Ir al contenido principal

Gelu - No soy digna de ti / Qué harás / El amor / Ammore mio - (La voz de su amo – 1965)


Pues sí, hoy toca vinilo de la serie “Los singles de mami” y concretamente este de la granadina María de los Ángeles Rodríguez Fernández o –como fue conocida en España y allende nuestras fronteras–, Gelu, que era el apodo cariñoso que le puso su madre de niña. Resulta que –os soy sincero– no había oído hablar de ella en mi vida, pero la verdad es que Gelu fue toda una estrella internacional, paradigma de la chica yeyé que llevó a la fama en cine Concha Velasco gracias a la canción de Antonio Guijarro y Augusto Algueró. Y eso que cuando grabó el EP que os traigo este viernes, en el momento álgido de su carrera, la joven contaba sólo con veinte años. 
 
Gelu había nacido en la calle Fábrica Vieja de Granada y junto a dos hermanas y un hermano creció en el seno de una familia con un padre funcionario que amaba la Zarzuela, por lo que la música formaba parte del día a día de la chiquilla, a quien al parecer no sólo le gustaba cantar sino que tenía aptitudes para ello. Esa fue la razón por la que una de sus hermanas la inscribió en un concurso de Radio Granada... que acabó ganando, en una final celebrada en el Teatro Isabel la Católica, lo que supuso el inicio de su fulgurante carrera. La chica comenzó estudios de piano y canto, pero no terminó ninguna de las formaciones. De hecho, no completó ni el bachillerato. Y es que Gelu, lo que quería era cantar. Tras unos inicios a nivel local –la joven cantaba en los Jardines Alberto, en el Balneario Lanjarón y la radio y los periódicos de la ciudad hablaban de ella–, la oportunidad le llegaría en Madrid, concretamente en TVE después de que en Radio Madrid le dijesen con pésima visión comercial que no servía para cantar. Total, que tras salir en la pequeña pantalla, el Hotel Felipe II de Madrid la contrató por un dineral de la época. Vamos, lo que ahora hacen los Crüe o KISS en Las Vegas, pero un poquito más sencillo. 
 

No obstante, en los 60, las discográficas estaban casi todas en Barcelona así que el padre de Gelu –que a esas alturas ya ejercía de representante de la joven– pidió una excedencia y se estableció en la Ciudad Condal con la familia. Así es como su hija comenzó a cantar por diversas emisoras hasta que fue fichada por La voz de su amo, quienes la convirtieron en estrella. Como os he dicho al principio, no conocía para nada a esta cantante pero mi padre habla de ella como si fuese la Taylor Swift hispana de la época, una superventas de la que todo el mundo conocía sus singles y los bailaba en guateques. Como era habitual, la discográfica se fijaba en estrellas internacionales del momento como Petula Clark, Mina o Rita Pavone y le hacia grabar a Gelu las adaptaciones al español de sus éxitos. Así es como la granaína grabó más de un centenar de canciones y consiguió tres discos de oro, en 1960, 1962 y 1963, el último por El partido de fútbol, EP en el que estaba la versión en castellano del éxito de Rita Pavone La partita di pallone y que eclipsó al original. En la cumbre de su carrera, Gelu se embarcó en varias giras por América –con paradas en Nueva York incluidas– y sobrepasó el ámbito musical siendo imagen de diversas marcas como la de Cosméticos Place Vit
 

Sin embargo, Gelu se cansó de –en sus propias palabras– todo ese mundo de artisteo y en 1969 grabó su último disco. Además, se casó con Jaume Palau –músico de Mollerussa que tenía el nombre artístico Santy y consiguió cierta fama versionando grandes éxitos de los festivales de San Remo o Eurovisión– por lo que encontró la excusa perfecta para iniciar una nueva vida alejada de los focos, la fama y la exposición mediática. Cuando tuvo a su hija decidió que ser madre era incompatible con cantar y ahí terminó del todo su carrera. Y yo supongo que esa ha sido la razón por la que su fama quedó sepultada por la nueva hornada de artistas aparecida en los años 70 y no ha trascendido a través de los años como si ocurrió con intérpretes incluso menos importantes que ella. Por ese motivo, creo que este es un buen momento y lugar para reivindicar su figura. Eso sí, aunque me reafirmo en que si hace un tiempo me hubieseis preguntado por Gelu no hubiese sabido a quién os referíais, lo cierto es que al investigar para escribir esta reseña he visto que conocía perfectamente la mencionada El partido de fútbol
 
