazo complejo y variado. On the mountain of goats tiene un comienzo muy extremo que de pronto se interrumpe por un riff de heavy metal que rapidamente se transforma en un nuevo exponente de black metal puro aunque los continuos frenazos y cambios de ritmo enriquecen el tema de manera muy interesante, sobre todo para un oyente como este que os escribe que disfruta con numerosas bandas del género sin ser para nada un gran entendido o conocedor del mismo. Y la última cara se inicia con Dauden, que a estas alturas es más de lo mismo en cuanto a esa mezcla alucinante de sonidos de ultratumba, sintetizadores épicos, riffs impresionantes –en ocasiones con un bajo desnudo apenas cubierto con melodía de sintetizador– y coros tenebrosos. Aetti morkna pone el punto final a esta obra de manera impresionante con una nueva colección de melodías épicas, cambios de ritmo y voces desgarradoras. 
 

En resumen, un pedazo de álbum lleno de matices y más que notable instrumentalmente, un disco para degustar atentamente, concentrados, en posición horizontal y en total oscuridad que muestra el nivel que Windir alcanzaron hace casi veinte años. 
 

Sin embargo, con la banda acariciando el éxito –pese a haberse mantenido siempre alejados de la carismática pero controvertida escena del inner circle– y cuando Valfar contaba con tan solo 25 años de edad, una tormenta de nieve le soprendió en un paseo por la montaña y falleció de hipotermia. De esta forma, aunque sin ser violenta, una defunción prematura era de nuevo la culpable de acabar con el futuro de uno de los músicos de un género fuertemente relacionado con la oscuridad, el frío y la muerte. 
 






Y eso es todo un día más. Aquellos que os sintáis con ganas, disponeos a disfrutar de un muy buen álbum de black metal que tiene un sonido diferente al de las puras cabalgadas de blast beats y riffs infernales de otras bandas del género. 
 
¡Feliz viernes!
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Bueno, yo catalogaría de violenta la muerte por congelación, la verdad, por agónica e imprevista. Excelente presentación de la banda. Están sonando las canciones mientras leo y escribo y me gustan, más la parte instrumental que la vocal, eso debo reconocerlo. Fagning, que justamente está terminando ahora, es fantástica. Al final vas a conseguir que me aficione a estos brutotes sonidos. Qué curioso ir a un sitio "mítico" de nuestro rollo, aunque la experiencia no fuera muy alentadora. Preciosa edición. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues me alegro de que te atrapen estas melodías como lo han hecho conmigo. La parte vocal es ferragosa pero si al final la tomas como un instrumento más, encaja perfectamente en el ambiente angustioso y oscuro de la obra. Windir me han parecido estupendos y mucho más porque los descubrí poco antes de viajar a Oslo. Un abrazo y feliz semana.

      Eliminar
  2. Como he comentado otras veces, a mí el género me gusta a dosis controladas. Leyendo la entrada y a Manu me he ido directamente a Fagning y me he animado a escuchar el resto. Buena aportación majestad. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues me alegro de que alguna de las canciones te guste. A mi tambiñen me encanta ese final con Aetti Morkna. La verdad es que, sin haber oído nunca hablar de ellos, me enamoraron en la primera escucha. Lástima del final de Valfar. Saludos.

      Eliminar
  3. Ante las buenas palabras de mis compañeros, me puedo primero el Fagning. Luego el Despot. Me he venido arriba y me he tatuado un pentáculo y he sacrificado a mi vecino como ofrenda a los dioses nórdicos para que hoy el Madrid ganara la Supercopa al Barça. Luego me he arrancado los oídos para no seguir oyendo esas voces que me invitaban a hacer correr sangre...
    Ahora en serio, el Fagning entero y el Despot a la mitad. Soy un blandengue un no he podido seguir. Algún día ..

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajajajaja... qué cafre eres, blandengue. Y qué poco aguante. Yo me escucho todos los vuestros hasta el final. Nunca se sabe cuando puede aparecer una tonada que contra todo pronóstico nos haga tilín.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Liar - Set the world on fire (Bearsville Records, 1978)

  Hoy os voy a contar la pequeña historia de una pequeña banda que pudo reinar hace muchos, muchos años en un reino junto al mar, pero que acabó siendo tan conocida como cualquier otra banda de null-hit-wonder. Aunque, en su caso, los malvados genios de la industria musical deben recibir la culpa de su fracaso y olvido, pues su música está a la altura de la leyenda que quisieron alcanzar. Liar se formó en una pequeña ciudad inglesa llamada Maidenhead comandada por el jovencísimo bajista Dave Taylor. Corría el año 75 y el picor roquero gemía por sus venas. Con el baterista Clive Brooks, el guitarrista Paul Travis y Dave Burton a la voz grabaron un iniciático Straight from the hip dos años después. Tras el fichaje de Steve Mann se embarcaron en una intensa gira con Slade por Europa que completaron con un curioso periplo de tres semanas por la Hungría comunista de la mano de Piramis (banda local). De vuelta a casa, su mánager les consiguió un contrato con la pequeña Bearsville Rec...

