Ir al contenido principal

Donny Hathaway - Live (Soul - 1972 - USA)



En la década de los sesenta y setenta los discos en directo significaban la prueba del algodón para cualquier músico o grupo de primera línea, si era capaz de grabar un buen disco en directo se consideraba que estaba en la cima de su carrera.

Este disco es uno de los directos más conseguidos, a la altura de obras como el Live at the Regal de BB King, Live at the Apollo de James Brown  o Live at the Harlem SquareClub de Sam Cooke. Está grabado en dos clubs míticos del ambiente nocturno, la cara A se grabó en el Troubadour de Hollywood mientras que la actuación en el Bitter End de Nueva York ocupa la cara B del disco. Se puede escuchar el ambiente de las noches de grabación y diría que hasta se puede oler el humo que flotaba en el ambiente.


Antes de debutar como músico/cantante Donny Hathaway se había dedicado a producir discos en Chess y Curtom y se sentó detrás de las consolas de grabación de Stax para discos de Jerry Butler, Carla Thomas y Staple Singers. Introdujo elementos de música clásica y vanguardia en los conceptos sonoros de la época y en su faceta de músico ayudó a renovar el soul junto con Marvin Gaye y Curtis Mayfield. Esta afirmación puede parecer pretenciosa pero el nuevo estilo que imprimía a sus baladas fue de gran inspiración para Stevie Wonder que dio un giro a su carrera a partir de 1972 cuando Donny Hathaway ya había publicado dos discos, el Everything is Everything de 1970 y su homónimo de 1971 que contenían sus características baladas.


Durante su estancia en Stax conoció a King Curtis que lo introdujo en Atlantic y allí grabó tres excelentes de discos de estudio, uno en directo además de alguna banda sonora y sus duetos con la gran Roberta Flack.
Para tener una idea de lo que tenemos entre manos basta un apunte: Willie Weeks, uno de los bajistas mas solicitados de todos los tiempos, en el tema "Voices Inside (Everything Is Everything)" hace un solo de más de tres minutos que se ha considerado uno de los solos de bajo más influyentes de la historia del instrumento por su expresión melódica, su claridad estructural y su carga emocional.

Abre el disco una excelente versión del "What’s Going On" de Marvin Gaye, que interpreta magistralmente, haciéndola suya con su omnipresente piano Rhodes y la calidez/profundidad/timbre de su voz.

"Wat's Going On"

Sigue con un tema que fue su primer éxito “The Guetto”, el público acompaña con palmas y gritos, la banda imprime un funk fibroso, imparable, congas, batería, bajo y el Rhodes… un tema de doce minutos para disfrutar a lo grande a la altura de Mayfield o Gaye, sin complejos.

 
The Guetto
 
Para calmar los ánimos, una balada a medio tiempo, "Hey Girl", que le permiten explorar sus dotes como cantante, esto es serio.

Continuamos con una versión recibida con un grito de una espectadora, Carole King la llevó al éxito pero en la voz de Donny Hathaway, "You’ve Got a Friend" suena impresionante, el público la canta, la banda sigue el ritmo y tienes la impresión de estar allí, en el Troubadour, inmenso.

 
You've Got a Friend
La cara B, por si no estamos suficientemente entregados, se abre con un tema de fuerte influencia gospel “Little Ghetto Boy”, magnífico piano… ese Rhodes, empieza lento y va cogiendo velocidad, la percusión batería/congas nos dan calor y terminamos haciendo los coros y dando saltos, deseando que no termine.


Little Ghetto Boy

El público ahora está en silencio, el piano y la batería nos marcan una cadencia de ritmo muy lento, esto es otro baladón, el gran guitarra Cornell Dupree nos marca el dramatismo del tema y la voz inconfundible canta  “We're Still Friends”. Emocionante.

Para volver a soltarnos Lennon está bien, estamos en Nueva York y un piano a lo honky tonk nos conduce hasta "Jealous Guy".

Llegamos al final del disco, al último tema, pero Donny no nos va a dejar ir sin antes regalarnos con 14 minutos inmensos, la banda esta vez acompaña con un ritmo muy funky, puro groove, con toques de jazz, y el Rhodes omnipresente en todo el disco aquí hace diabluras, ritmo, ritmo, incansable… presentación y sólo de cada músico, el público entregado, y llegan los tres minutos de bajo, ufff, no hay que perdérselo. "Voices Inside (Everything Is Everything)". Todo es Todo, y no queremos menos. Una jam épica.

 
Voices Inside (Everything Is Everything)

Quizá sea por su corta carrera pero es uno de los grandes soulman frecuentemente olvidados, una figura a reivindicar. 