Pero no fue ese EP el que compró mi madre sino este que hoy os presento y cuyo track list es: 
 
A 
No soy digna de ti 
Qué harás 
 
B 
El amor 
Ammore mio 
 

El disco comienza con No soy digna de ti, una de esas canciones que en los guateques servían para arrimar cebolleta y donde se advierte la gran voz de Gelu. La canción es la versión en español de Non son degno di te, compuesta por Bruno Zambrini y el letrista Francesco Migliacci que en Italia popularizó Gianni Morandi, de quien ya os hablé hace unas semanas. Más alegre es Qué harás, adaptación de Tu farai de Bruno y Augusto Martelli –padre e hijo– y el letrista brasileño Alberto Testa que ese mismo año grabó la italiana Mina para Belter, que también muestra la calidad vocal de la granadina. Usando repetidamente una melodía robada a Bach –hoy le llamarían utilizar un sampler–, la cara B comienza con El amor, una composición alegre y muy poppy del chileno Joaquín Prieto. Y el EP finaliza con la balada Ammore mio de Carlo Donida y Giulio Rapetti adaptada por el letrista Nicolás Suris y el compositor y arreglista Julio Guiu, que utilizaron sus pseudónimos de Gil Luaño y Julio César respectivamente. 
 

En fin, un disco de música ligera, muy italiano al gusto de la época, con una voz de calidad y de una artista –al menos por mi– bastante desconocida. Espero que os haya gustado su historia. 
 
¡Feliz viernes! 
@KingPiltrafilla

Comentarios

  1. Esta semana has salvado del vacío al blog. Me encanta tu serie de vinilos maternos, lo confieso, no por la escucha, que se me ha hecho un poco dura, si no por las historias que traes. Toda una hitmaker esta Gelu. He tenido que escuchar "El partido de fútbol" y resulta que ya la conocía. Qué moderna era tu madre. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, aquí estamos tú y yo. A mi también me gusta especialmente la serie, evidentemente. Y también por cosas que no tienen que ver con el género musical, obvio. Me das una alegría. Por otra parte, me encanta la investigación a la hora de escribir las entradas ya que siempre me entero de cosas a las que no había prestado atención. Los sesenta me pillaban lejos. Y sí, mi madre era una jovencita muy moderna e independiente en su época -trabajaba en Banesto como secretaria de dirección y hacía teatro por las noches-, pero desgraciadamente sólo le dio por comprar música entre los años 63 y 65. Una pena. Abrazo de vuelta. KING

      Eliminar
  2. Ni idea de esta cantante, la verdad. Buena voz. Curioso lo que dices de que tu madre solo compró discos un par de años. Sabes la explicación? Un saludo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Anónimo2/6/23 16:54

      Sí que tiene buena voz, sí. Y la historia también es curiosa. En cuanto a lo de mi madre, pues no tengo ni idea y ya es tarde para preguntárselo. Pero al caer en mis manos sus singles veo que la mayoría son de 1964 y 1965. A lo mejor hasta entonces no tenía tocadiscos, luego conoció a mi padre, me tuvo a mi... en fin, se convirtió en ama de casa, dejó el trabajo y supongo que lo de comprar vinilos e ir a guateques se acabó para ella. Pero en casa siempre se escuchó mucha música por la radio.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Lex Lüger - El Rey del Terror (2020, THE FISH FACTORY)

  Vinilo de tirada limitada de 300 copias (tengo la 166). Bonita y cuidada edición.  Insert firmado por el mismo Lex Lüger .   Después de 15 años de larga e interesante trayectoria y de ocupar un lugar que no existía dentro del Rock en español, Los Lügers se separan en 2019. Ante este panorama, Lex Lüger (cantante, guitarrista, compositor y alma mater de Los Lügers decide emprender una carrera en solitario, continuando en parte con el legado de su banda de toda la vida, tanto en estética, en temática, así como en base musical desde la que partir hacia un sonido nuevo. Predominan los guitarrazos hard rockeros sobre una base de batería electrónica y teclados ochenteros en lo que acaba siendo u na entretenida mezcla entre rock cañero y synthwave descarado. Este cambio de sonido va unido al amor por el hard n' heavy, el shock rock, el rock gótico, el synth, el terror y el cine de una época pasada en la que los VHS y Beta, los salones recreativos, los pelos cardados con laca Nelly y

