Vengo a hablaros de un disco que, de una u otra manera,
cambió muchas cosas en la música. Y, de paso, traer a la comunidad del #FFVinilo unos de los grupos (artista)
imprescindibles en nuestra Europa y que aún no han aparecido en este blog: The
Waterboys (Mike Scott)
Realmente no sé muy bien cómo llegó a entrar en mi colección
de vinilos. Según mi hermano mayor, lo compró él, pero sólo le gustaba la
canción que titula el LP. Y me lo regaló. Lo que no me encaja de esta versión
es que mi hermano era muy heavy y en su colección sólo entraban discos de los Leppard, Priest, Diö y cosas así.
Pero que yo lo comprase, tampoco de cuadra. De hecho, a día de hoy, ni siquiera
sería mi disco preferido de Mike Scott
y los suyos. Aunque por aquel entonces yo sólo conocía a los Waterboys por “The Whole of the moon”: en casa teníamos la costumbre de grabar en
cintas VHS los videoclips que emitían en Tocata,
Rockopop, Plastic y programas por el estilo (estoy quedando muy viejuno). Y
ese video en concreto me encantaba. Por cierto, aún conservo esas cintas, aunque
en la era del youtube poco valor
tienen. Y me conformaba con ver ese clip y con tener esa canción en un vinilo
doble recopilatorio editado por Greenpeace,
llamado como su buque insignia, “Rainbow
Warriors”. Lo curioso de “Fisherman’s
blues” es que aún por el año 1988 no era tan común ni tan vendedora la
fusión de la música celta con el rock o el pop y que el sonido era raro o,
cuando menos, curioso. Y por eso digo que el LP cambió muchas cosas. No soy un gran
entendido ni tengo unos conocimientos históricos musicales para demostrarlo o
documentarlo así que me apoyo en conversaciones con algún músico y en mis
propias sensaciones y recuerdos para decir algo así.
Hasta entonces sólo nos sonaban dos bandas que llevaron la
fusión con el folk celta a las listas de ventas: Jethro Tull y The Pogues.
Uno en el ámbito del hard rock y otro en el punk. Bueno, en España teníamos la
versión nacional de Jethro Tull con Ñú. Pero su repercusión siempre era más
minoritaria. Y es cierto que uno de los grandes como Van Morrison también publicó ese mismo año un disco celta, el “Irish Heartbeat” con los Chieftains. Pero es que el LP de “Fisherman’s blues” aunque se publicó en
1988 comenzó a gestarse en 1985, en el anterior (y mi favorito) trabajo de Waterboys. En aquel “This is the sea”, Mike Scott invitó a tocar el violín en el tema “The Pan within” a Steve Wickham. De aquella colaboración, Steve pasó a formar parte de los Waterboys y comenzaron en el 86 las sesiones de grabación para el
disco. Incluso Mike Scott se mudó a Galway para estar más inmerso en la
cultura irlandesa. Bien, el tema es que se puso de moda esta música celta en
todo el mundo (en los siguientes años llegaron artistas como Sinead O’connor, Cranberries, Coors, Enya, Clannad, Dropkick Murphys,etc.). Y también en España. El mayor exponente, Celtas Cortos. Los Celtas publicaron su primer disco en el 89. Era completamente
instrumental. Sin embargo, el primer grupo pop/rock que edita un disco con este
tipo de música y con letras, es El
Mecánico del Swing también 89. Al igual que al hablar de Waterboys hablamos de Mike Scott, El Mecánico es Luis Farnox.
Pero eso es otra historia. Luego vinieron Magö
de Oz, Hevia, etc. Por cierto, en
el 2010 los Celtas Cortos hicieron
su versión de “El blues del pescador”.
El LP en sí tiene una portada con la foto del grupo en el
porche de una casa sobre un fondo verde irlandés y la contraportada un bucólica
paisaje, probablemente lo que se veía desde donde el grupo estaba sentado. Como
curiosidad, las canciones que acreditadas en la contraportada de la cara B no
son las mismas que las que aparecen en las etiquetas del vinilo: en el vinilo
vienen seis mientras que en la contraportada aparecen cinco. Pero es más, hay una canción extra que no aparece en ningún lado. El primer
corte es “Fisherman’s blues” que da
título al disco más vendido de Waterboys.
