Ir al contenido principal

Exodus – Impact is imminent (1990)


Amigos, cuando una semana más me enfrentaba a la dura tarea de decidir qué vinilo debía protagonizar mi reseña del viernes, advertí que inexplicablemente no existía aun ninguna entrada en este blog dedicada a Exodus. Así que, sin dudarlo, hoy me dispongo a remediar tal injusticia. Sin embargo no os voy a hablar del seminal Bonded by blood, ni del genial Pleasures of the flesh. Ni siquiera os hablaré del Fabulous disaster –el otro de la banda que también poseo en vinilo-, no amigos, el protagonista de hoy es el poco valorado Impact is imminent. Pero antes, dejadme que os haga una breve introducción al grupo. 

Formados en 1980 por los guitarristas Kirk Hammett y Tim Agnello, el bajista Carlton Melson y el batería Tom Hunting, los Exodus sufren varios ajustes de formación que incluyen la entrada de Gary Holt a la guitarra y Paul Baloff a las voces, Rob McKillop al bajo y Rick Hunolt –reemplazando al fundador Hammett- a la guitarra. Tras su debut en Combat Records con Bonded by blood, Baloff deja el grupo y entra Steve Souza, con quien Exodus graban Pleasures of the flesh y Fabulous disaster. El éxito de la banda les lleva a fichar por Capitol Records y grabar –ya sin Hunting a las baquetas- este Impact is imminent con John Tempesta en la batería que hoy os estoy recomendando, un álbum del que prensa, fans e incluso el mismo grupo reniegan. 

Grabado en los Music Grinder y en los Record Two Mendocino studios por Csaba Petocz, mezclado por Marc Senesac y producido por The H-Team (que no son otros que Hunolt y Holt), con una –como siempre- estupenda portada de Stan Watts y un diseño que incluía las letras de los temas en la contraportada, en 1990 Exodus pone en las tiendas un álbum cuyo track list era: 

A 
Impact is imminent 
A.W.O.L. 
The lunatic parade 
Within the walls of chaos 
Objection overruled 

B 
Only death decides 
Heads they win (tails you lose) 
Changing the guard 
Thrash under pressure 

Quién sabe, a lo mejor los dos guitarristas fueron los culpables de que el sonido del álbum no resultase del agrado de nadie -comenzando por ellos mismos- o quizás fue demérito de Senesac, pero lo cierto es que Impact is imminent no quedó como esperaba el grupo ni vendió lo que Capitol pretendía. También debe tenerse en cuenta que ese año sus compañeros de sello Megadeth editaron el mítico Rust in peace, lo que no debió ayudar precisamente a los recién llegados a recibir demasiado apoyo del sello. Sin embargo os soy sincero cuando os digo que a mi este disco me parece estupendo. 


Tiene un inicio potentísimo con Impact is imminent en el que –como en el resto del álbum- tiene un gran protagonimo la pegada de Tempesta a las baquetas. Sin embargo, las voces de Souza están –a lo mejor es una apreciación subjetiva- como metidas con calzador entre la melodía, sin acabar de encajar al 100%, al igual que ese solo distorsionado y poco trabajado. Después la cosa mejora con A.W.O.L. que te obliga a mover la cabeza arriba y abajo con solo escuchar las primeras notas y es sin duda una canción que encuentro más redonda que la anterior. Sigue The lunatic parade, otro estupendo tema en el que se luce el batería. Y entonces nos encontramos con Within the walls of chaos, un trallazo, el mejor tema del álbum en mi humilde opinión, un muro sónico con un ritmo que te obliga a saltar por el comedor de casa. Ni yoga, ni aerobic, ni hostias... lo mejor para quemar calorías es dejarse llevar por álbumes como este y botar como un poseso sudando la gota gorda. La cara finaliza con Objection overruled, otra andanada típica de los de San Francisco, machacona y pure thrash hasta las trancas aunque acabe un poco a lo coitus interruptus

La cara B comienza con Only death decides, más de lo mismo en lo que respecta a canción enérgica, machacona y quemagrasas, bang your head and horns up! Con Heads they win (tails you lose) seguimos disfrutando de esos inicios de tema con bombo atronador, el bajo creando un muro y las guitarras gruesas recubriéndolo todo de argamasa sónica hasta que entra la voz de Zetro y nos regala otra estupenda canción con un final alucinante. Changing the guard es otro tema apisonadora style en el que Tempesta se deja la piel. El fin del álbum llega con Thrash under pressure, el que quizás sea el tema más básico del disco en cuanto a ritmo y melodías vocales pero que –si bien no sería el que hubiese escogido para despedirlo- no desmerece en absoluto la fuerza y la rabia metalera que impregna todo el álbum. 


En fin amigos del vinilo, permitid que esta entrada sirva para romper una lanza a favor de esta obra vilipendiada e infravalorada que a mi me parece muy recomendable. Y para muestra, todos los botones de la camisa. Os adjunto el enlace a la grabación completa para que podáis disfrutarla. 


¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Me encantan estos vinilos, las portadas y la estetica de los tios, las fotos, la verdad es que el disco no lo conozco aunque me suena la portada y el nombre, son pequeñas joyas.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La estética es de thrashers ochenteros... aunque pintas como la de Hunolt son más de alguien alucinando en otro plano mental jajajaja

      Eliminar
  2. Pues nunca he escuchado este de Exodus, me quedo con los "famosos". Pero le pongo remedio ahora mismo. Como dice Addison, da gusto ver, manosear, oler y pinchar estas joyitas. Abrazos.