The Cats – Cats aglow (Bovema Negram - 1971)

Normalmente –con la excepción de la serie dedicada a los singles que heredé de mi madre y que en su práctica totalidad eran exponentes del pop hispano y europeo de los 60–, mis entradas se mueven estilísticamente en el ámbito del heavy metal , el thrash , el AOR , el black metal o el hard rock . Sin embargo, hoy no tocaré ninguno de estos géneros, no.    Hoy, a mi manera, voy a hacerle la competencia a Dani, así que aguantadme el cubata, vinilófilos del lugar. Para ello tiraré de una de mis recientes compras a ciegas. A veces, esta modalidad de caza musical funciona bastante bien y le ofrece a uno sorpresas y alegrías. Así, a bote pronto, recuerdo los casos de Zon , Gambler –más a ciegas que ese, ya me diréis–, Heaven o los recientemente reseñados Bodine . Sin embargo, en otras ocasiones uno no cobra una pieza todo lo apetitosa que hubiese deseado. Por supuesto, ya hemos comentado hasta la saciedad en numerosas

Albert Hammond - It never rains in southern California (1972, Epic Records)

  Es posible que empieces a leer esta entrada creyendo no conocer a Albert Hammond . Pero pronto te darás cuenta de que, a menos que hayas pasado los últimos 50 años en coma, has escuchado en más de una ocasión una canción suya. Interpretada por él o por cualquier otro artista, eso da igual. Hace diez años los cálculos eran que se habían vendido más de 360 millones de discos que llevasen títulos en los que estuviese implicado. Han cantado sus composiciones gente como J ohnny Cash, Elton John, Steppenwolf, Sony & Cher, José Feliciano, Olivia Newton-John, Aretha Franklin, Whitney Houston, Chicago (“ I don´t wanna life without your love ”), Starship (“ Nothing's gonna stop us now ”), Joe Cocker, Tina Turner (“ I don´t wanna lose you ”), Roy Orbison, Rod Stewart, Celine Dion (“ Just walk away ”), Julio Iglesias (“ Por un poco de tu amor ”), Willie Nelson (“ To all the girls I love before ”), The Hollies, Diana Ross, Bonnie Tyler, Aswad (“ Don´t turn around ”), Hermanos , aquell

Carole King - Tapestry (1971, A&M Records)

      Vuelvo a las andadas de traeros clásicos y, además, reivindicando figuras femeninas. En este caso, os voy a escribir de una neoyorquina de Brooklyn, Carole Joan Klein , más conocida en esto de la música como Carole King , y su obra maestra, Tapestry . Y lo traigo este mes de febrero en el que ella cumple 82 años y el LP 53. Hay un montón de artículos por ahí sobre ella (y su historia) y sobre este disco (y su historia) que son mucho mejores de lo que yo pueda escribir, por lo que debería limitarme a lo mínimo para presentaros el disco. Pero, si os parecéis mínimamente a mí, no vais a buscarlos y sólo leeréis lo que se ponga aquí, por lo que la única forma de que os enteréis de algo es dándoos la brasa con todo. Así que, haré el esfuerzo y, como cuando hacíamos trabajos en el insti, a ver qué tal me sale juntar toda la información. Carole estaba predestinada para esto de la música. Partiendo del hecho importante de que su familia judía de clase media pudo pagarle unos estudi

Premiata Forneria Marconi - Celebration (Numero Uno, 1976)

  Hoy me apetecía compartir algo de rock progresivo en FFVinilo. Supongo que no soy el único que cuando se va de viaje, siempre incluye en los recorridos turísticos una visita a las tiendas de discos o mercadillos de las cuidades que visita en busca de joyas de la música del país en cuestión. En mi viaje a Italia del año pasado, fui en busca de algunas joyas del rock progresivo italiano, del que soy un aficionado desde hace muchos años. Tengo que reconocer que el precio de algunos vinilos (sobre todos de los clásicos más buscadas del género) me hizo contenerme en mis compras. Aun así, pude hacerme con discos interesantes, de los que os presento una muestra. El disco en cuestión en un recopilatorio de uno de los grupos más famosos del progresivo italiano, Premiata Forneria Marconi, y me va a servir de excusa para hablaros de este movimiento y hacer una breve introducción a todos aquellos que no estéis familiarizados con este estilo. La santísima trinidad del progresivo italiano es