Un himno atemporal, que se radió hasta la saciedad y el tema más celta de toda
la cara A. “We will not be lovers”
es más complicada, y va más en su línea anterior, ese sonido que algunos llamaban
Big Sound. “Strange Boat” es una deliciosa balada. “World party” con su introducción a piano y guitarra suena muy Petty…o muy Waterboys. Pasan a versionear el clásico de Van Morrison “Sweet thing”
al que añaden al final versos del “Blackbird”
de los Beatles. Esta cara A fue grabada entre San
Francisco y Dublín durante los
años 86 y 87. La cara B, íntegramente de sesiones del 88, se grabó en Galway. Se nota que es mucho más folk.
Comienza con un medio tiempo que también fue single y tuvo bastante éxito llamado
“And a bang on the ear”, maravillosa
a mi gusto. Continúan con un homenaje al countryman Hank Williams en “Has
anybody here seen Hank?” En “When Will
We Be Married” nos cuentan la historia de Molly y Jimmy, con protagonismo
del violín pero también usando armónica. El poso country de las dos canciones
anteriores es aún más evidente en “When
Ye Go Away”. Seguimos con la instrumental, “Dunford’s Fancy” para casi terminar con “The Stolen Child” un poema
musicado del poeta irlandés W.B. Yeats. Y digo casi terminar porque al final de
todo, sin créditos, tocan un breve fragmento de “This land is your land” del idolatrado por Bob Bylan, Woody Guthrie.
En definitiva, creo que “Fisherman’s blues” es un disco de folk-rock que puso en órbita la
música celta. Pero que también trata otro tipo de folk, como el country. Que es
el disco más vendido de la historia de Waterboys
aunque no es el mejor. Y que demostraron que un grupo puede variar y hacer
música de muchos estilos sin perder la esencia y la calidad.
Por cierto, vuelven a España este verano, en Madrid en las Noches
del Botánico junto a Paul Carrack y
en Hoyos del Espino con el incombustible macarra de Rod Stewart.
A mi tampoco me encaja que con esos gustos lo comprase tu hermano. Sin embargo, los jebis somos como somos y a veces yo también me he prendado de melodías de otros estilos. El temita es agradable de escuchar, pero vamos, una vez y no más.
ResponderEliminarAh, y con lo de los VHS de Tocata y otros programas, me has llegado al alma. ¿Adivina quién hacía lo mismo y guarda en su armario cintas que nunca más verá, con incunables como los WASP en TVE?
Al menos has conseguido que escuche la canción con la que ilustras la entrada.
Saludos :)
Y discos de los Calis también tenía... La cinta donde estaban los temitas heavys (estaban separados de los demás) se la prestamos a un amigo que desapareció y la cinta con él. No quiero subir Lps heavies, que eso lo hacéis genial entre Paco, el señor rockologia y tú, y voy a quedar un poco mal. Así que, pongo mi granito de eclecticismo. Eso sí, el próximo intento espero capturarte más.
ResponderEliminarNunca me han llegado estos tipos, la verdad, aunque bien es cierto que nunca les he prestado atención. Así que me pongo de tarea escuchar esto y lo que se pegue al lado en el buscador, je, je. Eso de "señor Rockologia" me ha llegado al corazón. Un saludo.
ResponderEliminarVenga, Mr Rockología queda más guay. Saludos.
EliminarA mi me flipa Mike y este disco pero es cierto que el This is the sea es la caña. Para no saber mucho cuentas aquí muchas cosas
ResponderEliminarNo creas, Tina. Con vosotros me doy cuenta de que controlo muy poco de música. Así que intento contar sobre algo que tenga un poco más de información o algún recuerdo ligado para que parezca todo más profundo, jeje.
ResponderEliminarA mí me dejó este álbum (mi otro dealer de aquella) y no fue un grupo que me llegará a calar, posiblemente porque la música folk nunca me ha gustado, más allá de los éxitos comerciales que van más allá del propio estilo.
ResponderEliminarEso si me ha recordado a los Celtas Cortos y me he trasladado a la época de donde y como los escuchábamos.
Y por cierto, yo creo que sabes bastante de música. Muy buen artículo.
Épocas de juventud,jejeje
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