Donny Hathaway se suicidó el 13 de enero de 1979 al tirarse por la ventada de un hotel, desde hacía unos años sufría depresiones nerviosas.



Músicos:
Donny Hathaway – vocals, electric piano, piano, organ, arrangements
Phil Upchurch – lead guitar on side one
Cornell Dupree – lead guitar on side two
Mike Howard – guitar
Willie Weeks – bass
Fred White – drums
Earl DeRouen – conga drums
  
Temas:
A1 "What's Goin' On"  5:18
A2 "The Ghetto" 12:08
A3 "Hey Girl" 4:03
A4 "You've Got a Friend" 4:34
B1 "Little Ghetto Boy" 4:29
B2 "We're Still Friends" 5:12
B3 "Jealous Guy" 3:08
B4 "Voices Inside (Everything Is Everything)" 13:47   

Comentarios

  1. La verdad, no conocía a este pedazo de músico, cierto que algunos temas me suenan, pero jamás los había relacionado con él, sobre todo 'The Guetto'.
    Ahora entiendo como músicos como George Benson o Stevie Wonder suenan como suenan. Cierras los ojos, y es como si estuviese oyendo a Benson, sólo que en vez de guitarra con un piano eléctrico.
    Una pena que tuviese un final tal temprano y tan desafortunado.
    Gracias por la aportación, tendré que seguirle la pista.

    ResponderEliminar
  2. Si no tienes complejos respecto al soul, Hathaway te gustará. No tiene nada que ver con la disco music de finales de los setenta y tiene un sonido muy característico, además los músicos que le acompañan suelen ser primeras espadas, tanto es así que gracias a este disco conocí a un monstruo de la guitarra como Phil Upchurch que tiene bastantas discos de jazz-funk o jazz a su nombre y los de su primera época son buenísimos.
    Como bien apuntas gente como él y también Curtis Mayfield o Marvin Gaye hicieron mucho por el soul.
    Gracias por comentar.

    ResponderEliminar
  3. "En la década de los sesenta y setenta los discos en directo significaban la prueba del algodón para cualquier músico o grupo de primera línea, si era capaz de grabar un buen disco en directo se consideraba que estaba en la cima de su carrera" Igualico que ahora que le graban un directo a cualquiera en el jardín de su casa.

    Al igual que la salsa, tampoco el soul es lo mío, por nada en especial, pero es un registro que se deja oír. Se agradece en el blog tener tan variado repertorio. Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Todos conocemos ejemplos de discos en directo que han resultado obras maestras aunque también los ha habido en sentido contrario.
      Supongo que era por la dificultad de reeditar correctamente lo que se grababa y por la creencia de que había que capturar el momento, de que se estaba creando en vivo. Ahora creo que es mucho más sencillo y la digitalización permite modificar los registros hasta puntos que desconozco pero me imagino.
      Respecto a la variación del repertorio... coincido en que es interesante abrirse a cualquier música y como no soy muy metalero intento aportar cosas que creo pueden gustar o que tienen alguna historia interesante.
      Es un placer asomarme todos los viernes.

      Eliminar
  4. Milestone, como ves no tengo demasiados prejucios con la música, siempre y cuando esté bien hecha y no aparezca asiduamente en las radio-fórmulas.
    A veces hablo con mi hijo pequeño, que está puestísimo en la música, y le pregunto qué les explican en la clase de música en el cole. Deberían empezar por saber distinguir un producto comercial de un producto de calidad, pero no es así.
    Luego pasa lo que pasa, que la gente se desgañita por el Justin Bieber ese y otras leches, y les endosan productos de dudosa calidad y poca duración porque no son nada.
    Te agradezco la entrada que ha sido todo un descubrimiento. Por cierto, en Amazon España se pueden encontrar cosas de este señor a muy buen precio. Hay un pack de 5 cd's por sólo 11€, conteniendo este 'Live' y algunos otros.
    Ya lo tengo en la lista de espera. ;-)
    Gracias de nuevo y un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. onehitwonder tienes razón en lo que comentas, aunque mí experiencia con los críos (tengo dos hijos) es que ellos sólos se van "enderezando", supongo que he tenido suerte, empezaron escuchando música comercial y poco a poco han evolucionado y ya no tragan con cualquier cosa que suene a última moda, aunque en su día tuve que tragar carros y carretas, jajaja.
      Gracias por los comentarios.

      Pd.:

      Eliminar

Publicar un comentario

Otros crímenes...