    ResponderEliminar
  3. Eres un crak King, todos reniegan de este disco y vas tú y lo recomiendas. Pues si vd lo dice no se hable más. Estoy con AdW me encanta la estética de Exodus. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Así es, hasta ellos reniegan de él. Pero supongo que es porque el resultado no es el que tenían en mente. Visto desde la distancia emocional, a mi me parece muy recomendable.Saludos.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Extremoduro - Yo, minoría absoluta (DRO, 2002/2014)

  Cuando una banda de rock alcanza el éxito tiende a repetir la fórmula o a dejarse domar por los sonidos que le imponga la discográfica. En el caso de Roberto Iniesta, el Robe, alma, cerebro, venas y corazón de Extremoduro, el éxito le pilló preparado. "La masa es imbécil. Si sales en la tele puedes hacer un libro, un disco o lo que se te ponga en la punta del nabo. A mí eso no me interesa ni vender más discos ni que me conozca más gente. Como estoy ahora estoy bien, pudiendo organizar una gira y no tener que decir «no puedo dejar de tocar en noviembre porque no tengo un puto gil», así me vale". Y continuó haciendo lo que le dio la gana después del éxito de Agila (1996): editaron el directo Iros todos a tomar por culo (1998) y el controvertido Canciones prohibidas (1999), donde daban rienda suelta a su creatividad, con éxito y críticas reguleras.  Y se tomaron un descanso. "Creo que cuando siguen haciendo cosas buenas y nuevas los grupos funcionan, aunque estén dos o...

Ramoncín - Al límite vivo y salvaje (1990, BMG)

Aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid y que este sábado tengo una Cita con mi chica para irnos de concierto a ver y escuchar al señor José Ramón Márquez , os traigo uno de los directos más importantes del rock español. Muchos denostan y menosprecian la figura e impronta de Ramoncín en nuestro rock patrio por su época de adalid de los derechos de autor a la cabeza de la infame SGAE, por su etapa de tertuliano y protagonista del papel cuché e, incluso, por su largo periplo como presentador de un concurso de televisión (mis amigas se pegaban por ir de público para verlo, todo hay que decirlo). Bien, pues no saben separar el polvo de la paja. Yo paso de todo aquello, y me quedo con la música que es lo que todos aquí amamos. Me voy a quitar desde el principio la parte técnica e histórica. Grabado en el 90 durante unos recitales en los que no presentaba ningún disco nuevo lo que le quitaba un poco de presión. Luego nos enteramos de que eran una despedida: en aquel m...

Medina Azahara - En directo (Avispa, 1990)

  Ya lo he escrito en este blog: a veces no escucho música, escucho recuerdos. Las canciones se pegan a los momentos en los que vivimos y al volver a ellas es inevitable revisar las imágenes y las emociones que las acompañaron. En otras ocasiones, uno se siente hasta protagonista, como si el músico las hubiera compuesto para nosotros, pensando en "eso" que nos sucede. Y en otras, literalmente, sin tocar ningún instrumento, somos esa canción. Esto último sucede con este Medina Azahara en directo : yo estuve en ese concierto, por lo que, de algún modo, cuando escucho el disco, ahí al fondo, está mi voz. Fan de "los Medina" ni fui ni me considero, pero un concierto de ruido al lado de casa había que disfrutarlo. El álbum se grabó un 30 de junio de 1990 en el anfiteatro Egáleo de Leganés, Madrid, escenario al aire libre mítico aquellos años; allí vi también a Panzer, Burning, Sangre Azul y alguno más. Por cierto, a la banda la presentó aquella noche José Carlos Molina (...

Judas Priest – Killing machine (CBS, 1978)

Amigos, mi colección de vinilos no es infinita y –si le sumamos que muchos han sido ya reseñados por otros colaboradores de este blog–, después de todos estos años se me están acabando los discos con los que doy contenido a mis entradas. Así que llega un momento en el que uno tiene que ir tirando de fondo de colección y rezar por que a nadie se le haya ocurrido hablar de alguno de los álbumes que aún no os he traído. Por eso, no importa que ya os haya hablado en varias ocasiones de los Judas Priest –creo que soy el que más vinilos ha comentado por aquí– y hoy me saco de la manga otra de sus imprescindibles obras, este Killing machine , quinto lanzamiento en estudio de la segunda banda más famosa del área de Birmingham. Creo recordar que el primero que me compré de ellos fue el Defenders of the faith ( aquí ), luego el Screaming for vengeance ( aquí ) y después ya me pierdo, no sé si fue el recopilatorio Hero, Hero ...

Los Relámpagos – Nit de llampecs (Novola-1965)

Y tras el hiato estival y la visita de Hetfield & co . de hace quince días, hoy toca reseña de la serie “ Los singles de mami ” en la que, como ya sabéis los habituales, aúno mi amor a la música en formato vinílico con el recuerdo a mi madre –fallecida hace poco más de un año– y a su gusto por la música pop de su juventud. Los protagonistas de hoy son Los Relámpagos , un grupo de rock instrumental que –como muchas bandas e intérpretes en aquella época– surgieron a raíz de un concurso musical en el que coincidieron José Luis Armenteros (guitarra), Pablo Herrero (órgano), Ricardo López Fuster (batería) y los hermanos Ignacio y Juan José Sánchez-Campins (guitarra y bajo, respectivamente). Los cinco darían forma a Dick y los relámpagos , que no tardaron en perder de su nombre a Dick , fuese quien fuese el tipo.    En 1962 comienzan a tocar en un club a cambio de vales de consumición y propinas y dedican los domin...