Ir al contenido principal

Blue Öyster Cult - The revölution by night (Columbia, 1983)

 



Otro de esos discos denostado y devastado por la crítica de la época y por las orejas más afiladas y las más finas de la crítica rocanrolera, dura y blanda, y no puedo estar más en desacuerdo. Me atrevo a afirmar que este noveno disco de estudio de la banda neoyorquina abunda en calidad y se puede encuadrar entre lo más destacado de su prolífica discografía. Si no conocéis al grupo, cualquier disco es de escucha más que recomendada.

La banda sobrevivió en sus primeros años a base de canciones robustas y gruesas que les granjearon fama sin fortuna. Tras tres discos de estudio y un fantástico directo decidieron girar el volante para buscar ese impulso comercial. Grabaron su inmortal single (Don't fear) the reaper para el álbum Agents of fortune (1976), siguieron vendiendo bien con Godzilla (Spectres, 1977). Situados en primera línea, con un disco de platino y otro de oro en el mercado yanqui, intentan engancharse a las modas sonoras de finales de década. Fichan a Tom Werman (Chip Treak, Ted Nudgent, posteriormente Mötley Crüe y otras estrellas de los ochenta) para Mirror (1979) con poco éxito. Cambian de palo hacia un sonido más rudo con la producción del por entonces gurú Martin Birch (Cultosauros Erectus, 1980, y Fire of unknown origin, 1981). Las ventas se habían estancado, aunque los conciertos no faltaban. Tras un tercer directo, saltan al ruedo de nuevo con este The revölution by night. Deciden apostar por un productor joven que está teniendo éxito en Canadá y Estados Unidos con Loverboy (Get lucky consiguió despachar 4 millones de copias desde su salida en 1981). Ese tipo se llamaba Bruce Fairbairn. Y es curioso, porque Jon Bon Jovi afirma que al escuchar este álbum disfrutó tanto con el sonido que quería a Bruce para su banda; se unieron pocos años después y grabaron Slippery when whet (1986), convirtiendo a Fairbairn en el chico de moda: Aerosmith, AC/DC, Scorpions, Poison. El rey Midas de finales de década.

De manera intencional, los cerebros compositivos de Blue Öyster Cult querían dar a sus canciones un sonido más amable para las radios de la época, donde el rock de REO Speedwagon, Journey, Y&T y demás estrellas del AOR triunfaba. Y, en ese sentido, acertaron de lleno. Las canciones suenan amables, sin perder el trasfondo hard rock, con protagonismo de las melodías, los arreglos sencillos insuflados de pop y sintetizadores (bienvenido a los ochenta) y buenos estribillos. Pero también tiene excelentes solos de guitarra y algunos cambios rítmicos y partes vocales más turbias. Y, sobre todo, fantásticas canciones.  

La banda entró en el estudio sin uno de sus fundadores, el cantante-batería-compositor Albert Bouchard. Su puesto con las baquetas lo ocupó Rick Downey. El resto de la banda seguían siendo Eric Bloom (guitarra y voz), Joe Bouchard (bajo, guitarras, vocoder y voz), Allen Lanier (sintes y pianos) y Donald Roeser (guitarrista principal, teclas varias y voz). Para la composición se ayudaron de unos amiguetes: Aldo Nova, Ian Hunter, Patty Smith, Greg Winter y un largo etcétera.

Abre la cara A el riff magnífico de Take me away: "I lift my eyes and say/come on, take me away". Juegan con sus historias de ciencia ficción y mundos mágicos y la pérdida de esperanza: venid a por mí. Buen estribillo, con un arreglo espacial antes del solo de Roeser y Aldo Nova, asalvajado. Sigue Eyes on fire, con un comienzo de piano nos adentramos en ese sonido más amable y popero del álbum, en una canción típica del rock de radiofórmula de aquellos años (incluso me suenan más a Survivor); parece de banda sonora. Me gusta cómo cambian de tono tras el segundo estribillo para dar paso a una parte instrumental melódica breve y volver al estribillo. Un single que no funcionó. Shooting shark, la canción más larga, compuesta con Patti Smith, extiende ese sonido dando algo de protagonismo a la pareja rítmica abrazando una estructura progresiva, pero sin salirse de los estándares melódicos, consiguiendo un aire Phil Collins/Genesis al conjunto. Una canción de amor desesperado: "sick of hauling your love around/want to run the train alone/but the engine tracks straight throug your heart/and weighs me like a stone". Buen adorno del saxo de Marc Baum y ojito a la guitarra. Cierra esta cara A un corte algo más complejo y rápido, Veins, con buenos guitarrazos mezclados con el sinte, muy al estilo Gamma, por ejemplo, para darnos un estribillo pegadizo (aunque falto de fuerzo, unos buenos coros ahí lo hubieran petado) y épico final. 

