Cráneo - VI Festival Rock Villa de Madrid (1983 – Concejalía de la Juventud del Ayuntamiento de Madrid)
En los ochenta ganar el prestigioso Villa era sinónimo de promoción, entrevistas en medios, actuaciones y, sobre todo, del esperado debut discográfico. De entrada, se grababa un split con las bandas finalistas. Pero en algunas ocasiones, por hache o por be, cuando tienes el viento a favor, las cosas se van torciendo y cuando otros ya han partido tu te quedas en tierra.
Ese fue, hace treinta años, el caso de Cráneo. Una buena banda hardroquera formada por cuatro chavales del madrileño barrio del Pilar: José María Sánchez Colaso (voz), Manolo Maestre (guitarra), Antonio Pérez (bajo) y Nacho Blanco (batería), que, en la calurosa tarde (había una de las mediáticas ola de calor) del día 18 de junio de 1983 ganaban la sexta edición del Villa, quedando por delante de Números Rojo e Inkilinos del Quinto, dos bandas pop con propuestas gótica y funki, respectivamente (no sería hasta la séptima edición cuando se dividió el certamen en dos categorías Rock Duro y Pop-Rock).
El premio, trescientas mil pelas y tres cortes en la cara A: “Entre las rejas”, “Estela azul” y “Un plástico más”, de un vinilo compartido que fue grabado en los estudios Doubleutronics de Madrid.
Tras este disco, y como adelanto a un fututo LP, Carlos de Castro les produjo un maxi con los temas “Niños desarraigados” y “Marcado por el Rock and Roll”, que para sorpresa del personal nunca llegó a editarse. Tras este chasco, cada uno por su lado. Parte de la banda ingresó en los Burning y el resto formaron la banda de Azuzena… Hasta que hace poco más de un año Manolo Maestre resucita el proyecto y logra por fin, a través de The Fish Factory, editar “Un plástico más”, álbum con cinco temas nuevos, incluido una nueva versión del que da título al trabajo, y el regalazo de los cincos rescatados de los ochenta. Suerte.
En definitiva, tres temas de un hard callejero, que hoy sueña a anejo, en un disco aparentemente sin historia (pero con decenas de ellas detrás a poco que escarbemos), que como el resto de los plásticos del Villa en su día pasaron casi desapercibidos y que actualmente son cotizados y difíciles de encontrar.
Buen finde. Sed felices.
¿Tienes todos los plásticos del Villa? Menuda colección...
ResponderEliminarNo, ojala. Dos localizados (este y el de los Sangre Azul) y creo que tengo otro por algún lado. Tras el lío con los Obús, me empezó a interesar el Villa y como los del Discoplay tenían los en las estanterías pillé alguno. Pero no eran mi prioridad. Pero mira ahora me arrepiento o_O
EliminarUn ayuntamiento apoyando el rock?? Siempre lo he dicho, debería haber nacido unos cuantos años antes!
ResponderEliminarJaja yo era adolescente a comienzo de los ochenta y siempre digo que hubiera preferido los setenta jaja ya ves.
EliminarApoyar, apoyar... el rock y heavy estaban de moda y se aprovechaban de ello. Era muy progre, sobre todo ayuntamientos de izquiedas, llevar a varias bandas a las fiestas, cosa que agradeciamos. Lo del Villa era la hostia, una pasada y con Tierno Galván a la cabeza, vinilo y 300000 pelas que en la época era mucha pasta... Paro que me pongo en plan abuelo cebolleta.