Paice Ashton Lord - Malice in Wonderland (Polydor, 1977)

Esto no estaba previsto. Este disco no estaba en la lista de títulos para reseñar en #FFVinilo. Pero es que el fin de semana pasado por fin pude hacerme con él, y tenía ganas de compartirlo. Los que leéis esto ya conocéis esa sensación de ir pasando discos y encontrar de repente esa portada que tienes en la cabeza desde hace tiempo. Qué sensación. Se que vosotros me entendéis, así que no encuentro mejor foro para compartir ese momento que este blog, lleno de melómanos “vinileros”. Lo curioso es que no solo encontré una, sino dos copias, una francesa (“gatefold”) y una inglesa (sencilla). Con buen criterio, me quedé con la inglesa. Y claro, eso se nota en el sonido. ¡Como suena esta maravilla! Si os gustan esas producciones típicas de los 70 con mucha profundidad y dinámica lo vais a disfrutar (nada que ver con las producciones actuales, cada vez más “planas”). A la producción, la leyenda, Martin Birch (Deep Purple, Whitesnake, Black Sabbath, Iron Maiden, …). ¿De dónde sale este grupo?

Scorpions – Love at first sting (Harvest-EMI, 1984)

Y si hace unas semanas os hablé aquí del inmenso 1984 de Van Halen , hoy toca comentar el no menos imprescindible Love at first sting de los alemanes Scorpions , otro que este año también celebra su 40º aniversario. La banda venía de una gira internacional presentando Blackout , el pedazo de disco que finalmente los había puesto en el mapa –yo mismo los descubrí gracias a él, os lo conté aquí – y tenían la misión de superarse, algo nada fácil no sólo en el aspecto creativo. Una de las razones era la mala relación entre el bajista Francis Buchholz y Dieter Dierks , dueño de su compañía de discos y productor del grupo desde 1975. Por eso, cuando la banda –que empezaba a tener dinerito del bueno– pidió grabar el nuevo álbum en un estudio que no fuese el del productor, Dierks se los llevó a los Polar studios de Estocolmo –exacto, los de Björn y Benny de ABBA – pero dejó en Hannover al bajista, contratando como músico d

Firehouse - Firehouse (CBS, 1990)

El pasado 5 de abril falleció el cantante de Firehouse, Carl Jeffrey Snare, por un fallo cardíaco en un proceso cancerígeno que le había llevado unos días antes a pasar por un quirófano. Además de ser un seguidor fiel de la banda, les he visto dos veces en directo; una de ellas la recuerdo con especial felicidad por lo que disfruté (tocaron junto a unos fantásticos TNT).  Casualmente, la semana pasada en este blog hablaba, en los comentarios de un post, del legado de algunos músicos más o menos desconocidos por el "gran público" comparándolo con otros del mismo o menor valor idolatrados, quienes reciben homenajes y se les dedican calles. Con esa reflexión me quedé enganchado. Al repasar la discografía de Firehouse, me di cuenta de algo obvio: existen músicos que han dejado un legado en nosotros. Da igual lo importante que sean más allá de nuestras orejas. Nos pertenecen. Y C. J. Snare es, para mí, uno de esos músicos. Desde este debut que hoy comparto su voz me ha acompañ

Carlos Santana - "Europa" (CBS, 1976)

Es imposible no identificar esta canción con solo escuchar las cinco primeras notas. A pesar de ser instrumental es tan conocida que cualquiera con un mínimo de cultura musical podría “ cantar ” y reconocer las notas iniciales ( tan-tan-na-na-na-nanananá-tanananá…. ). Y cualquiera con un mínimo de sensibilidad también notará cómo se le eriza el vello. Es una melodía que llega al alma, triste y melancólica, una guitarra que habla y llora, que nos cuenta una historia y, sin necesidad de palabras, solo con las notas de la guitarra es fácil de entender. Pero veamos qué hay detrás de ella. Vamos a desnudarla y a comprenderla.

Boikot - Los ojos de la calle (Discos Barrabás, 1990)

  Hay música que corresponde a un momento concreto de nuestra vida y que, por edad usualmente, por cuestiones personales a veces, queda ahí anclada, como un bonito recuerdo. Música a la que no suelo volver casi nunca. Y ese caso lo representa perfectamente el debut de Boikot. En el devenir de la cultura rock madrileña se conformó, en la segunda mitad de los ochenta, un grupo de bandas jóvenes con unas sonoridades muy particulares, emparejadas con eso del rock urbano, pero tintado de una manera particular en la que escuchábamos las raíces de Leño o Burning junto con ramalazos unas veces punk, otras más metaleras, otras más seventies, incluso algo de blues. Ahí puedes meter a Esturión, Casablanca, Porretas o los mismos Boikot.  En medio de ese “fregao” musical cobró protagonismo Mariano García, polémico personaje, especialmente en sus últimos años. Generó negocio, oportunidades y ayudó a crear y mantener “la escena” madrileña a través de varias salas (Canciller, Barrabás), su labor promo