Girando el disco suena otra de mis favoritas, Shadow of California, con cambios de ritmo, adornos vocales y guitarreros por doquier, anunciando la revolución que con la oscuridad vendrá a nuestra ciudad: "revolution by night/in this future/kings of the shadow/on the highway of night". Roeser se curra otro buen trabajo. Con misterio empieza Feel the thunder: voces lejanas, susurros, para crecer con fiereza y dramatismo contando la historia de tres moteros que se estrellaron "en su carretera favorita" hinchados de alcohol y cocaína, su "último viaje", del que vuelven una vez al año: "now you can hear them every Hallows Eve/forever doomed to ride". Gloriosa. Simple y directa, contrasta Let go, compuesta con Ian Hunter, roquera, bacilona, con un piano muy sixties y un rollo fiestero, incluyendo su simple estribillo para gritar con unas cervezas de más en honor a la banda ("you can be whatever you want to be/you got the power, we got the key/yeah, B.O.C."). Tras la fiesta, sigue el acelerón de Dragon Lady y su emocionante estructura en la que se intercalan pasajes guitarreros con la historia de amor a esa dama misteriosa que nos arrebata el corazón (quizá, según se entienda la letra, literalmente). La única canción que canta Bouchard, Light years of love, es otra historia de amor, esta más clásica, en formato balada, algo pegajosa, bien arreglada, con unas acústicas acompañando pianos y sintes (el propio Bouchard se marca un pequeño solo de guitarra española). Un cierre melancólico.

Y a darle la vuelta al vinilo y ponerse de nuevo a ello. Una banda que faltaba por aquí y de la que, espero, poder traer algún otro título en el futuro. Larga vida a la ostra azul: acercaos a los que les rendimos culto.

El workart corresponde a John Berg con ilustraciones de Greg Scott. Si bien la portada, inspirada por Feel the thunder, resulta algo extraña, la contraportada me flipa. El símbolo de "los Cult" mezclado con el rollo egipcio da de pleno en mi clavo.

Buen fin de semana.















Comentarios

  1. Ah, pues si faltaba, bienhallada sea. Otra pa la saca.

    Eso sí, en efecto es un soft pop rock melódico radiable con sintetizadores y baterías electrónicas por doquier que gracias a las pinceladas guitarreras no pierde del todo el vínculo de la banda con su pasado.

    Agradable y entretenido, aunque se entiende que sea vilipendiado por los acérrimos de la primera étapa del grupo. Por cierto, en una de mis tiendas vinílicas de cabecera estaba hasta hace unos meses el On Your Feet or on Your Knees en su edición japonesa (segunda mano y sin el obi ni nada) a un prohibitivo precio de 40 euracos. Cada vez que paso por allí lo manoseo y escucho la voz del ángel infernal que llevo sobre mi hombro izquierdo... aunque luego hago caso de las palabrás del querubín a mi derecha y lo dejo de nuevo en la cubeta. Supongo que le pasa a muchos porque –ignoro si aún sigue allí, hace un tiempo que no la visito– los años pasan y yo he seguido con el ritual jejeje.

    En fin, feliz fin de semana y suerte en el inicio de la etapa postvacacional.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La mayoría de los vinilos de BOC tienen un precio "por encima de la media". Por un lado, no se han reeditado o lo han hecho solo algunos de su catálogo. Y, por otro, tampoco vendieron tantos discos como otras reinonas del género. Has definido muy bien el disco: sonido "pronto-ochentero" para orejas amables, con algún susto de vez en cuando. Pero a mí me gusta, vaya. Abrazos.

      Eliminar
  2. Super ochentero, con saxos y todo. Quizás perdieron un poco de su identidad, no? Pero no me parece mala escucha, sobre todo para alguien como yo que no tiene en mente su pasado, más allá que alguna canción suelta como el Dont feel The reaper

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Cambiaron, como muchas bandas, para adaptarse al mercado. Lo de la identidad, no sé bien, porque pasaron por numerosos cambios de estilo, productor, sonido, en fin. Es de escucha fácil y digestión rápida, en efecto, esclavo del año en que se grabó. Un abrazo.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Eagles - Their greatest hits 1971-1975 (1976, Asylum Records)

    Tenía pensadas varias entradas en el blog para este verano, discos sin pretensiones, refrescantes, fáciles y entretenidos de relatar y escuchar. Pero, como siempre, la procrastinación ha hecho mella en mí y no ha habido manera de terminar ningún texto de forma aceptable según mis criterios. Por tanto, voy a tirar de un comodín y traeros un disco y un grupo del que hay que hablar poco porque ya está todo dicho y poco vamos a aportar nuevo. Así que, como hice cuando traje el Hotel California , pido perdón si ya conocíais algo de lo que viene a continuación, pero es imposible no repetir lo dicho mil veces con ciertos discos y artistas. Empezamos con la banda, su primera historia y tal. Estamos hablando de un disco recopilatorio que abarca los cuatro primeros trabajos de los Eagles , justo antes del Hotel California . Venga, los Eagles se formaron en L.A. allá por 1971. Los miembros fundadores fueron Glenn Frey (guitarra y voz), Don Henley (batería y voz), Bernie Lea...