Ghost – Skeletá (Loma Vista, 2025)

Debo deciros que Ghost son la única banda actual –es decir, nacida bien entrado el siglo XXI y aún en activo– de la que me compro casi todos los álbumes que edita. La satisfacción que me transmiten su sonido, melodías y concepto se mantiene con cada obra y opino que con cada nuevo lanzamiento han superado al anterior. Hasta ahora... o quizás también. Me explico. Cuando escuché este Skeletá por primera vez no tuve la sensación habitual de que la banda había escalado un peldaño más en calidad desde el disco anterior. Es lo malo de acostumbrarse a recibir dosis cada vez mas altas de genialidad y creatividad. Sin embargo, cada vez me gusta más, es uno de esos discos no tan inmediatos que ganan con cada escucha. Y es que las composiciones de Tobias Forge están llenas de matices diversos y pese a que los puristas del metal acusan a la banda de ser poco menos que ABBA con máscaras, lo que es innegable es que las raíc...

Black N Blue-Nasty Nasty (Geffen 1986)

 ...y en estas llegó "Nasty Nasty".  La banda buscó con el segundo "Without Love " superar las 150 mil copias estimadas de su debut y lograr el Disco de Oro, pero la orientación excesivamente melódica de aquellas " Miss Mistery", "Stop the Lightning "... incrustadas en la continuación de las robustas "Autoblast" o "Hold on to 18 " terminaron por confundir a unos seguidores que veían más a unos Honeymoon Suite  en aquellos Black N Blue del 85.  El tercero en discordia trataba de recuperar la potencia del debut sin despojar del todo las melodías Glam poperas del disco producido por Bruce Fairbairn. Para ello encomendaron a Gene Simmons esa labor, y si bien es cierto que las ventas siguieron estancadas (se estima que no superaron las cien mil copias) las canciones merecían y mucho la pena.  El álbum abría con el tema título, un Sleazy Metal con lapo incluido de St James  al comienzo del riff de guitarra que vacilaba cosa mala. ...

FLESHGOD APOCALYPSE - OPERA (NUCLEAR BLAST, 2024)

  Hay discos buenos y hay discos malos. Algunos que escuchas hasta la saciedad, por que son realmente buenos. Pero hay discos que literalmente, te cambian la vida. A mi me pasó con el Opera de Fleshgod Apocalypse . No por que musicalmente sea excelente, que lo es, si no por la historia que hay detrás. Hablar de este disco es hablar del accidente que sufrió su vocalista y líder, Francesco Paoli . Estando de escalada uno de los anclajes falló y sufrió una caída de varios metros. Quedó colgado bocabajo, con un brazo reventado y desangrándose durante horas hasta que los equipos de rescate pudieron acceder a la zona. Casi pierde la vida primero y el brazo después. Este incidente inspira la mayor parte de las canciones de la obra. El disco abre con Ode to Art (De´ Sepolcri) , una introducción operística en la que luce la voz lírica de Veronica Bordacchini acompañando la melodía de piano y violines. I Can Never Die es un canto al arte, a como una persona puede dejar este mundo...

Sopa de Cabra - Ben Endins (1991, Salseta Discos)

      ¡Bona nit, malparits! Así comienza Gerard Quintana un directo clásico, dicen que el disco de rock en catalán más vendido. Yo descubrí a Sopa de Cabra viendo aquel maravilloso programa de música que emitían en la segunda cadena de TVE y que provenía del canal autonómico catalán, llamado Plastic . Por si no os acordáis, a Plastic iba a parar la buena música que no podía emitirse en la primera cadena, la música menos comercial, más transgresora, más moderna. Y claro, un grupo que cantaba en catalán era complicado que saliese en algún programa de la parrilla de la primera de TVE. Me parecieron un grupo rockero que sonaba bien para no ser ingleses. Siempre mostré interés por ellos, pero nunca llegué a comprarme un disco suyo. Por eso, cuando a principios de año me encontré este doble vinilo en una cubeta de discos de segunda mano, a un precio de derribo, me lo traje conmigo. Y oye, que no me arrepiento para nada. Gran sonido, muy divertido y entretenido y una m...