Ir al contenido principal

Dire Straits – “Sultans of Swing” (Vertigo, 1978)

—¡No me gusta! ¡No me gusta como suena, joder! Aburre a las ovejas... —se desespera Mark, mientras repite una y otra vez los acordes.

—Te empeñas en tocarla con la National, pero ya te dije el otro día que la toques con la strato roja. Quedaría mucho mejor, ¿por qué no pruebas? —sugiere David, mientras la coge y se la da a su hermano.

Mark coge la guitarra y la acaricia. La había comprado hacía poco y era un sueño hecho realidad. Como la de Hank Marvin, igualita. Como la que le pidió a su padre y no pudo comprarle, por ser demasiado cara. Pasa los dedos por las cuerdas, sin la púa, y empieza a tocar los acordes de la canción de nuevo. Y funciona, como si fuera magia, las notas cobran vida. David le mira y sonríe.

—¿Ves? Si es que me tienes que hacer más caso… Ahora suena mucho mejor.

***

La “niña de los singles” vuelve. Y hoy con un 2x1, ni más ni menos, con dos versiones del mismo single, una holandesa y la otra española. Ya he contado más de una vez por aquí que soy muy tiquismiquis con las ediciones discográficas, y me gusta comprar las correspondientes al país de donde es originario el grupo o el artista en cuestión. En este caso no lo hice, porque no me gustaba la portada de la edición británica, así que compré la holandesa, la de la strat roja, y estaba tan contenta con ella, pero uno de esos días que andaba curioseando por una tienda de discos, me encontré con la edición española, a un precio irrisorio y en muy buen estado, y siguiendo un impulso, decidí llevármela a casa. ¿Por qué? Pues no lo sé. Supongo que por todo lo que me gusta esta canción, y porque la portada es diferente… Yo que sé. Tontunas de coleccionista, aunque soy una coleccionista peculiar que sigo mis propios criterios, no de las que lo compran todo de los artistas que les gustan (ya estaría arruinada solo con Depeche Mode, malditos sean xD)


Portadas


Contraportadas

Vinilos

La cuestión es que tengo estas dos ediciones del mismo single, el “Sultans of Swing” de los Dire Straits, el primer sencillo de su primer disco, llamado como ellos. La edición holandesa es la blanca y roja, como la famosa Stratocaster del 61 de Mark, la que usó en la grabación de este álbum, y la edición española es blanca y negra. Ambas están editadas por Vertigo. 

Dire Straits 

Los hermanos Mark (guitarra solista y voz) y David Knopfler (guitarra rítmica), nacidos en Glasgow (Escocia) pero criados en Newcastle tras mudarse la familia allí y sus amigos John Illsley (bajo) y Pick Withers (batería) de Leicester, formaron Dire Straits en Londres en 1977. El músico más veterano era Withers, que tenía más de diez años de experiencia tocando la batería en distintas bandas y como músico de sesión. En el momento en que se formó el grupo, Mark trabajaba como profesor en la escuela de arte, Illsley estudiaba en Goldsmiths 'College y David era trabajador social. Tras muchas vicisitudes y rechazos, en 1978 pudieron grabar su primer disco, llamado como el grupo, Dire Straits, donde está incluido este primer single, que se convirtió en un éxito y en una de sus canciones más conocidas.


De izquierda a derecha: John Illsley, David Knopfler, Pick Withers Mark Knopfler 

Sultans of Swing

La compuso Mark Knopffler con una National Steel (esa preciosa guitarra de cuerpo metálico) pero no le encontraba sentido. La encontraba aburrida y sin vida… hasta que pudo comprarse su famosa strat “fiesta-red” de 1961. “Cobró vida tan pronto como la toqué en esa Stratocaster del 61 ... los nuevos cambios de acordes se presentaron y encajaron en su lugar”. En aquel momento no sabía que haría historia y que su manera de tocar la guitarra sería única. Cualquier acorde, por sencillo que sea, en sus dedos suena distinto y especial, en parte por no usar púa.



La letra se inspiró en la actuación de una banda de jazz que tocaba en la esquina de un pub casi vacío en Deptford, al sur de Londres. Al final de su actuación, el cantante principal anunciaba su nombre, los “Sultanes del Swing” y Knopfler encontró gracioso el contraste entre la apariencia del grupo, desaliñada y algo cutre, su entorno y su nombre, tan grandilocuente.