Black Sabbath - Paranoid (Vertigo Records, 1970)

  Siempre huyo de homenajes interesados y ocasionales. También de loar por aquí discos de esos que consideramos cinco estrellas (vaya: discarrales). Pero, por una vez, he decidido saltarme ambas normas. El “fin de una Era”, como se ha intentado magnificar el (posiblemente) último concierto de los Black Sabbath “originales”, bien merecía que añadiéramos al blog alguno de esos álbumes que, acertadamente, Henry Rollins significó con su frase: “en esta vida, solo puedes confiar en ti mismo y en los seis primeros discos de Black Sabbath”. Y aquí estamos, metiendo leña para quemar al mono. Segundo largo del cuarteto de Birmingham, se grabó en junio de 1970 y fue editado en septiembre de ese mismo año, sin tiempo a pensar. Loado hasta la saciedad, se le considera piedra angular del desarrollo del heavy metal y casi cualquier otro estilo cercano. Aún hoy es su obra más vendida.  Fue el más representado en el famoso homenaje. Los propios Sabbath interpretaron tres canciones aquí presen...

Rainbow - Ritchie Blackmore’s Rainbow (Polydor, 1975)

Pues nada, que después de haberos hablado en varias ocasiones de Ronnie James Dio acompañado de diversos guitarristas ( Vivian Campbell , Rowan Robertson y Craig Goldy ) me faltaba traerlo como protagonista de un álbum con Ritchie Blackmore , quien propició su despegue en el mundo de la música. Como veis, la entrada de hoy es para el seminal Ritchie Blackmore’s Rainbow , el disco con el que el guitarrista comenzó una carrera al margen de Deep Purple y claramente –en mi opinión– el de menor calidad compositiva e instrumental, vamos, el que menos me emociona, de los tres que grabó con Dio . Y eso que el nivel es alto. Por cierto, inexplicablemente, ni el sublime Rising ni el maravilloso Long live Rock’n’ roll están en el blog. Que alguien recoja el testigo pero ya, por el amor de Dio .    Total, que vamos a hacer un poco de memoria antes de que me meta en harina. Por una parte tenemos ...

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Ratt- Dangerous But Worth The Risk "World Tour 1987" (Xerocks Records)

  Durante la era dorada del Glam Metal Ratt fueron una de las bandas que más se expusieron al público. Desde el mítico "Whisky a Go Go" hollywoodiense hasta el Roxy, pasando por el " Monsters of Rock " del 85, donde compartieron un 17 de agosto escenario con ZZ Top, Marillion, Bon Jovi, Metallica y Magnum .  Cientos de shows como teloneros en sus primeros momentos para Ozzy, Maiden o Twisted Sister , y otros tantos como cabezas de cartel con nombres que poco tiempo después les sobrepasarán en fama y ventas: Bon Jovi o Poison.  Estos últimos cuatro en-lacados precisamente serán los encargados de abrir buena parte de los conciertos de presentación de su tercer disco, el muy entretenido y potente " Dancing Undercover ", publicado en Agosto del 86 y que contó en algunas fechas con Cinderella también de apoyo.  Poison presentaban su debut, el fiestero " Look What the Cat Dragged in ", que a la postre terminaría vendiendo en los Estados Unidos más ...

Niágara - Now Or Never (Avispa & Killerwatt – 1988)

                              Hace un tiempo, diez años más concretamente, ¡cómo pasa el tiempo!, os recomendé  Backstage Girls , el segundo trabajo de  Niágara , una de las mejores bandas de hard rock  melódico  que ha surgido este país, pero lo hice no por no tener en su día primer LP,  Now Or Never  -ya sabéis que me gusta traer los primeros trabajos al presentaros una banda- sino porque estaba esperando conseguir su edición inglesa y así hacer un 2X1, falta que acabo de solventar hace unos meses.  Además, lo hago ahora, hoy, porque, se acaba de anunciar el rodaje, para estrenar en cines, de un documental que repasará la biografía de la banda bajo el título de “ Ahora o nunca. La verdadera historia de Niágara ”, dirigido por Sergio Guillén y a África Paredes, a través de la productora No Plan B Studio. Habrá que estar atentos a su estreno. La historia de los vinilos que hoy o...