And a crowd of young boys, they're fooling around in the corner
Drunk and dressed in their best brown baggies and their platform soles
They don't give a damn about any trumpet playing band
It ain't what they call rock and roll
And the Sultans
Yeah, the 'Sultans' played Creole. Creole, baby

Una panda de chavales hace el tonto en la esquina
Borrachos y vestidos con sus mejores pantalones anchos de color marrón y sus suelas de plataforma.
Les importa un bledo esa banda que toca la trompeta
No es lo que ellos llaman rock and roll
Y los “Sultanes”
Y los “Sultanes” tocaron Creole
[“King Creole”, canción de Elvis Presley]

El cantante de folk y artista de Columbia Bill Wilson afirmó haber coescrito la canción, y aunque no obtuvo reconocimiento como compositor en el lanzamiento, afirmó haber recibido una compensación monetaria por su contribución. Algo es algo…  

Seis años después de su lanzamiento, esta canción alcanzaría la gloria al tocarse en directo en el Hammersmith Odeon de Londres e inmortalizarse en el Alchemy, ese disco irrepetible y enorme. Con una coda final de casi once minutos (a partir del 6:57) es absolutamente gloriosa y siempre la escucho hasta el final, da igual lo que esté haciendo. No hay nada más importante que escuchar ese punteo, hasta que Withers no le da el golpe final de batería, me lo sé nota a nota y puedo “cantarlo” sin equivocarme en ninguna. Oro puro.

El buen rollo que desprendían en el escenario compensa esa cinta y esas muñequeras de tenista que lucia Mark, completamente innecesarias.


Os dejo disfrutándola, que bien lo merece. Tanto en su versión “LP” como en la del directo, es una maravilla. Y cosas así nos hacen falta en este momento tan triste y con tanta incertidumbre de nuestra vida. Mientras podemos volver a sentir la música en medio de una multitud, abrazados y cantando hasta quedarnos afónicos, nos tendremos que conformar con recordar estos grandes momentos, pero volverán, y nosotros estaremos allí para vivirlos.

Buen fin de semana a todos, cuidadito con los patinazos los que aún tengáis nieve, y precaución con el maldito bicho.

Comentarios

  1. Maravilloso. Me ha encantado.
    Mngtn.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿A que tú también te sabes de memoria el punteo final? ;) ¡Muchas gracias!

      Eliminar
  2. Estupenda entrada, canción icónica y dos bonitos singuels. Feliz finde.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me gusta más el de la strato roja, por el color, que es mi favorito, supongo, pero son chulos los dos. ¡Me alegra que te gustara la entrada!

      Eliminar
  3. Muy chulos los singles, niña de los ídem. A mí no me van mucho, pero entiendo porqué no pudiste evitar adquirir esa segunda copia. La canción es un mito del rock, para qué te voy a engañar, y también adoro esa versión de Alchemy. ¿Qué hubiera sido de Dire Straits sin ese riff? Quién sabe. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Más bien qué hubiera sido de nosotros sin esta canción, ¡imprescindible! Cosas de la coleccionista peculiar que soy, que compro un poco lo que me apetece cuando me apetece. Otro abrazo de vuelta.

      Eliminar
  4. Respuestas
    1. Y a mucha honra... ¡Ya era hora de traer unos cuantos 45 rpm por aquí! 😁

      Eliminar
  5. Seguramente sea mi solo favorito, la versión del Alchemy me vuela la cabeza a niveles estratosféricos. Una maravilla, imposible no volverse loco con esa coda final en el directo.
    No tenía ni idea del origen de la canción, de cómo se inspiró ni nada, mil gracias por compartirlo. Ojalá se pueda volver pronto a esos conciertos que tanto echamos de menos. Abrazo!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ay, Alberto, las ganas de volver a sentir la música en directo es tanta... Me alegra que hayas descubierto la historia de la canción leyendo la entrada, es curiosa, menudos pájaros debían ser esos “sultanes” del swing y qué fauna debían reunir en los locales del sur de Londres. ¡Un abrazo!

      Eliminar
  6. Todos hemos hecho un "air guitar" con el solo de esta canción, preferiblemente en la versión del Alchemy. Curioso el cambio de color en las diferentes ediciones.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, yo también lo he hecho, lo confieso. Y no una, sino muchas 🤣🤣🤣

      Eliminar
  7. Buenas noches! He llegado hasta esta página buscando una curiosidad sobre este single. Hoy mismo me he hecho con una copia de la edición española y mi sorpresa ha sido mayúscula cuando lo he pinchado y resulta ser una versión distinta a la que aparece en el LP, ni la versión musical ni la mezcla. La del single suena como una maqueta de garaje, alguien puede ampliar información de este hecho? Muchas gracias!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Buena tardes José M. Efectivamente, tienes razón, y no había caído en ello. He escuchado la versión holandesa (la roja) y la española, (la de la strato negra). Como bien dices, la versión española suena más a maqueta, a menos elaborada, pero en cualquier caso, distinta de la del álbum del 78 y de la del single holandés. Especialmente al principio y al final de la canción. Es un misterio. Podemos ponerlo en Discogs, a ver si alguien sabe algo, en algunas ediciones hay "debates" para solucionar estos misterios musicales. En cualquier caso, bienvenido a esta nuestra jungla vinilera, y gracias por plantear este enigma, pues no me gustan nada a mí estas cosas… xD

      Eliminar
    2. Gracias por tu respuesta. Si descubres algo, por favor, comparte por aquí, me estaré pendiente. Te comento, tengo también un CD que compré allá por 1992 que se llama "Early Demos", al principio pensaba que la versión del single sería sacada de ahí pero tampoco, con lo cual tengo tres versiones distintas del Sultans of swing.

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Ghost – Skeletá (Loma Vista, 2025)

Debo deciros que Ghost son la única banda actual –es decir, nacida bien entrado el siglo XXI y aún en activo– de la que me compro casi todos los álbumes que edita. La satisfacción que me transmiten su sonido, melodías y concepto se mantiene con cada obra y opino que con cada nuevo lanzamiento han superado al anterior. Hasta ahora... o quizás también. Me explico. Cuando escuché este Skeletá por primera vez no tuve la sensación habitual de que la banda había escalado un peldaño más en calidad desde el disco anterior. Es lo malo de acostumbrarse a recibir dosis cada vez mas altas de genialidad y creatividad. Sin embargo, cada vez me gusta más, es uno de esos discos no tan inmediatos que ganan con cada escucha. Y es que las composiciones de Tobias Forge están llenas de matices diversos y pese a que los puristas del metal acusan a la banda de ser poco menos que ABBA con máscaras, lo que es innegable es que las raíc...

Black N Blue-Nasty Nasty (Geffen 1986)

 ...y en estas llegó "Nasty Nasty".  La banda buscó con el segundo "Without Love " superar las 150 mil copias estimadas de su debut y lograr el Disco de Oro, pero la orientación excesivamente melódica de aquellas " Miss Mistery", "Stop the Lightning "... incrustadas en la continuación de las robustas "Autoblast" o "Hold on to 18 " terminaron por confundir a unos seguidores que veían más a unos Honeymoon Suite  en aquellos Black N Blue del 85.  El tercero en discordia trataba de recuperar la potencia del debut sin despojar del todo las melodías Glam poperas del disco producido por Bruce Fairbairn. Para ello encomendaron a Gene Simmons esa labor, y si bien es cierto que las ventas siguieron estancadas (se estima que no superaron las cien mil copias) las canciones merecían y mucho la pena.  El álbum abría con el tema título, un Sleazy Metal con lapo incluido de St James  al comienzo del riff de guitarra que vacilaba cosa mala. ...

Liar - Set the world on fire (Bearsville Records, 1978)

  Hoy os voy a contar la pequeña historia de una pequeña banda que pudo reinar hace muchos, muchos años en un reino junto al mar, pero que acabó siendo tan conocida como cualquier otra banda de null-hit-wonder. Aunque, en su caso, los malvados genios de la industria musical deben recibir la culpa de su fracaso y olvido, pues su música está a la altura de la leyenda que quisieron alcanzar. Liar se formó en una pequeña ciudad inglesa llamada Maidenhead comandada por el jovencísimo bajista Dave Taylor. Corría el año 75 y el picor roquero gemía por sus venas. Con el baterista Clive Brooks, el guitarrista Paul Travis y Dave Burton a la voz grabaron un iniciático Straight from the hip dos años después. Tras el fichaje de Steve Mann se embarcaron en una intensa gira con Slade por Europa que completaron con un curioso periplo de tres semanas por la Hungría comunista de la mano de Piramis (banda local). De vuelta a casa, su mánager les consiguió un contrato con la pequeña Bearsville Rec...

FLESHGOD APOCALYPSE - OPERA (NUCLEAR BLAST, 2024)

  Hay discos buenos y hay discos malos. Algunos que escuchas hasta la saciedad, por que son realmente buenos. Pero hay discos que literalmente, te cambian la vida. A mi me pasó con el Opera de Fleshgod Apocalypse . No por que musicalmente sea excelente, que lo es, si no por la historia que hay detrás. Hablar de este disco es hablar del accidente que sufrió su vocalista y líder, Francesco Paoli . Estando de escalada uno de los anclajes falló y sufrió una caída de varios metros. Quedó colgado bocabajo, con un brazo reventado y desangrándose durante horas hasta que los equipos de rescate pudieron acceder a la zona. Casi pierde la vida primero y el brazo después. Este incidente inspira la mayor parte de las canciones de la obra. El disco abre con Ode to Art (De´ Sepolcri) , una introducción operística en la que luce la voz lírica de Veronica Bordacchini acompañando la melodía de piano y violines. I Can Never Die es un canto al arte, a como una persona puede dejar este mundo...

Iron Maiden - Iron Maiden (EMI, 1980)

Si no hace mucho os hablé del primer álbum de Van Halen o del debut en solitario de Ozzy Osbourne , hoy toca traer al blog el primer elepé de los imprescindibles –todos en pie, por favor– Iron Maiden , este igualmente titulado Iron Maiden que acaba de cumplir cuarenta y cinco añitos. Ahí es na. Y, como siempre, cuando presento a un artista o banda y aún más si se trata de su primera obra, toca resumir sus orígenes. Los de la doncella se remontan a principios de los 70, cuando un adolescente del norte de Waltham Forest tan enamorado del fútbol como de la música de Genesis que responde al nombre de Steve Harris decide comprarse un bajo y acaba tocando con amigos hasta crear una banda llamada Influence que no tarda en cambiar su nombre a Gypsy’s Kiss y que pese a ganar un concurso de talentos, no tarda en desaparecer. Entonces, Harris entra en Smiler , cuyos miembros son bastante más mayores que é...